![]() | El Sargento Guillermito, mascota de los Marines Espaciales, tiene el honor de patrocinar este espacio por orden del Capellán Cassius de los Ultramarines. ¡Pulsa sobre él y te acompañará a una Cruzada épica! ¡Lee más! ¡Sin piedad, sin remordimientos, sin miedo! |
"Nuestros enemigos se creen más allá de conceptos mortales como el miedo. Yo diría que la efectividad de las fuerzas de ataque Vanguardia refuta esa noción."
- —Primarca Roboute Guilliman
Los Marines Espaciales de Vanguardia son tropas de reconocimiento de élite, entrenadas para operar sin apoyo en las zonas más letales de la galaxia. Moviéndose por delante de la línea de batalla principal, se deslizan profundamente en territorio hostil cual fantasmas, y allí llevan a cabo una campaña de dominio de amplio espectro contra el enemigo. Todos los componentes de la maquinaria de guerra enemiga son saboteados y desmantelados: se cortan comunicaciones, se eliminan alijos de suministros y se destroza la moral con implacables ataques terroristas. Cuando el enemigo está de rodillas, ensangrentado y roto, los Marines Espaciales de Vanguardia emergen de las sombras para realizar el ataque mortal. Cada uno de los grandes Capítulos de Marines Espaciales posee su propio conjunto de estos comandos mortales, y sus acciones han decidido innumerables guerras.
Descripción[]
La precisión y eficacia despiadada son las consignas de los Marines Espaciales de Vanguardia, y el silencio de la muerte es todo lo que dejan a su paso. Al realizar tareas por delante de la línea de batalla principal, estos agentes avanzados siembran la discordia y el pánico en las fuerzas enemigas. El personal clave es asesinado mediante ráfagas repentinas y devastadoramente precisas de fuego de bólter, los puestos de comunicaciones son destruidos con cargas macro-explosivas. Mientras el enemigo se tambalea, los Marines Espaciales de Vanguardia se escabullen en las sombras, buscando ya su próximo objetivo.
Marines Espaciales de Vanguardia son expertos en reconocimiento e infiltración, equipados para operar solos en territorio enemigo durante largos períodos de tiempo, y entrenados intensamente en tácticas de guerra encubierta y técnicas de sabotaje. Las fuerzas de ataque Vanguardia tienen la misión de lograr la superioridad total sobre el enemigo. Cada faceta de la maquinaria de guerra del enemigo debe ser desmantelada, desde las rutas de suministro y las infraestructuras hasta las comunicaciones y la logística. La moral debe ser completamente debilitada mediante el hostigamiento continuo de las tropas de terror y el sabotaje de precisión. El objetivo final de esta implacable campaña es dejar al enemigo lisiado e indefenso frente al avance de la línea principal de batalla de los Marines Espaciales. Sin embargo, si necesitan enfrentarse al enemigo de frente, las formaciones Vanguardia son perfectamente capaces de hacerlo; después de todo, son guerreros del Adeptus Astartes, armados y equipados con el equipo más mortífero disponible para el Imperio.
Desplegados en masa por primera ocasión durante la Cruzada Indomitus, las fuerzas de ataque Vanguardia demostraron ser tremendamente efectivas en su tarea. A medida que las fuerzas del Primarca Roboute Guilliman se adentraban en el espacio infestado del Caos, los Marines Espaciales de Vanguardia lucharon por delante del avance, desmantelando la capacidad del enemigo para resistir la máquina de guerra imperial. El señor de la guerra de Khorne Ul Ghresk fue víctima de una lluvia de proyectiles de precisión en la Batalla de los Ocho Pilares, enviando a sus Fleshreavers a un frenesí autodestructivo. Los puertos espaciales corruptos de Braxar Tertia fueron destruidos cuando una serie de detonaciones destruyeron sus amarras gravitacionales, causando que toda la estructura se estrellara sobre una zona de reunión del Caos. En el mundo forja hereje de Driantum, el Titán del Caos Degradador fue ahogado en prometio ardiente cuando una serie de sumideros se estropearon misteriosamente. A través del espacio en disputa, se llevaron a cabo con éxito innumerables actos similares de destrucción encubierta.
Tal era el desorden causado por estos ataques, que se encendieron varios conflictos internos entre facciones rivales que se culparon mutuamente de los ataques desconcertantes que estaban paralizando sus fuerzas. El terror y la confusión, dos de las mejores armas de los seguidores de los Dioses Oscuros, ahora estaban siendo empleadas contra ellos, y los resultados fueron devastadoramente efectivos. Cuando la Cruzada Indomitus se adentró en territorio enemigo y fue atacada por mútiples contraataques del Caos, los Marines Espaciales de Vanguardia retrocedieron para apoyar a sus hermanos de batalla, lanzando ataques a los flancos y debilitando las unidades del enemigo con sus francotiradores. Finalmente, el enemigo se encontró cara a cara con la amenaza oculta que los había perseguido durante tantos meses. Las Escuadras de Saqueadores surgieron de las sombras, las máscaras incrementaban los espeluznantes aullidos de guerra mientras caían sobre el enemigo con pistolas y cuchillos de combate. Los Eliminadores acechaban en las sombras y cada disparo de sus rifles implicaba una muerte.
