Relato presentado al concurso del VIII GT de Talavera. Escrito por Àngel Bou i Riu.
El tecnoadepto no tenía nombre, o si lo tenía lo había olvidado hacia mucho tiempo, cuando paso a formar parte del sacerdocio del dios máquina. Suponía qué en el momento de su nacimiento, sus padres le habrían dado un nombre, posiblemente inspirado en alguno de sus antepasados, o quizás en alguno de los héroes del imperio, para darle a la pequeña criatura que habían traído al mundo un nombre de grandeza. A veces el tecnoadepto fantaseaba con que su nombre real, ese que ya no recordaba, fuera el de alguno de los hijos del Emperador, como Sanguinius, o Dorn, aunque el que realmente le gustaba era Jaghatai.
Aunque lo más probable era que su nombre hubiera sido el de alguno de los héroes más reverenciados del imperio, como Macharius o Malcador, o de su mundo-Voss Prime, quizás Inviglio, en honor a la Legio Invigilata. De hecho, había oído a algunos adeptos externos al culto máquina llamarse entre ellos con nombres parecidos. Si, probablemente su nombre original había sido Inviglio, Invigilato o alguna variación parecida. De todos modos, eso era irrelevante, ya que el único nombre que debía importarle era el que le había dado el tecnosacerdocio.
- -**Adepto TD-X456-7. Tu falta de eficiencia es exasperante. **-dijo su supervisor, con el sonido mecánico de sus vocoproyectores, al descubrirle otra vez ensimismado en sus pensamientos. -**Reduce tus próximos dos periodos de descanso en un 10%, dedica ese tiempo a revisar los tecnocánticos de mantenimiento de las plantas de reutilización de agua.**
-Si Magus Secundus.- fue la única respuesta del tecnoadepto, mientras agachaba la cabeza
El Magus Secundus, responsable del funcionamiento de las instalaciones depuradoras del cuadrante Delphi de la colmena Voss-Tetha, no pareció escuchar su respuesta, y continuó su camino por entre las pasarelas metálicas suspendidas sobre los grandes depósitos cilíndricos de agua.
TD-X456-7 continuó, al menos aparentemente, trabajando totalmente dedicado a su labor, aunque en realidad no hacía más que recalibrar las sondas de análisis una y otra vez, ya que solo podía pensar en Ella.
Al cabo de medio periodo de tiempo standard, el adepto se levantó, y se dirigió hacia los niveles inferiores. Había descubierto hacía tiempo, que si caminaba de manera decidida y sin dar explicaciones, nadie solía pedírselas. Esto le daba una cierta libertad de movimiento, impensable para el resto de adeptos, ya que él podía moverse por prácticamente toda la instalación sin esperar demasiadas preguntas. Esa era posiblemente la única ventaja de ser un Calibrador de sondas especializado de 1er nivel, ya que unas instalaciones de este tamaño requerían una inmensa red de analizadores, medidores y sondas repartidas por incluso los más recónditos rincones.
Descendió lentamente por el inmenso laberinto de escaleras, plataformas, salas de maquinaria y depósitos de productos químicos que se encargaban de convertir el agua de desecho de la colmena en agua otra vez apta para el consumo, apestosa a veces, salobre a menudo y no siempre tan transparente como debería, pero al menos se podía beber con cierta tranquilidad de no coger parásitos intestinales.
Durante su camino, se detuvo varias veces para calibrar algunas sondas de pH y conductividad, cambiar los filtros a medidores de turbidez y recargar los reactivos de los espectrofotómetros, así tendría una excusa plausible si era descubierto fuera de su ruta establecida de mantenimiento.
Al cabo de unos minutos llegó a su destino, el nivel subterráneo bajo los depósitos de decantación, donde se encontraban los grandes filtros que trataban el agua procedente de los depósitos situados en el nivel superior.
Junto a la plataforma de control de los filtros, se encontraba Ella.
La tecnosierva estaba conectada mediante unos cables a su puesto de descanso, junto al modulo de control de los sistemas de filtrado. Por lo que TD-X456-7 habia descubierto, su función principal era abrir y cerrar, gracias a la fuerza aumentada de sus brazos cibernéticos, las grandes válvulas que dirigían el agua hacia un lugar u otro.
A simple vista era muy difícil descubrir si había sido un hombre o una mujer en su vida previa; sus piernas habían sido reemplazadas por unas orugas mecánicas, su torso unido a la máquina impedía discernir su género a simple vista, y sus brazos cibernéticos eliminaban toda posible idea de feminidad, e incluso su rostro, cubierto en gran medida por una máscara metálica no daba una idea clara de cual había sido su identidad. Así era el proceso de convertir a un criminal en un Siervo, desposeían a los pobres desgraciados de todo rastro de humanidad, de toda dignidad como persona, reduciéndolos a meras máquinas, simples herramientas al servicio del Omnissiah.
Pero con Ella habían cometido un error: habían olvidado Su Voz.
