 |
El contenido de este artículo pertenece a la saga No Oficial de Balhaus, que ha recibido el Sello de Calidad Wikihammer.
¡Disfrútala! |
Cambios físicos experimentados en un sujeto masculino al convertirse en soldado de la Legión de la Cruz de Hierro
El Proceso de Génesis, o también llamado científicamente Adecuación SADFA (Sintetización y Activación Dirigida de Fenotipos Artificiales), es un método mediante el cual el físico y la mente de un ciudadano de Balhaus se transforman en los de un soldado apto para servir en la poderosa Legión de la Cruz de Hierro.
Una vez seleccionados de forma exhaustiva, los candidatos se someten a un proceso en varios períodos, el cual es llevado a cabo y controlado en todo momento por científicos especializados en estas lides en colaboración con las casas Bluthaiden, Krautzmitt y Wassengeist, las cuales supervisan el progreso y adecúan a los candidatos de forma eficiente, estandarizando un proceso que lleva repitiéndose y mejorándose desde el principio de la andadura de Balhaus como civilización independiente.
Etapas
El tratamiento consta de las siguientes fases:
Fase 1: Implantación del patrón de genotipos acelerados
Esta acción se realiza para todos los individuos de Balhaus dado que la implantación se lleva a cabo antes de que nazcan, concretamente en el cuarto mont de gestación como parte del proceso de depuración y mejora genética.
El Recherlung se encarga no sólo del seguimiento de las condiciones del futuro balhausita a lo largo del embarazo con un control focalizado en madre y feto, sino también de proporcionarle una serie de condiciones genéticas que le ayudarán en su desarrollo y que lo predispondrán para unirse a la Legión de la Cruz de Hierro si en el futuro decide hacerlo. Esto se llevaba a cabo inoculando en el feto una plantilla estándar de información genética creada mediante programación biológica avanzada, además de un poderoso catalizador de asimilación que permitía al futuro sujeto aceptar el nuevo ADN mientras se desarrollaba sin problemas. Después de muchas generaciones, esta acción ya no es necesaria dado que los futuros balhausitas ya nacen con estas características de forma natural, pues la genética ha evolucionado para adaptarla naturalmente heredándola de sus progenitores.
La información genética inoculada consta de dos partes, una activa que corrige posibles defectos antes de que se produzcan (enfermedades hereditarias, errores cromosómicos o mutaciones no deseadas que pudieran darse, si bien con el control genético estándar estos casos se dan en menos de 0,0001% de los casos) y otra latente, la cual contiene una serie de variaciones genéticas específicas que transformarán el cuerpo del huésped en futuras fases si llega a activarse.
La inoculación del patrón de genotipos a mitad de gestación asegura que gracias a la parte activa los nacidos en Balhaus estén libres por completo de problemas genéticos (aunque se trata de un mero proceso de seguridad, pues los genes heredados son limpios y controlados), mientras que la pasiva permanecerá latente durante toda la vida del individuo sin afectarle lo más mínimo, salvo que sea activada de forma externa y deliberada con fines específicos.
Esto significa que aquellos que no desean unirse a la Legión no sufren efecto secundario alguno debido al patrón de genotipos, sino que sólo se benefician de la parte que corrige los posibles defectos que su ADN pudiese tener, mientras que los otros pasan a la siguiente fase.
Fase 2: Activación de genotipos
Si se considera que el candidato es aceptable, pasa las pruebas y decide convertirse en soldado de la Legión de la Cruz de Hierro, se procede a esta segunda fase no más tarde de los 7,5 ciclos (alrededor de los quince años de edad de Terra). Mediante un complicado proceso gradual y aplicación de dosis de radiación controladas, el ADN latente del patrón se activa acelerándose la asimilación y produciéndose los primeros cambios, los cuales incluirán:
- Desarrollo incrementado de masa muscular
- Fortalecimiento de la constitución general
- Crecimiento óseo
- Adecuación glandular
- Optimización y adecuación orgánica
El tiempo de esta fase de activación ronda el medio ciclo, y como resultado el individuo crece y se potencia su musculatura de forma acorde, así como el equilibrio hormonal necesario. Los órganos internos se adaptan a los cambios y mejoran su funcionamiento y capacidad para conseguir un rendimiento metabólico superior.
Este proceso resulta algo doloroso y molesto para el candidato en ciertos períodos, y para paliarlo debe ser acompañado por un constante estímulo físico en forma de entrenamiento que le permita adaptar su cuerpo a los rápidos cambios producidos por la asimilación del nuevo ADN activado y los radicales cambios orgánicos. Como consecuencia, al final de la fase se obtiene un ser humano físicamente superior, con fuerza, resistencia, tamaño y agilidad ampliamente desarrollados. El resultado estándar es un soldado de alrededor de 210 cm. de altura –o incluso superior–, entre ciento veinte y doscientos kilos de peso, con fuerza diez veces superior a la de un balhausita corriente e increíblemente rápido para su gran constitución.
