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Vashtorr, el Arquífice
Vashtorr, titulado como "el Arquífice" (Vashtorr the Arkifane en inglés), es un semidiós del Caos, que opera en su propia esfera de influencia y reina sobre la Forja de las Almas, origen de todas las armas e Ingenios Daemónicos de los Dioses del Caos.
Descripción[]
Vashtorr es una criatura de la Disformidad que, a pesar de su naturaleza daemonica, no está atado a ninguno de los cuatro Dioses del Caos. Es un semidiós, patrón de los inventores, ingenieros, científicos y artesanos que no atienden a ningún tipo de moral a la hora de avanzar sus investigaciones. Es la personificación de la necesidad mortal de entender la naturaleza para poder esclavizarla para, finalmente, poder obtener la apoteosis tecnológica a cualquier coste. Aunque posee un increíble poder, solo es una entidad menor al lado de los grandes Dioses, por lo que el objetivo final del Arquífice es la apoteosis y convertirse en el quinto Dios del Caos.
Como todos los seres de la Disformidad, no tiene una forma física definida, sino que adquiere una cuando es manifestado. En la Disformidad es una idea inconcebible, una masa informe de innovación y artificio, un esquema cuántico de cambios lógicos sin restricciones. Tal visión volvería loco a cualquier mortal, por lo que Vashtorr adquiere la forma de un humanoide escuálido, en el cual se mezclan lo orgánico y lo inorgánico, con armadura y alas metálicas y una tez con ojos robóticos.
El Arquífice es un ser muy desconocido, puesto que se ha aparecido a los mortales en muy pocas ocasiones a lo largo de la historia de la Galaxia. Los motivos detrás de esto son desconocidos, pero siempre que ha aparecido lo ha hecho como heraldo de la catástrofe. Su origen es, igualmente, desconocido: mientras que algunos criptoescolares piensan que fue creado por una raza antigua; otros creen que nació en la Disformidad tras los horrores de la Era Oscura de la Tecnología; por el contrario, hay algunos que creen que es lo contrario, y que es el causante de estos sucesos.
Sea cual sea su origen, no es un Príncipe Daemon ni otra entidad parecida, sino que tiene su propia esfera de influencia, y un papel único en el Gran Juego: es el maestro de la Forja de las Almas, un reino independiente en la Disformidad de hierro oscuro y vapor, donde se firman pactos oscuros y se producen transformaciones grotescas. A cambio de su servidumbre y un pago de almas, Vashtorr fusiona daemons con maquinaria, creando poderosos Ingenios Daemónicos y criaturas híbridas. Otros daemons, menos desesperados o con menos que ofrecer a las forjas, son simplemente esclavizados a la voluntad de Vashtorr durante cierto tiempo, uniéndose a sus huestes. Esta servidumbre se muestra mediante un collar, unos grilletes, una cadena ritual o un injerto mecánico que se convierte en parte de la forma física del daemon mientras dura su periodo de servicio.

Al contrario de lo que ocurre con otros daemons, la naturaleza de Vashtorr no es la mentira o el engaño, y sus contratos son directos y explícitos. Al contrario, utiliza la naturaleza violenta de los daemons en su contra, pues por cada derrota que sufre una criatura que tenga una deuda con él, más crece esta. Así, muy pocos daemons han logrado escapar de las garras de Vashtorr. La independencia de Vashtorr y la Forja de Almas se mantiene segura gracias a estas hordas de daemons encadenados, así como por su utilidad para los Dioses del Caos, pues ninguna de estas entidades desea ser la que pierda la lealtad de Vashtorr, pues este es el traficante de armas del Caos.
Cuando tiene que actuar en el Espacio real, Vashtorr recurre tanto a estos Daemons encadenados como a los Cultos del Arquífice, miles de almas mortales que sirven al Señor de la Forja de Almas como más piezas de sus mecanismos. Estos mortales, conocidos también como Engranajes de Vashtorr son tanto humanos como Marines Espaciales del Caos, que han elegido servir al semidios a cambio de las sustanciales y directas recompensas que este les ofrece.
Fuera de las fuerzas que pueda invocar o controlar en batalla, el propio Vashtorr es una entidad increíblemente poderosa. Ya sea reordenando los mecanismos de la realidad a su voluntad o volando por el campo de batalla sobre tormentas de electricidad disforme, el Arquífice es un daemon de maldad meticulosa y ordenada, cuya voluntad es tan inexorable como los mecanismos de una enorme e imparable máquina.
Historia[]
Poco se conoce de la historia de Vashtorr antes de la Era Indomitus, pues rara vez se presenta ante los mortales. En la Disformidad, sin embargo, el tiempo fluye de manera diferente, por lo que no se puede plantear exactamente el nacimiento de un Daemon, o incluso si alguna vez ha llegado a nacer.
