La legión de tanques Lagartos Trueno fueron las fuerzas blindadas preeminentes del Imperium Pentus. En lo alto de su poder, la Legión tenía escuadrones de tanques adosados a todos los grandes ejércitos de los Cinco Primarcas y sus generales. El comienzo cronológico preciso de los Lagartos Trueno es desconocido, pero se sabe que la legión como tal existía antes del Imperio de Vulkan. En ese punto de la historia, las legiones de tanques eran en mayoría derivaciones y variaciones experimentales de diseños existentes de Predators y Leman Russ básicos. Provenían del planeta Argonauth, y conformaban la base de las FDP de ese mundo. La atmósfera de Argonauth era mayormente tóxica, y solo podían confiarse en tanques y transportes sellados allí para hacer la guerra.
La legión de los Lagartos Trueno se expandió luego que Vulkan liberara a su mundo del tirano Tyberos, y trasladaron sus instalaciones de fabricación de tanques al mundo forja de Laakmor. Este mundo había sido dejado destrozado por siglos de guerra, y gran parte de sus Tecnosacerdotes estaban muertos o enloquecidos, por lo que los inmensos patios polares de Titanes fueron convertidos en fábricas de tanques, y los desiertos ecuatoriales fueron rehechos en campos de pruebas y áreas de juegos de guerra.
Fue en Laakmor donde la legión comenzó a construir los que posteriormente serían sus famosos tanques superpesados. A medida que sus instalaciones y recursos se incrementaban, la legión de Lagartos Trueno se volvía más grande y más sofisticada. Estos tanques superpesados fueron los rivales de los legendarios Fellblades, Stormlords y Baneblades aún usados por varios Imperios Secundarios. Pero aún estaban superados por la pura potencia de fuego y defensas de los Titanes Warhound y sus hermanos más grandes.
Para el final del M56, Vulkan y los Cinco Primarcas se preparaban para una guerra a escala total con sus vecinos de la Perversión. Los Cultos Prometeanos de Vulkan y los Mechanicus de Ryza no poseían el conocimiento o habilidad para producir Warlords o Imperators a una escala industrial; se decía que cruceros enteros podían ser fabricados de forma más barata y fácil que un Imperator. Sin embargo, los Primarcas necesitaban vehículos capaces de luchar contra los numerosos Titanes e Ingenios Demoníacos de la Perversión de igual a igual.
Vulkan, el ingeniero más entusiasta entre los Cinco Hermanos, decidió remediar esto. Visitó al Comandante-Ingeniero de Laakmor, un hombre llamado Panzod B'olos, y le dio seis años para construir una nueva gama de supertanques, capaces de ir codo con codo contra lo peor que sus enemigos pudieran lanzarles. B'olos, un innovador ávido y brillante, saltó a esta oportunidad.
Vulkan asignó una fracción importante de sus fondos de guerra hacia Laakmor y sus patios alrededor. Además, le dio a B'olos un cuerpo de cultistas Prometeanos para que ayudaran a sus equipos de diseño y constructores. El Capitán Teltegan de la Comandancia de los Hijos del Trueno (uno de los veteranos que inicialmente había liberado a los Lagartos, irónicamente) también fue ordenado a Laakmor, para proveer de orientación táctica y estratégica a los diseñadores, y para ayudar a probar los nuevos diseños en juegos de guerra contra los tanques de su propia Comandancia. Los Hijos del Trueno eran renombrados por su afinidad al combate con tanques, el cual se reflejaba en la abundancia de vehículos que podían desplegar. Además de todo esto, Vulkan permitió a B'olos a conseguir inspiración de cualquier fuente disponible; humana o alienígena, antigua o nueva. B'olos tomó ventaja de esta oferta, y envió a sus investigadores a ir por la galaxia buscando los mejores ejemplos de sistemas de armas y defensa que pudiera adoptar, desarrollar, o mejorar. Desde los T'au, pasando por los Groevianos, los Vorlic-Taar y el Reino Pretoriano, quienes le consiguieron mucha inspiración.
Luego de los seis años, B'olos había terminado ya los diseños de sus tanques, y sus prototipos habían sido probados. Para el momento de la Guerra de los Primarcas, B'olos ya había completado sus legiones de tanques y estaban listas para llevar la guerra contra la maldad del oeste.