Los Marines Espaciales de Vanguardia demostraron ser igualmente devastadores al luchar al unísono con las tropas de línea que llevando a cabo agresivas acciones de reconocimiento. De hecho, Guilliman quedó tan impresionado con la actuación de sus formaciones Vanguardia que hizo una serie de enmiendas al Codex Astartes, su legendaria tesis sobre la guerra, para acomodarlas mejor a la doctrina de guerra táctica general de los Marines Espaciales. En los años transcurridos desde entonces, los Marines Espaciales de Vanguardia han seguido desempeñando un papel de vital defensa del Imperium. Con violentas tormentas disformes que cubren casi la mitad de la galaxia conocida en un velo de oscuridad y miedo, las fuerzas de reconocimiento experimentadas han demostrado ser vitales para el Adeptus Astartes. Las fuerzas de ataque Vanguardia se adentran en los confines más lejanos del espacio, despejando el camino para cruzadas de reconquista y retribución, hostigando a las fuerzas de los Dioses Oscuros donde sea que se encuentren.
No importa cuál sea su posición actual, todos los Marines Espaciales Primaris están entrenados y adoctrinados en tácticas Vanguardia y son capaces de usar servoarmaduras modelo Mk X específicas de los destacamentos de reconocimiento cuando sea necesario. Además, durante su tiempo en la Compañía de Exploradores de un Capítulo, todos los Marines Espaciales son entrenados en el uso de las variantes de la armadura Vanguardia y su equipo asociado, en preparación para un posible despliegue tras las líneas enemigas. Los hermanos de batalla de las Compañías de Reserva de un Capítulo pueden ser temporalmente adscritos a las Compañías de Batalla más importantes como Marines Espaciales de Vanguardia, asumiendo los colores y las marcas de su nueva compañía mientras dure el servicio.
De acuerdo con esas enmiendas recientes al Codex Astartes, la 10ª Compañía de cada Capítulo debería mantener un complemento permanentemente de cien Marines Espaciales de Vanguardia bajo el mando de un Capitán conocido como el Maestro de Reconocimiento y apoyado por dos Tenientes. Esta fuerza permanente está compuesta por veteranos que han demostrado aptitudes particulares para la guerra de reconocimiento en el transcurso de innumerables operaciones. Es su responsabilidad asegurarse de que cuando el Capítulo entre en combate lo haga con todos los datos estratégicos relevantes recopilados de sus misiones encubiertas de exploración. Incluso con este deber completo, los Marines Espaciales de Vanguardia deben estar preparados en todo momento para reforzar o complementar las Compañías de Batalla. Incluso aquellos Capítulos que no cumplen con el Codex y no poseen una Compañía de Exploradores dedicada, como los Lobos Espaciales o los Templarios Negros, se aseguran que siempre haya una formación permanente de hermanos de batalla Vanguardia listos para llevar a cabo misiones encubiertas.
Agentes del Terror[]
El Archimagos Dominus Belisarius Cawl creó innumerables maravillas tecnológicas y armas de destrucción durante su largos años de aislamiento, pero el desarrollo de la servoarmadura Mk X se erige como uno de sus logros más notables. A diferencia de los patrones anteriores, como el Mk VII Aquila o el Mk VI Corvus, la armadura Mk X no tiene una sola denominación o diseño. En cambio, es un sistema modular y adaptable de recubrimiento de ceramita que se puede ajustar para múltiples funciones tácticas, desde exploración y reconocimiento hasta los modelos Gravis superpesados usados por las Escuadras de Agresores.
Entre las formaciones Vanguardia no existe un estilo de armadura estándar, aunque los patrones de peso ligero son casi universales debido a la naturaleza de su doctrina de combate. Cada escuadra tiene su propia composición, adaptada a sus necesidades particulares. Por ejemplo, el modelo Mk X Phobos adoptado por los Infiltradores y Saqueadores evita una cierta cantidad de cobertura a favor de la agilidad y la velocidad. Los Infiltradores son responsables de interrumpir y sabotear objetivos. Lo primero que ve el enemigo es una cascada de humo asfixiante mientras los Infiltradores arrojan una andanada de granadas de humo, enmascarando su avance. A medida que el enemigo mira hacia la nube, los Infiltradores los derriban con ráfagas de fuego disciplinadas, con las miras augur de sus armas destacando a cada víctima antes de matarlos. Además de su armamento, la herramienta más importante a disposición de los Infiltradores es el omni-interferidor. Este dispositivo portátil, montado en la parte posterior, intercepta señales en un amplio espectro, aleatorizando frecuencias y desviando transmisiones holográficas para garantizar que las comunicaciones del enemigo nunca lleguen a su objetivo.
