Legio Venator

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Símbolo del Collegia Titanica

La Legión Venator es una Legión Titánica Leal del Collegia Titanica y constituye uno de los brazos militares del Adeptus Mechanicus. Hay muy poca información en los archivos imperiales sobre esta oscura Legión, aunque se sospecha que fue fundada en una etapa anterior a la Era del Imperio, durante la Era de los Conflictos. Se dice que la Legio Venator mantiene una fortaleza escondida en la luna muerta de Lycosidae, dentro del núcleo del Sistema de los Tornos, en el Sector Calixis. La Legio Venator está al servicio de la división del Mechanicus en los Tornos, y siempre está dispuesta a colaborar con los Tecnosacerdotes de sus tres planetas cuando las circunstancias lo requieren.

Historia

La Legio Venator era una legión relativamente joven cuando acompañó a las fuerzas imperiales al inicio de la Cruzada de Angevin. La Legio era un glorioso espectáculo para la vista, con sus inmaculados caparazones de rojo y cobre pulido brillando con cada ráfaga de fuego a medida que llevaban la aniquilación total a todos aquellos que negasen el gobierno imperial. Mediante la obtención de grandes glorias y honores durante las fases iniciales de la campaña, la legión se ganó una reputación temible por diezmar a sus oponentes por completo.

Durante los Años Sombríos, la legión luchó con especial distinción contra un ¡Waaagh! masivo que cayó sobre los cruzados con su característica furia bárbara. La victoria crítica en la lucha llegó con la destrucción de un Mega Gargante masivo, identificado en lengua bestial de los Orkos como Rompekolumnaz. Después de un ataque orbital de lanzas coordinado, el Princeps Senioris Angevelo Vsevolod del Titán Warlord Valorus Ira, con el apoyo de una Centuria de Caza Warhound, se enfrentó al ingenio orko dañado. La batalla fue a quemarropa y feroz, y sólo después de que el Warhound Celerus Moria se sacrificara atrayendo el fuego del Mega-Gargante el Valorus Ira fue capaz de apuntar al núcleo interno con su Cañón Volcán. La fusión resultante diezmó a las hordas de orkos y la visión de la destrucción de su ídolo los privó de su voluntad de luchar.

Después de avanzar hacia áreas que se creían seguras, los viles Yu'Vath hicieron caer su ciencia disforme y tecno-magia sobre los cruzados sitiados. La Legio Venator encontró una construcción disforme particularmente masiva y atroz que conducía el ataque inicial de una de estas ofensivas. Goteando energía etérea, la monstruosa creación se propulsaba hacia adelante en cinco patas retorcidas y manejaba armas inexplicables que obtenían su energía de la mismísima disformidad en tres brazos deformes. Cuatro titanes cayeron ante la abominación antes de que la Desidius Rae, muy dañada y sangrando plasma desde su núcleo dañado, desafió a la bestia en cuerpo a cuerpo. Su princeps desvió toda la potencia disponible al puño de combate del titán, lo que provocó que su primer golpe sobrecargase el campo de contención del ya debilitado núcleo. La subsiguiente muerte del titán aseguró la destrucción total y absoluta de su enemigo.

Tras la llegada del Archimagos Mat Aleph Xenon y la conclusión de la Cruzada de Angevin, la Legio Venator obtuvo el derecho a reclamar uno de los recién creados Los Tornos como propio. Sin embargo, antes de que el proceso de selección de dicho mundo pudiera comenzar, la Legio Venator se unió a otras Legios en la histórica y gloriosa Cruzada Machariana. Las fuerzas restantes de la Legio, dentro del recién creado Sector Calixis, se pusieron a construir fortalezas en Los Tornos, incluyendo una en Lycosidae. Tras el fin de las Conquistas Macharianas, los grupos de combate de la Legio regresaron con nuevas historias de heroísmo, así como su pesar por la pérdida del propio Macharius. En reconocimiento a su gloria y participación en la gran cruzada, el Pacto del Torno designó un Mundo Forja dentro del Marchas de Drusus "Opus Macharius", y la cedió a la Legio como su nuevo mundo natal.