Las clases principales de tanques de los Lagartos Trueno eran (esta lista no es exhaustiva):
- MK III ‘Megasaurio’ – El equivalente a tanque de batalla principal. Eran más grandes que un Baneblade, y llevaban aceleradores lineales avanzados, matrices de baterías de cañones láser, escudos de vacío multicapa, y sistemas de misiles guiados, así como un fuerte blindaje de adamantio. Además, estaban equipados con los últimos avances en interfaces del Espíritu Máquina, para darle a sus pilotos humanos la mejor oportunidad de entablar combate con múltiples objetivos. Eran rápidos, poderosos, y versátiles.
- MK VII ‘Velociraptor’ – Un tanque explorador. Aunque ligeramente más grandes que un Leman Russ, los Velociraptores estaban compuestos casi únicamente de un motor, con armamentos mínimos. Sin embargo, sus reactores les hacían increíblemente rápidos, y cuando estaban estacionarios, éstos podían ser usados para mejorar la potencia de fuego de su única torreta láser a casi cien veces su potencia.
- MK II ‘Tricératops’ – Un destructor de titanes. Los Tricératops estaban armados y blindados de forma similar a los Megasaurios, con excepción de su gran cañón Acometida de tres barriles; un macrocañón Gatling de alta tasa de disparo, el cual requería que el tanque se anclara en el suelo antes de disparar, o de lo contrario el retroceso lo volcaría (una prospectiva no deseada para los tripulantes del tanque o las tropas alrededor).
- MK I ‘Pterasaurio’ – Muchos generales se refieren al Pterasaurio como lo que un Hydra quiere ser cuando grande. Un Pterasaurio es un tanque antiaéreo. No solo posee defensas similares al Megasaurio, sino que reemplaza sus armas por docenas de baterías antiaéreas, misiles Mantícora tierra-aire, misiles antiaéreos Deathstrike, y matrices de cañones láser Ícaro. En batallas mayores, los puestos de mando del Pentus enviarían a un único Pterasaurio cerca de sus bases, y podían asegurarse de que ningún vehículo aéreo podría alcanzarles (por supuesto, los ataques orbitales seguían siendo una preocupación, pero siempre lo habían sido en cualquier batalla planetaria). Los Pterasaurios, aunque ligeramente más pequeños que un Baneblade, eran más voluminosos debido a las grandes cantidades de munición que requerían almacenar, haciéndolos muy lentos.
- MK V ‘Tiranosaurio’ – Un tanque verdaderamente masivo, el Tiranosaurio era mucho más grande que cualquier vehículo superpesado del Viejo Imperio, y tenía un tamaño más cercano a un Transporte Leviathan, de los viejos mundos forja de Outremar ya muertos. Superaba en masa incluso a un Titán Imperator en términos de desplazamiento. El Tiranosaurio era el pináculo de la tecnología de tanques humana. Sus inmensos reactores podían dar energía a toda una ciudad colmena por tres días, y era más que suficiente para potenciar su vasta plétora de sistemas de armas. Su arma principal era su cañón de lanza montado en una torreta, un láser abrasador de poder impío. Este era suplementado por sus torretas secundarias de cañones de riel, cápsulas de misiles Apocalipsis, cañones volcán, matrices de láser antiaéreos y armas de asedio. Además podía montar escudos de vacío y docenas de metros de blindaje de casco exterior. Su Espíritu Máquina estaba muy cerca de una IA verdadera, sin cruzar esa línea, y su tripulación podía usar un extenso traje sensor en lo profundo del corazón del Tiranosaurio. Era nominalmente un vehículo de oruga, pero poseía motores gravíticos secundarios, que permitían que el tanque se elevara unos cuantos metros del suelo por casi veinte minutos. Esto se usaba principalmente para evitar que el vehículo se atascara, y para cruzar cuerpos de agua y zonas pantanosas, permitiendo al vehículo viajar a velocidades relativamente rápidas (más rápido que un Imperator, al menos). Algunos cronistas vanidosos de la historia creían que los Tiranosaurios eran proyectos soberbios para el mismo B'olos. Ciertamente eran caros de producir, y estaban muy superados en número por los Megasaurios y Tricératops. Sin embargo, pese a esto, el Tiranosaurio aún era considerado el rey de los tanques, y en consecuencia, el primero de ellos construido fue llamado ‘Tiranosaurio Rex’.