Fase 3: Aumento cognitivo y sensorial
Mientras se consigue el físico apropiado, el proceso se centra también en las habilidades cognitivas y sensoriales del individuo. Es la fase más larga y se ejecuta en paralelo a partir de la mitad de la anterior durante un período total que se extiende 1/4 de ciclo. La evolución de esta fase consiste en el uso progresivo de una compleja combinación de sustancias farmacológicas más la aplicación intensiva de lo que los científicos de la Casa Krautzmitt llaman el Vector Sináptico. Se trata de un ingenio que genera una alta concentración de ondas dirigidas, las cuales junto a los preparados químicos concretos son capaces de aumentar significativamente el rendimiento de diferentes zonas del cerebro. El resultado se focaliza en el incremento exponencial de las siguientes capacidades:
- Percepción sensorial. Los sentidos multiplican comúnmente por diez su agudeza.
- Capacidad de razonamiento. Gracias a la propagación de neurotransmisores adicionales se incrementa la velocidad y cantidad de procesamiento mental.
- Memoria. Se aumenta gracias a la extensión intensificada de las redes neuronales.
- Aumento de los reflejos innatos. Reduce el tiempo de reacción del individuo hasta en veinte veces.
- Implementación psíquica. Aquellos individuos dotados de capacidades psíquicas también se beneficiarán de un aumento generalizado de las mismas, para cuyo control necesitarán tener un estricto control y supervisión externa.
Todo esto convierte al individuo tratado en un soldado eficaz e inteligente, capaz de tomar con rapidez decisiones difíciles incluso bajo presión, de analizar el medio y la situación determinando las opciones más favorables y de memorizar los detalles más nimios de su experiencia de combate. Adicionalmente también es capaz de controlar sus reacciones, permitiéndole no sentir miedo e incluso ignorar el dolor cuando sea necesario, además de poder usar sus nuevos sentidos en todo su potencial. Como efecto secundario de este proceso, las capacidades emocionales del individuo se ven mermadas ya que no serán necesarias para el desempeño de su futura labor.
Fase 4: Implantación de la GIRC
La última fase del Proceso de Génesis consiste en dotar al individuo con la GIRC, que es básicamente una glándula artificial cuya función principal consiste en controlar y optimizar todos los procesos físicos y químicos que se producen en el organismo. La GIRC sintetiza y genera una sustancia conocida comúnmente como Niebla Mecánica, un compuesto sintetizado en forma de plasma que contiene una alta concentración de dispositivos autónomos compensadores, o Nanobiobots.
Mediante estos dispositivos, la GIRC es capaz de configurar el organismo para obtener el máximo rendimiento en cualquier situación, funcionando prácticamente como una inteligencia artificial que prepara y dispone el cuerpo para encontrarse en el mejor estado posible atendiendo a las condiciones externas. El funcionamiento de la GIRC ha sido mejorado y desarrollado durante años en combinación con una serie de prácticas que permiten su uso ininterrumpido y ausencia total de rechazo por parte del organismo, si bien su implantación sólo es posible en entornos preparados previamente y con suficiente capacidad de tolerancia, lo cual sólo es posible en el físico de los Legionarios de la Cruz de Hierro que hayan superado las fases previas de preparación del Proceso de Génesis.
La GIRC se inserta en la cavidad pectoral en el lugar donde se encuentra originalmente el Timo, que es sustituido dado que en el momento de la implantación ya se han anulado naturalmente por completo sus funciones, cuando el sujeto ya ha superado la pubertad. Una vez introducida, la glándula comenzará a tomar el control de todos y cada uno de los procesos que se dan en el organismo y a generar nanobiobots, los cuales seguirán sus órdenes.
El proceso en mujeres
El Proceso de Génesis también es aplicable a las mujeres y con los mismos parámetros, si bien los resultados no son los mismos que en el caso de los hombres. Las mujeres sometidas al proceso desarrollan su musculatura y altura pero en un grado muy inferior al de sus compañeros masculinos, produciéndose cambios corporales que aumentan su tamaño hasta los 190 centímetros e incrementan su masa muscular.
No obstante, sí que sufren un incremento de sus capacidades cognitivas y psíquicas en un porcentaje notablemente superior al de los hombres, con lo cual adquieren habilidades mucho más focalizadas e intensas que éstos.
Conclusiones
Tras la implantación de la GIRC y la finalización del Proceso de Génesis, en total un proceso que abarca un ciclo completo, el resultado obtenido es un ser humano evolucionado, con más fuerza, inteligencia, reflejos y cognición superior en general. Adicionalmente a esto el envejecimiento celular se ralentiza drásticamente por la acción de los nanobiobots, lo cual hace que el individuo pueda alargar su ciclo vital indefinidamente, existiendo soldados de la Legión de la Cruz de Hierro que han vivido durante siglos y siglos convirtiéndose en auténticos estandartes de sus Divisiones.
Aparte de esto, los soldados de la Legión de la Cruz de Hierro reciben una constante preparación en términos militares, pero también en otros ámbitos, aferrándose a un conjunto de valores que si bien predominan en todos los habitantes de Balhaus lo hacen con mayor incisión en estos como representantes de la fuerza armada de Balhaus.