Más de mil años después, la Legio Venator fue una de las fuerzas en atender la llamada a las armas contra el autoproclamado “Emperador de Latón”. Los titanes de la Legio fueron de gran valor para quebrar las rebeliones que bordeaban el Cúmulo de Gélmiro, limpiando despiadadamente aquellos mundos que se rebelaron contra sus amos imperiales. Durante el asalto final a los grupos restantes dentro del sistema, la Legio Venator se encontró cara a cara con un nuevo y terrible enemigo: Titanes del Caos. Lo que siguió fue un conflicto de cuatro días en el que los ingenios de ambos lados acecharon sin descanso a sus enemigos a través de torres en ruinas y bloques de viviendas destruidos. Varios de los titanes de la Legio Venator, dañados, incluso se ofrecieron para actuar como cebo para atraer a los Titanes del Caos hacia emboscadas, sacrificándose para destruir sus objetivos. La eventual llegada de dos Titanes Emperador marcó el final de los combates, ya que las fuerzas del Caos restantes fueron incapaces de hacer frente a la potencia de fuego de estas impresionantes construcciones. Franjas enteras de paisaje urbano en ruinas desaparecieron bajo el poder de sus poderosas armas, y aquellos titanes que no escaparon del planeta fueron aniquilados por la abrumadora embestida. Después los grupos de combate volvieron sus esfuerzos hacia el apoyo a las fuerzas leales restantes, y aunque todo el cúmulo fue convertido al final en una ruina humeante, el coste en vidas había sido alto. Sin embargo, las fuerzas del Caos que habían logrado escapar volverían a enfrentarse a la Legio de nuevo, bajo la bandera de los Segadores Desamparados.

Cuando las Guerras Meritecas entraron en erupción en el espacio imperial casi quinientos años más tarde, la Legio Venator envió fuerzas para ayudar a sofocar el levantamiento masivo. Estas incluían la Ignis Inferorum, un antiguo Titán Emperador que se remontaba a la Era Oscura de la Tecnología, el cual se dirigió al campo de batalla como un avatar de la ira y cuyos Aniquiladores de Plasma gemelos eran la retribución hecha fuego. Los defensores se vieron irremediablemente superados y, al final, ni una sola criatura viva sobrevivió. Tras la conclusión de las Guerras Meritecas, la Legio Venator se centró en la reconstrucción y el fortalecimiento de sus posiciones, enviando de vez en cuando grupos de combate en honor a los tratados y obligaciones de un pasado lejano. La Legio tiene actualmente fuerzas operando tanto en la costosa Cruzada Marginal como la Cruzada de Achilus. En esta última se han encontrado con los mortales Biotitanes de las Flotas Enjambre de los Tiránidos, y muchos titanes valiosos han caído ante estas feroces monstruosidades. Como resultado, el Princeps Majoris Maxilohv ha decretado que no se enviarán grupos de combate adicionales fuera del sector, excepto para cumplir con los tratados actuales de la Legio, hasta que sus fuerzas fuesen reconstruidas. Se espera que tal empresa requerirá siglos.

Campañas notables

• Cruzada de Angevin (322-384.M39) - La Legio Venator es conocida por haber apoyado la Cruzada de Angevin, de la que derivaron tanto la creación del Sector Calixis, como la cesión de varios mundos (entre los que se encontraba el sistema de los Tornos) en régimen de dominio perpetuo al Adeptus Mechanicus.

• Guerra de Latón (738-741.M40) - La adoración a los Poderes Ruinosos dirigida por el carismático líder conocido como "El Emperador de Latón" se generalizó en los mundos colmena del Cúmulo de Gelmiro, y estos cayeron en la sedición. Los renegados, que controlaban planetas fuertemente militarizados del Cúmulo, fueron capaces de armar y patrocinar a grupos rebeldes en mundos cercanos hasta que llegó el contraataque imperial, que reveló la actuación de las fuerzas oscuras del Ojo del Terror en el alzamiento de la rebelión. La llamada "Guerra de Latón" que siguió a estos eventos fue breve y sangrienta, implicando a fuerzas de más allá del Sector, a los Adeptus Astartes y a los Titanes de la Legio Venator. Los prósperos mundos de Gelmiro se convirtieron en osarios repletos de escombros y fueron clasificados por el Administratum como mundos en guerra. Desde entonces y hasta el día de hoy, el Cúmulo de Gelmiro se ha convertido en un lugar a evitar, una tierra de nadie repleta de asesinos mutantes y renegados.

