Quixos

Plantilla:MascotaMechPatrocina

A la edad de 176 años, el Inquisidor Quixos había descubierto y ajusticiado a más de 1.800 herejes y enemigos del Imperio.

Historia

Durante una campaña llevada a cabo en Lackan XV, fue gravemente herido por un demonio al clavarle las garras en el corazón. La herida no lo mató, pero un trozo de su garra quedó incrustado en el interior del inquisidor. Pese a acabar con el demonio, Quixos se dio cuenta de que si retiraba ese trozo de garra del corazón, moriría. Descubrió que con esa garra incrustada, su potencial psíquico aumentaba, pues actuaba de nexo con la disformidad (aunque el proceso mutaba su cuerpo), por lo que decidió investigarse a sí mismo, ganándose una respetada reputación entre el resto de los inquisidores.

Cuando alcanzó los 200 años, Quixos se topó con el Sendero Místico (una organización de comerciantes y nobles del planeta Maginor que utilizaba artefactos disformes para incrementar su influencia y fomentar las ventas.)

En lugar de destruirlos, Quixos los investigó, descubriendo que esas prácticas pasaban de generación en generación como algo normal, llegando a la conclusión de que la energía del caos podía ser domesticada y usada para hacer el bien.

Defendía que la energía disforme no es malvada, sino que eran las personas de negro corazón quienes la corrompían. Durante años, entabló relación con el sendero Místico, y gracias a estos acuerdos, le proveyeron de importantes artefactos para su estudio. Estas prácticas le hicieron entrar en conflicto con otros inquisidores.

Helgrund

El inquisidor Helgrund paso los 30 primeros años como inquisidor buscando el ancestral "Mallus Codicium". Cuando finalmente descubrió que reposaba en una de las estanterías de la Biblioteca de Othella en el planeta Zandrim Prima, supo que había concluido su búsqueda; pero cuando llegó, descubrió incrédulo que el libro se lo habían llevado hacía meses.

El Mallus Codicium era un texto herético para invocar demonios de la disformidad, y el inquisidor Helgrund estaba convencido de que tenía que ser destruido para que no cayera en malas manos. Tras meses de exhaustivas investigaciones llego a Maginor y descubrió el Sendero Místico. Lo que encontró allí le horrorizó, pues utilizaban artefactos corruptos sin ningún tipo de precaución. El inquisidor Helgrund, lleno de ira, se preparó para destruir esta organización, y torturó e interrogó a todos cuantos caían en sus manos hasta dar con el centro de la cuestión.

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Quixos se enfrenta al Inquisidor Eisenhorn

Tuvo que pelear contra criaturas medio poseídas por demonios y cultistas que disparaban unos proyectiles demoníacos que pudrían la carne rápidamente tras el impacto. Aun así, el inquisidor llegó al Sancta Sanctorum de la secta. Con la ayuda de los Redencionistas y los arcoflagelantes que el cardenal de Maginor le había proporcionado, se enfrentó al líder de la secta y sus huestes, que no era otro sino Quixos.

Estaba deformado y enloquecido por los poderes del caos, poseía el tomo maldito y, aun asombrado de que un inquisidor tan joven hubiera llegado tan lejos, estaba tan decidido a darle a aquel mocoso una lección.

El trabajo de Quixos había dado sus frutos, sobre todo en la forma de dos huéspedes demoniacos: Cherubabel y otra entidad aún desconocida que se hacía llamar a si misma Prophaniti. Con ellos, Quixos había acabado con todos los agentes imperiales que seguían sus pasos. Además, había creado lo que el denominaba "guardianes de almas", seres capaces de canalizar la energía disforme para proteger a los que estaban a su alrededor de las energías del caos. Todo esto con la ayuda del "Mallus Codicium".

Helgrund y Quixos se enfrentaron en combate singular, pero al final, Quixos venció gracias a que empuñaba una espada demonio que contenía la esencia de Karnagar el Mortífero. Esta espada se clavó en el abdomen del inquisidor y exploto en llamas, incinerándole, pese a que este estaba machacando los escudos psíquicos de Quixos.

Eisenhorn

Tras esto, Quixos continuó sus estudios e investigaciones durante más de un siglo, siendo de gran utilidad para acabar con enemigos del imperio: En Danakin II, la atadura a la que había sometido al demonio Diabolan le permitió conquistar la fortaleza orka de Mekrok. Al final, sus detractores en la Inquisición se unieron contra él y el inquisidor Eisenhorn le declaró, a él y a sus estudios, Extremis Diabolus en el año 342 del milenio 41. Fue perseguido y ejecutado tres años después por una cámara de 5 inquisidores, encabezados por el propio Eisenhorn.

Aún hay quien dice que los métodos de Quixos eran correctos, pues acabo con muchos enemigos, pero otros muchos afirman que no hay nada bueno en el caos. Quixos, para estos, era una marioneta de los dioses del Caos que tenía que haber muerto en Lackan XV.

Apariencia

Portaba una servoarmadura cubierta de runas y signos del caos corroída por la podredumbre, se podía ver en su hombrera el icono de la Inquisición, en medio de toda la corrupción. Llevaba consigo una espada demoníaca cubierta de runas y colmillos, que al blandirla, no era más que una forma neblinosa a gran velocidad.

Fuentes

• Eisenhorn, Xenos, por Dan Abnett

• Eisenhorn, Hereticus, por Dan Abnett