Tras la Guerra de Vigilus, ya una vez que Abaddon el Saqueador logró retomar el control de la Espíritu Vengativo, la nave sufrió un ataque de origen desconocido. Los componentes mecánicos de la nave parecieron volverse locos y extraños zarcillos metálicos aparecieron por toda la nave, reformándola y liberando multitud de daemons esclavizados a la propia nave. Una vez llegó al centro de la extraña manifestación, el Saqueador se encontró con Vashtorr, que le ofreció un trato: el Arquífice necesitaba la ayuda de la Legión Negra para obtener la Llave, un objeto necesario para cumplir la profecía que Vashtorr creía que le convertiría en un Dios del Caos; a cambio, el daemon otorgaría a Abaddon las armas necesarias para la siguiente parte de su plan contra el Imperio, docenas de Pecios espaciales reformados y sometidos a la voluntad de Abaddon.
La primera parte del plan de Vashtorr para hacerse con la Llave fue el ataque al mundo de Magdalor, mundo natal del Capítulo de los Ángeles de Hierro. La Legión Negra lanzó un ataque a la "Corona del Ángel", Fortaleza monasterio de los Ángeles de Hierro, y masacraron a todos los miembros en ella, incluyendo al Señor del Capítulo Nymarn. En el Reclusiam saquearon una reliquia, un pilar de mármol que una vez sirvió como pedestal para la estatua de un Marine Espacial. No se sabe cual es exactamente el uso del pedestal, solo que es parte del artefacto que Vashtorr pretende unir, como su objetivo final.
Para proseguir con su objetivo, y para evitar malgastar las fuerzas de su Legión Negra, Abaddon propuso a Vashtorr formar pactos con señores del Caos independientes: a cambio de su apoyo militar, el Señor de la Guerra y el Arquífice entregarían un Arca del Augurio a su partida de guerra. Estas Arcas no eran sino enormes pecios espaciales con un portal disforme en su interior, a través del cual solo podían pasar los fragmentos de la Llave que recuperasen estos señores del Caos. Docenas de Arcas fueron lanzadas a la Galaxia, dispuestas a entregar a sus líderes los fragmentos del artefacto.
Otra de las apariciones de este daemon en el espacio real fue durante la destrucción de Malakbael por parte de Angron y sus Devoradores de Mundos. El Primarca había sido enviado a recuperar uno de los fragmentos más importantes de la Llave, pero su naturaleza iracunda le había llevado a destruir el planeta en el que se encontraba alojada para acabar con el Ingenio Coral que en él se encontraba. Después de la cataclísmica explosión que provocó que el planeta se dividiese en multitud de pedazos, Vashtorr se hizo con el control del Arca del Augurio Corazón Estigio y la condujo hacia lo que fuera el núcleo del planeta. Allí recuperó el fragmento de la Llave, el cual demostraba un poder extraordinario, y Vashtorr supo en ese momento que sería una de las piezas clave en la consecución de la Profecía.
Asalto a la Roca[]

Vashtorr se enfrenta al Gran Maestre Azrael
La acción más importante de Vashtorr fue el asalto a La Roca, Fortaleza monasterio de los Ángeles Oscuros en busca de uno de los tres fragmentos clave de la Llave. Dado que la localización de la fortaleza es un misterio celosamente guardado por los Ángeles Oscuros, Vashtorr tuvo que poner en marcha un plan con más de 300 años de preparación: haciéndose pasar por un avatar del Dios Máquina se infiltró en una fortaleza defendida por la Inquisición y el Adeptus Mechanicus, en la que había internado agentes y de la cual había estudiado a profundidad los planos y mecanismos, para encontrar una Inteligencia Abominable que le podía ofrecer el conocimiento que necesitaba. Esta máquina, llamada Miriada Orac, había sido utilizada por un Inquisidor del Ordo Astartes para rastrear los movimientos de La Roca, sin que este conociese la verdadera naturaleza del cogitador.
La Inteligencia Abominable y Vashtorr hicieron un trato: la máquina le ayudaría a encontrar la Roca, a cambio de que el Arquífice le cediese el control de un Arca. Así, la Orac pasó a fusionarse con el Arca más grande jamás creada, la Orac Desatada, que albergaba una enorme arma de poder inconmensurable, ingeniada por el propio Vashtorr, llamada "Deshacedor". Tras recabar el apoyo de la Legión Negra y los Guerreros de Hierro, cuyo Primarca era aliado de Vashtorr, el Señor de la Forja de Almas juntó una flota de tamaño considerable, necesaria para poder asaltar la Fortaleza de los Ángeles Oscuros. Utilizando todos los medios a su disposición, emboscaron a los Ángeles Oscuros en el Sistema Valvire, destruyendo varias de sus naves en los primeros instantes del enfrentamiento. Pese a la resistencia y tozudez de los Ángeles, estaba claro que era una batalla perdida. Todo quedó decidido cuando la Orac Desatada utilizó su extraña arma, diseñada específicamente para anular los Escudos de vacío de la Roca, y dejó la enorme Fortaleza a merced del desembarco de sus enemigos.