• Campaña de la Fisura de Lycanthos (780.M41) - Tras la prolongada e infausta Rebelión del Cuarto Cuadrante, el Capítulo de los Garras Astrales respondió a una llamada a las armas generalizada entre los Astartes de la región y envió un poderoso contingente de fuerzas bajo el mando personal de Lufgt Huron en 780.M41, que emprendió la Campaña de Lycanthos contra uno de los últimos Sistemas fortaleza de la revuelta, situado al sur de la galaxia en la Zona del Torbellino. Lufgt Huron fue elegido de común acuerdo líder de batalla de un numeroso contingente de Astartes compuestos por Compañías de los Capítulos de los Garras Astrales, los Halcones de Fuego, los Cicatrices Blancas y la Guardia Celestina, reforzados por los regimientos de la Guardia Imperial de los Korps de la Muerte de Krieg y de Kol-Sec, así como por los Titanes de la Legio Venator. El Señor del Capítulo de los Halcones de Fuego, Stibor Lazaerek, se sintió ofendido porque no se le había ofrecido el mando de la campaña, y se sabe que desde entonces guarda un profundo resentimiento hacia los Garras Astrales. Bajo el inspirado mando de Huron, dicha fuerza de ataque purgó el sistema, poderosamente fortificado, de las fuerzas del Caos y los Marines Traidores en menos de un año. El conflicto confirmó la reputación de Lufgt Huron como un maestro estratega entre los comandantes de los Marines Espaciales.

Titanes notables

• Ignis Inferorum - Titán Emperador.
• Valorus Ira - Titán Warlord del Princeps Senioris Angevelo Vsevolod.
• Celerus Moria - Titán Warhound.
• Desidius Rae - Titán de tipo desconocido.
• Imperialis Potestus - Titán de tipo desconocido, comandado por el Princeps Senioris Lenodius von Maxilohv.

Personajes notables

• Princeps Senioris Angevelo Vsevolod.

• Princeps Senioris Lenodius von Maxilohv - El Princeps Senioris Lenodius von Maxilohv es el Princips Majoris de Legio Venator y lo ha sido desde hace más de 250 años. Su cuerpo está confinado permanentemente a su trono de mando, un dispositivo adornado en bronce que contiene los sistemas de soporte vital necesarios y depuradores de toxinas para mantenerlo con vida y permitirle interactuar con el Espíritu Máquina de su titán. De su cuerpo sólo conserva su cabeza, el brazo derecho, y la mitad de su torso, después de un enfrentamiento con los Titanes de la partida de guerra del Caos llamada los Segadores Desamparados. Durante un choque contra estos asaltantes, Maxilohv interceptó reconocimiento orbital que le indicó que cinco titanes del caos estaban tratando de flanquear el asalto imperial a través de un cañón al sur de la batalla. Como el resto de su fuerza no podía abandonar esta fase crítica del ataque, Maxilohv destrabó al Imperialis Potestus de la batalla y desafió a los titanes enemigos solo. Las paredes rocosas del cañón llevaban el eco del código corrupto del Titán Warlord enemigo en cabeza cuando el titán imperial los encontró, mientras que el significado de la breve ráfaga de Maxilohv se ha perdido en la historia. Mientras que los servidores del Caos no podían disparar todas sus armas contra él al mismo tiempo, tampoco podían fallar. El titán de Maxilohv sufrió daños masivos por fuego enemigo, incluyendo un golpe directo a su puente de mando. Manteniendo el control de su titán a base de fuerza de voluntad, Maxilohv continuó enfrentándose al enemigo a pesar de sus terribles heridas. Cuando vio caer al último titán del caos, Maxilohv finalmente perdió el conocimiento y su titán se detuvo. Después de la batalla, Maxilohv fue colocado en el trono de mando que ocupa actualmente. Después de reparar el Titán, los Tecnosacerdotes colocaron el nuevo honor en sus gloriosos anales.

Leer más

Legiones Titánicas.

Lista de Legiones Titánicas.

Fuentes

Extraído y traducido de Wikihammer 40K UK.

• Imperial Armour IX.

• Dark Heresy: The Inquisitor's Handbook (Juego de Rol).
• Dark Heresy: The Lathe Worlds (Juego de Rol).

• Dark Heresy Timeline, por Alan Bligh.