Su Voz seguía siendo humana, y tenia un tono y una cadencia que habían hecho que TD-X456-7 perdiera la cabeza, y que soñara continuamente en volver a su lado para poder escucharla nuevamente.
TD-X456-7 conocía los periodos de descanso de Ella, y sabia que durante el próximo periodo standard permanecería recargando sus baterías y realizando los protocolos de diagnóstico.
Con la seguridad que da la práctica, retiró una cubierta situada en el lateral de su cabeza, y adelantó estos protocolos para que se iniciaran de inmediato.
Ella comenzó a hablar: “iniciando procedimiento de diagnóstico completo del Tecnosiervo TS- ZS-756134-Sigma, primera etapa, revisión de las orugas laterales izquierdas…”
El proceso de diagnóstico se alargó durante algo más de medio periodo standard, durante el cual el tecnoadepto se quedó sentado junto a Ella, escuchando como Su Voz, suave y melosa, recitaba todos y cada uno de los diferentes procesos de revisión y mantenimiento. Su Voz era solamente interrumpida por el suave zumbido de los servomotores de sus miembros realizando los procesos de calibración.
Cuando estaba con Ella, oyendo Su Voz, el tecnoadepto se sentía feliz, sus preocupaciones desaparecían y su alma se sentía tranquila y confortada.
- **Adepto TD-X456-7, esta zona no está asignada a tus procedimientos de mantenimiento**- resonó la voz metálica del Magus Secundus, que acababa de aparecer tras uno de los colosales filtros de agua.-**Informa sobre el motivo de tu presencia aquí**
Eehhhh, Sire.-balbuceo el tecnoadepto.-Estaba realizando un diagnostico al tecnoservidor, me había parecido que no realizaba sus tareas con la eficiencia esperada.-Mintió TD-X456-7, esperando que su improvisada excusa sirviera de algo.
- **Ilógico**.-Bramo la voz artificial del Magus.-**Estas no son tus tareas asignadas, ni corresponden a tu área de especialización**
Mientras buscaba otra excusa que pareciera mas creíble, vio como los implantes aumenticos que reemplazaban los ojos del Maus le enfocaban bajo su capucha.
- Tus constantes están alteradas, tu pulso es un 27% demasiado alto, y tu sudoración ha aumentado un 18% desde mi llegada, sin ningún cambio ambiental que lo justifique** dijo con voz totalmente falta de emociones.-**Mientes**
El tecnoadepto calló y agachó la cabeza, ya no había nada que pudiera decir en su defensa, el Magus había emitido un veredicto, solo le quedaba conocer su castigo.
- Tus periodos de descanso serán reducidos a la mitad durante 7 rotaciones planetarias, el tiempo extra lo emplearas en tareas de mantenimiento de bajo nivel**-Anunció por su vocoamplificador. **Espero que estas correcciones sean suficientes, y que no tenga que realizarse ninguna otra amonestación.**.
El tecnoadepto no fue capaz de reunir fuerzas ni para contestar a su superior.
Las 7 siguientes rotaciones planetarias se le hicieron eternas, aunque afortunadamente, el exceso de trabajo le impidió volver a verla, al menos físicamente, ya que en su cabeza no hacia otra cosa que imaginarse junto a Ella, escuchando Su Voz. Aún así, el miedo a ser descubierto le hizo esperar otras 10 rotaciones standard antes de volver a Ella, confiado en que el Magus Secundus estaba satisfecho.
Esta vez fue a verla durante su periodo de descanso, ya que, aunque no dispondría de tanto tiempo al menos no despertaría tantas sospechas.
El área de los filtros estaba desierta, como era habitual, y Ella estaba en su cubículo, recargando las baterías. Rápidamente inició los protocolos de diagnóstico, y ella comenzó a hablar: **“iniciando procedimiento de diagnóstico completo del Tecnosiervo TS-ZS- 756134-Sigma”**.
TD-X456-7 cayó al suelo y comenzó a llorar.
Le habían quitado Su Voz, le habían quitado lo único que daba sentido a su vida. Tal y como esperaba, la voz del Magus Secundus resonó a su espalda:
- **Adepto TD-X456-7, tu falta de dedicación resulta molesta.**.-anunció con su tono de voz monocorde.-** quizás sea hora de darte lo que tanto deseas.**
Epílogo[]
El anteriormente llamado Adepto TD-X456-7, que siempre había soñado con tener un nombre importante, era ahora el Tecnosiervo TS-ZS-756134-Sigma-Bis, auxiliar del lavado de filtros de la depuradora del cuadrante Delphi-Voss-Tetha.
Aunque su mente había sido totalmente borrada por el proceso de conversión, y su personalidad ya no existía, sentía un pequeño consuelo en el interior de su alma, cuando cada noche, al recargarse, podía escuchar la voz de Ella, recitando los protocolos de diagnóstico.
Aunque el Magus Secundus le hubiera extirpado las cuerdas vocales, y las hubiera reemplazado por partes sintéticas, para el, Ella siempre tendría la misma voz.