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Cerberus el Rebañacráneos, mascota de los Poderes Ruinosos, patrocina este espacio para honrar a sus demoníacos señores. Pulsa sobre él y te introducirá en los misterios del Caos.
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El Ojo del Abismo
El Ojo del Abismo es un poderoso demonio que se vio obligado a fusionar su esencia con una nave de guerra estelar.
Historia
Hace mucho tiempo, un titánico poder demoníaco fue desgarrado en la disformidad del Abismo Hazeroth. Grandes tormentas disformes surgieron a partir de la energía liberada por su muerte y devastaron los planetas que hallaron en su reflujo. Un único fragmento de este enorme ser, propulsado a través del mar de las almas, encontró su salvación introduciéndose en un navío de guerra a la deriva perdido en la disformidad, evitando de esta manera disolverse completamente. Con el paso del tiempo, poco quedó del poderoso demonio que una vez fue, pero su último vestigio se fusionó con lo que había hallado en la nave: la crueldad y el conocimiento consumido de los muertos y el casco y el espíritu máquina del propio navío. Un nuevo señor demonio nació de esta unión: un extraño poder menor renacido en la forma de un buque de guerra del vacío.
Cuando las estrellas se alinean para el sacrificio -cuando los ecos de los antiguos pactos demoníacos alentan al señor demonio- entonces el barco y su corte de entidades disformes menores se abalanzan sobre los buques que viajan por las rutas disformes del Abismo Hazeroth. Incluso si una nave logra salir de la disformidad, el Ojo del Abismo seguirá a la nave hasta el espacio real a través del portal creado. El señor demonio se manifiesta como un crucero pesado imperial de más de cinco kilómetros de longitud, pero tan retorcido y envuelto en materia disforme como para oscurecer su diseño. Sobre su casco se asientan grandes entes de su corte: cañones demonio y gruesos miembros lanzaproyectiles de 500 metros de altura. En su parte inferior se cuentan por miles los demonios más pequeños de cientos de formas diversas que trepan y se envuelven en una cacareante bacanal de violencia y libertinaje. Enormes campos de materia ardiente y agitada son la fuente de munición para que las entidades mayores lancen o vomiten proyectiles a través del vacío.
Crepitantes tentáculos parcialmente formados de carne demoníaca potenciada se extienden más de un kilómetro desde el casco, disolviéndose en los bordes en conflicto con el espacio real. Un globo ocular inyectado de sangre de 400 metros de ancho está incrustado en el casco del navío, reemplazando la ubicación del puente de mando secundus. El señor demonio puede manifestarse en el espacio real apenas unas pocas horas, desvaneciéndose inexorablemente, pero con tiempo más que suficiente para destruir cualquier nave imperial. La materia prima de la disformidad usada como munición corroe los cascos de sus víctimas, provoca la locura en sus tripulaciones y burbujea con las transitorias formas demoníacas cuyo único instinto es la destrucción. Incluso cuando las cubiertas son desgarradas al vacío por la corrosión espumeante de la disformidad, estos demonios usados como munición siguen matando y destruyendo alegremente.
Munición demoníaca
Mucho después de que el señor demonio se haya desvanecido, la munición más reciente queda adherida en el ruinoso casco de la víctima que flota en el vacío espacial. Aunque esté desvanecido y tenga un aspecto fantasmal, sigue siendo letal. Es el espíritu de un dispositivo de guerra unido a la forma de un demonio: una sola mente, olvidadiza y destructiva a la vez.
Fuentes
- Dark Heresy: Creatures Anathema (Juego de Rol)