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Comandante Aramus de los Cuervos Sangrientos
La Primera Cruzada Aureliana fue un conflicto librado a finales del M41 en el subsector Aurelia del sector Korianis, entre los Marines Espaciales de los Cuervos Sangrientos, los Orkos del Mekániko Badzappa, los Eldars del Mundo Astronave de Ulthwé y una Flota Enjambre Tiránida.
Historia
El Subsector Aurelia, del Sector Korianis, ha sido durante largo tiempo profundamente importante para el enigmático Capítulo de los Cuervos Sangrientos, tanto como fuente de nuevos reclutas para el Capítulo, que se ha basado en movilizarse en flotas, como en una fuente principal de tecnología, armamento y otros objetos producidos en su capital, el Mundo Colmena de Meridian. En un momento desconocido del 41º Milenio, el Comandante Aramus de la Fuerza de los Cuervos Sangrientos y el Sargento Tarkus lanzaron un profundo asalto sobre el Mundo Feudal de Calderis para ayudar a su Capitán Davian Thule y su Compañía de Astartes a enfrentarse a una fuerza de Orkos que estaban desafiando a las gentes de Calderis. Los Neófitos de los Cuervos Sangrientos llevados desde el Subsector Aurelia fueron necesitados más que nunca tras las terribles pérdidas que se produjeron durante la campaña conducida por el Capítulo en el Sistema Kaurava. Cuando el gruo de asalto de los Cuervos Sangrientos barrieron a los Orkos fueron enfrentados al Mekániko Badzappa y su Kamión de Guerra. Aunque el Mekániko huyó, los Astartes derribaron la mina por la que los Orkos habían asaltado el asentamiento humano en Calderis y se proclamaron victoriosos.
Los Cuervos Sangrientos que atacaron desde el Crucero de Asalto Armageddon a continuación fueron enviados a un poblado en Calderis donde el Sargento Explorador Cyrus les estaba esperando para ayudarles en la defensa contra otro asalto Orko. El grupo de asalto consiguió abrirse camino hacia los Cuervos Sangrientos que comandaban la defensa del poblado, el Sargento Avitus, rescatarlo y salvar al poblado de los Orkos. Entonces los Cuervos Sangrientos recibieron información de que los Orkos habían atacado dos localizaciones claves más en Calderis y comprendieron rápidamente que alguien con mayor habilidad táctica que un Pielverde convencional estaba al mando de los Orkos. El primer ataque fue liderado por un Noble Zoldado de Azalto llamado Skykilla y el segundo realizado por el Kaudillo Gutrencha. Después de su victoria sobre los Orkos, los Marines Espaciales extrajeron información de Skykilla y Gutrencha descubriendo que ambos habían visitado la Mina Felhammer recientemente. También descubrieron que el Mekániko Badzappa también estuvo allí. El Sargento Cyrus permaneció a bordo del Armageddon para proporcionar apoyo técnico mientras la fuerza de asalto Astartes se movilizó para expulsar de Calderis al resto de Orkos. Cuando los Astartes entraron en la mina descubrieron que un Exarca Eldar de la Telaraña y su séquito ya se encontraban allí pero se desvanecieron antes de que pudieran enfrentarse, justo cuando los Orkos atacaron. Los Astartes fueron rescatados de los artilleros Orkos gracias al Sargento Thaddeus. Por el camino se encontraron a Badzappa y su peña mientras estaban bajo un ataque de un Brujo Eldar y una Compañía de Guardianes. Aunque los Astartes mataron al Brujo, el astuto Mekániko escapó una vez más. Antes de que el Brujo moriría, habló de la existencia de un enemigo mucho mayor que ponía en peligro a todo el Subsector, pero los Cuervos Sangrientos permanecieron despreocupados de la información que obtuvieron del balbuceo aleatorio de un miembro de una raza xenos conocida por su duplicidad. Los Cuervos Sangrientos viajaron entonces a la jungla del Mundo Letal de Typhon Primaris para eliminar la actividad Eldar, quienes habían sido detectados en ese mundo. Un Exarca de la Telaraña estaba dando caza y revolucionando a los Orkos Zalvajes del Klan del Zol Malvado, localizado en las junglas de Typhon Primaris. Tanto él como su grupo debían ser eliminados. Este Exarca mencionó nada menos que al denominado como "gran enemigo" una vez se enfrentaron a los Cuervos Sangrientos. En ese momento el Capitán Davian Thule pidió a los Eldars que regresaran a Calderis ya que el Mekániko Badzappa estaba lanzando un ataque contr la capital del planeta desértico, y sus ciudadanos estaban informando de que las plantas mutaban y que pequeñas criaturas púrpuras estaban matando al ganado. Los Marines Espaciales regresaron a Calderis y finalmente mataron al Mekániko Orko y sus chikoz, pero justo a continuación fueron asaltado por los Tiránidos , formando parte de una escisión de la Flota Enjambre Leviathan que habían entrado en el Subsector Aurelia en su intento de devorar todos sus mundos. El Capitán Davian Thule fue mortalmente herido por un Guerrero Tiránido y el Tecnomarine Martellus lideró a los Cuervos Sangrientos en Calderis de vuelta a la seguridad después de que destruyeran a la fuerza de asalto Tiránida.