Debido a la gran cantidad de tiempo que pasan tras las líneas enemigas, los Infiltradores son entrenados en técnicas de supervivencia, y tienen sus propios especialistas en medicina para realizar el sagrado deber de recuperar la semilla genética de los hermanos caídos. Conocidos como Adeptos Helix, estos guerreros provienen del Apothecarion, el banco de genes sagrado que guarda el legado genético de cada Capítulo. Aquellos que protegen este valioso repositorio se encuentra entre los hermanos más valiosos y honrados de su Capítulo, ya que solo ellos poseen el conocimiento y las habilidades para recuperar las glándulas progenoides de los Marines Espaciales caídos. Los Adeptos Helix están listos para asumir los deberes completos de un Apotecario en caso de que ocurra una pérdida trágica, pero mientras tanto practican su oficio en las formaciones Vanguardia, utilizando el guantelete hélix; una versión reducida del narthecium de un Apothecario, que contiene cargas estimulantes que pueden devolver fuerza a los compañeros heridos en combate.
Las Escuadras de Eliminadores utilizan versión aún más sencilla del mismo patrón de armadura, lo que les permite operar con máximo sigilo mientras acechan a su presa. Tiradores dedicados, estos guerreros se ocultan en las sombras del campo de batalla, buscando objetivos y derribándolos con una andanada de disparos. Su armamento principal es el rifle bólter francotirador modelo Verdugo Mk III. Las miras de esta arma se pueden adaptar a cualquier situación, desde visión termoscópica hasta exploraciones auspex de precisión que pueden penetrar varios pies a través de materia sólida. Una vez localizado, no hay lugar para esconderse de la presa de un Eliminador, y ninguna cantidad de armadura puede detener el tiro mortal. Cada miembro de la escuadra porta munición especial de respuesta diseñada para cualquier eventualidad táctica. Los proyectiles hiperfrag detonan en una lluvia de metralla, enviando una nube de fragmentos lacerantes que devasta la infantería apretada. Las balas ejecutor son sofisticados misiles autoguiados, ligados a un cogitador miniaturizado, que pueden buscar a su objetivo detrás de la cobertura, mientras que las balas mortis arrojan toxinas mutagénicas autorreplicantes al objetivo.
En el otro extremo de la escalada están las Escuadras de Supresores, guerreros de apoyo de fuego protegidos con armadura modelo Omnis, una mezcla de la configuración Gravis más pesada y las versiones Mk X más ligeras preferidas por otras unidades de los Marines Espaciales de Vanguardia. Estos guerreros equipados con propulsores de salto lanzan tormentas desgarradoras con sus cañones automáticos aceleradores, lo que obliga al enemigo a buscar protección mientras sus hermanos Vanguardia avanzan. Los Supresores utilizan las servoplacas de absorción de impacto de su armadura y botas para reforzar sus cañones, reduciendo el feroz retroceso que de otro modo les haría caer. Aunque usan trajes similares a la servoarmadura Mk X de los Precursores, los Supresores no golpean desde órbita baja, sino que dependen de sus propulsores de salto y de paracaídas gravíticos para maniobrar hasta una posición enfilada donde sus armas acaben con enemigos fuertemente blindados y vehículos ligeros.
Cada compañía en un Capítulo de Marines Espaciales queda bajo el mando de un Capitán, un estratega veterano y un campeón elegido por sus supremas habilidades de liderazgo. Estos guerreros han luchado en todos los entornos de batalla concebibles, y son tan capaces cuando lideran un asalto masivo de armaduras pesadas como cuando están llevando a cabo una operación encubierta con una fuerza de ataque Vanguardia tras las líneas enemigas. Al encabezar una operación de este tipo, un Capitán adoptará las herramientas de sigilo: omni-interferidores, armadura Phobos liviana y carabina bólter artesanal instigador que pueden usarse para atacar y eliminar a los objetivos de su portador en un alcance extremo. Debido a la naturaleza de las operaciones Vanguardia, el estilo de liderazgo del Captain puede verse alterado: comandos sutiles y de precisión pueden ocupar el lugar de una oratoria conmovedora, pero el Capitán sigue siendo una figura de inspiración heroica para los hermanos de batalla bajo su mando.
Equipados de manera similar con armadura Phobos, los Tenientes de las formaciones Vanguardia brindan apoyo y flexibilidad táctica a su Capitán. A menudo, cuando un equipo participa en una operación compleja y multifacética, se le asignará un Teniente para que supervise uno o más aspectos críticos. Liderando desde el frente, brindan una valiosa experiencia, asegurándose que sus hermanos de batalla operen con la máxima eficiencia. Los Bibliotecarios elegidos para el servicio Vanguardia han dominado las disciplinas de batalla únicas que se centran en ocultar el paso de sus camaradas y perjudicar al oponente con ilusiones y alucinaciones. Dando forma a la energía empírica sobre si mismos como un manto de sombra, estos psíquicos se deslizan a través del territorio enemigo como espectros, guiando escuadrones de la muerte a su destino sin levantar más que un parpadeo de sospecha de enemigos vigilantes, retorciendo el tiempo y el espacio para abrir nuevos caminos para el ataque. Incluso puede desollar secretos vitales de las mentes de los enemigos capturados, empuñando sus poderes psíquicos como un bisturí a medida que derriban barreras mentales y eliminan capas de adoctrinamiento.
Fuentes[]
- Codex Adeptus Astartes Vanguard Space Marines