La lucha por la Roca fue encarnizada pero equilibrada, los leales defendiéndose de los traidores, perdiendo o ganando terreno en diferentes frentes. Pero el frente dirigido por Vashtorr, Gar Hathon de los Portadores de la Palabra y Lord Xorphas de la Legión Negra sería casi imposible de detener para los Ángeles. Fue necesaria la acción de dos de los mejores generales de los leales, Azrael y Lazarus, para enfrentarse a estos poderosos enemigos, pero aún así no fueron capaces de detener el avance, y el propio Azrael se vio envuelto en un combate singular con Vashtorr que sabía que no podía ganar.
Fue en este momento cuando Be'lakor, que veía al Arquífice como un rival y estaba celoso de su poder y sus avances, decició invadir la Roca junto a sus discípulos y enfrentarse a Vashtorr. Frente a un destacamento de Portadores de la Palabra y Legión Alfa, el Señor de las Sombras se presentó en la Roca, un tercer contendiente en esta batalla, que se enfrentó a Ángeles Oscuros y aliados del Arquífice por igual. El propio Vashtorr se vio arrancado de la batalla en el interior de la Roca y transportado a la superficie por Be'lakor quien, tras un breve intercambio de palabras, se lanzó contra el Arquífice en un combate Daemon contra Daemon. Los asaltantes de la Roca se vieron asediados en dos frentes, sin liderazgo del distraído Vashtorr y, pronto, asediados por los refuerzos imperiales que por fin llegaron a la Roca. Una vez humillado Vashtorr, sus planes frustrados, Be'lakor y sus fuerzas se retiraron de la Roca, no sin que antes Vashtorr tomase el control de todas las armas que pudo y lanzó un devastador ataque contra su enemigo, un último intento por mantener su dignidad.

Vashtorr y Be'lakor combaten sobre la superficie de la Roca, mientras sus seguidores se enfrentan bajo ellos
Vashtorr, todos sus planes frustrados por el Señor de las Sombras, se retiró del campo de batalla de vuelta a la Orac Desatado, que se retiró del Sistema. Pese a que Vashtorr fue repelido de la Roca, el fragmento de la Llave que en ella se escondía tenía una importancia vital, pues no se podía completar sin él, por lo que Vashtorr no se rendiría en conseguirlo, por lo que instaló una trampa en la mente de sus siervos capturados por los Ángeles Oscuros. Los Capellanes interrogadores supieron, mediante tortura, que Vashtorr estaría en las Estrellas Somnium y, así, Vashtorr guiaría a los Ángeles hasta el lugar donde se reformaría la Llave. Si Vashtorr no conseguía arrebatarles su fragmento, haría que el fragmento fuese hacia él.
Caliban renacido[]
Vashtorr había considerado correctamente el carácter de sus enemigos, y los Ángeles Oscuros se dirigieron en masa a las Estrellas Somnium, reuniendo alrededor del 75% de las fuerzas de los No Perdonados para el asalto a las fuerzas de Vashtorr. Aunque enviaron tropas a otros sistemas cercanos, la mayor parte de las fuerzas herejes se encontraban en el Sistema Idolator, y allí se dirigieron Azrael y muchos otros comandantes de los Ángeles Oscuros y sus capítulos hermanos.
Al llegar, descubrieron con horror y furia cual era el verdadero objetivo de Vashtorr: cada uno de los fragmentos de la Llave era, en realidad, un pedazo del destruido Caliban, que Vashtorr había reunido y convertido en el mundo daemónico de Rocainfame. Fragmentos de roca, de ruinas, de estatuas... eran todos trozos del mundo natal de los Ángeles Oscuros, unidos para servir como receptáculo para los tres fragmentos más importantes, imprescindibles para obtener su objetivo: Tuchulcha, un antiguo instrumento inteligente encerrado en La Roca; el Ouroboros; y el Corazón de Plaga. Con estos tres reunidos, Vashtorr podría reconstruir un artefacto creado en la Guerra en el Cielo, diseñado para crear túneles en la Telaraña. El Arquífice quería usarlo para encontrar una "Bóveda" dentro de la misma, donde se encuentra el secreto que necesita para su ascensión.
Pese al ataque de los Ángeles Oscuros, la oportuna intervención de los Ángeles Sangrientos y del Primarca Lion El'Jonson, no pudieron impedir el plan de Vashtorr. Aprovechando que la Roca estaba menos protegida por las tropas desplegadas en superficie, el Arquífice se infiltró en la fortaleza y entró en contacto con Tuchulcha, convenciéndola de unirse a él y teleportándose al núcleo de Caliban. Allí, los tres fragmentos se unieron y formaron el Motor Discordante. Las fuerzas imperiales se vieron obligadas a retirarse del planeta y del Sistema Idolatros, y Vashtorr se encontraba cada vez más cerca de lograr su objetivo.
Miniatura[]
Fuentes[]
- Arcas del Augurio - Abaddon, pp. 8-21.
- Arcas del Augurio - Angron, p. 40.
- Arcas del Augurio - Vashtorr, pp. 10-39.
- Arcas del Augurio - Lion.
- Boarding Actions - Cult of the Arkifane (9ª Edición).
- Army of Renown - Cogs of Vashtorr (9ª Edición).