Los Marines Espaciales regresaron a Typhon Primaris, dejando al Apotecario Gordian a cargo del cuidado del malherido Capitán. Los Cuervos Sangrientos mataron al Explorador Eldar Nemerian, quien había estado dando problemas al Imperio junto a los Orkos Zalvajes, y regresaron a Calderis para matar al Guerrero Tiránido que había herido de muerte al Capitán Thule. Tras esto, los Cuervos Sangrientos tuvieron tres objetivos principales que completar: reunir una muestra de bio-toxina de los Tiránidos con el que poder crear un veneno genético contra esta escisión de la Flota Enjambre Leviathan que había asaltado el Subsector Aurelia, asegurar los datos de un Despliegue Astronómico (Astronomical Array) de la Era Oscura de la Tecnología localizado en Typhon Primaris que podría precisar una debilidad crítca en la aproximación de la Flota Enjambre Tiránida, y finalmente defender la gran ciudad colmena de Angel Forge en el Mundo Colmena de Meridian.
Asegurar el Despliegue Astronómico garantizó a los Cuervos Sangrientos las habilidades de liberar bombardeos orbitales así como asaltos en profundidad, defender Angel Forge permitió al Sangento Tarkus ganarse una Armadura de Exterminador. Finalmente, reunir la bio-toxina de los Tiránidos añadió un Dreadnought a la fuerza de asalto de los Cuervos Sangrientos, ya que el revivido Capitán Davian Thule, cuyo cuerpo había sido enterrado en el cofre cibernético del Dreadnought.
Meridian fue el objetivo de constantes ataques Eldar y en última instancia reveló que el Vidente Idranel del Mundo Astronave Ulthwé había estado planeando engatusar a la Flota Enjambre Tiránida escindida hacia Meridian usando la población humana como cebo. Luego el Vidente planeaba destruirla para eliminar el desafío Tiránido de su Mundo Astronave pero con el coste de destruir una fuente vital de producción de los Cuervos Sangrientos.
Después de completar todos los tres objetivos, la bio-toxina Tiránida estuvo lista para ser distribuida. Sin embargo, los Navegantes de la Barcaza de Batalla de los Cuervos Sangrientos Letanía de Furia, que se había desplazado para ayudar en el Subsector Aurelia durante algún tiempo, fue físicamente asaltada por la Mente Enjambre, que colocó al navío en un grave peligro de perderse por la Disformidad. Esto eliminó de forma efectiva cualquier refuerzo potencial para el Comandante de la Fuerza Aramus -pero la Mente Enjambre se había debilitado por este esfuerzo y envió a su Flota Enjambre a consumir la biomasa de Typhon Primaris para que pudiera saciarse. El equipo de asalto de los Cuervos Sangrientos se desplegó sobre Typhon Primaris y administró la bio-toxina diseñada a la Mente Enjambre a través de sus zarcillos comederos. En el espacio, por encima del Mundo Letal, la Armageddon fue destruida y el Apotecario Gordian murió.
Mientras el veneno genético surtía efecto en el interior de las bionaves de la Flota Enjambre, todo parecía perdido y el equipo de asalto no poseía ningún medio de retirarse y oleadas masivas de criaturas Tiránidas se estaban preparando para el ataque. De repente, el Capitán Gabriel Angelos y la Compañía entera de Cuervos Sangrientos aterrizó en el campo de batalla de la recien llegada Letanía de Furia y protegieron a la fuerza de asalto de los atribulados Cuervos Sangrientos Aurelianos de las nubes de Tiránidos que se aproximaban. El mismísimo Angelos se unió a la fuerza de asalto del Comandante de la Fuerza Aramus y su ayuda fue decisiva para matar al Tirano de Enjambre Alfa que controlaba el enjambre. Con esa criatura sináptica muerta, los enjambres de Tiránidos dejaron de estar dirigidos por la Mente Enjambre y se atacaron los unos a los otros mientras las bionaves que estaban en órbita caían enfermas de la bio-toxina. Los Cuervos Sangrientos habían vencido y salvado el día así como al Subsector Aurelia y a sus billones de personas de la completa aniquilación del Gran Devorador.
Fuentes
Extraído y traducido de Wikihammer 40K UK.
- Warhammer 40,000: Dawn of War II - Chaos Rising (Videojuego).
Por revisar: Dawn of War II, por Chris Roberson.