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Veredicto del Certamen de Relatos Wikihammer + Voz de Horus ¡Léelos aquí!

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Emblema de la Compañía de la Muerte.

Algunas de las Legiones de la Primera Fundación tienen algunas peculiaridades genéticas que han heredado sus Capítulos Sucesores. Algunas no son más que meramente estéticas, como los Salamandras que tienen los ojos rojos y la piel oscura. Otras son debidas a una manipulación genética apresurada, como es el caso de la Guardia del Cuervo. Otros directamente nunca tuvieron ciertos órganos y/o los perdieron progresivamente, como los Puños Imperiales. Pero algunas Legiones sufren unas taras genéticas mucho más graves, como los Lobos Espaciales y los Ángeles Sangrientos.

Los Ángeles Sangrientos tienen muchas ventajas genéticas, pero también sufren una horrenda maldición. Se les podrían aplicar los versos de Jerusalem:

"Diez bendiciones cayeron del cielo y 9 fueron para los Ángeles Sangrientos. Diez maldiciones cayeron del cielo y 9 fueron para los Ángeles Sangrientos".

Bloodangelslogo

Emblema de los Ángeles Sangrientos.

Los Ángeles Sangrientos han sido bendecidos con un aspecto que roza lo divinamente hermoso, con un talento para cualquier arte, sobre todo la de la guerra, y con una longevidad larga, incluso más que un Astartes normal (los casos de Dante, Señor del Capítulo, que lleva cerca de catorce siglos dirigiendo a su Capítulo, y de Cleutin, Guardián del Sudario de Sanguinius, que fue el Sargento Veterano de Dante cuando este era Explorador).

Pero también sufren la maldición de la Imperfección, que tiene como consecuencias la Sed Roja y la Rabia Negra. Ambas cosas hacen que los Ángeles Sangrientos sean un capítulo moribundo que rehuya la compañía de otras fuerzas imperiales para evitar que su vergüenza se descubra.

Como estos tres términos se confunden o se mezclan entre sí, a continuación explicaremos sus diferencias.

La Imperfección[]

Sangpriester

Sacerdote Sangriento de los Ángeles Sangrientos.

El material genético de los Ángeles Sangrientos es único y posiblemente el más superior, junto con el de los Lobos Espaciales, pero también el más peligroso. No se sabe muy bien por qué, pero lo cierto es que los Ángeles Sangrientos sufren una espantosa maldición genética que los ha puesto al borde del precipicio muchas veces.

La Imperfección tiene dos consecuencias visibles para las cuales el Capítulo ha buscado a lo largo y ancho de la Galaxia una cura, pero llevan 10.000 años buscándola y todavía no ha aparecido nada. Solo hubo un Capítulo Sucesor que consiguió desembarazarse de esta tara, los Lamentadores, que fueron prácticamente aniquilados por los Tiránidos. Cómo lo hicieron, no se sabe. Como tampoco se sabe el origen de la maldición. Hay varias hipótesis:

  • Que el Primarca Sanguinius estaba demasiado tocado por el Caos y no solo porque tenía alas. Cuando fue raptado por el Caos aún siendo un bebé, el Caos lo mutó y por eso cuando se hizo al primer Ángel Sangriento su material era propenso a sufrir daños catastróficos.
  • La segunda teoría es parecida a la primera, pero difiere en que el Emperador lo sabía y actuó en consecuencia. Por qué lo hizo o por qué confió en Sanguinius sabiendo que estaba manchado por el Caos, es un misterio.
  • La tercera afirma que el material genético se ha degenerado porque se implanta en los baalitas, que al ser nativos de un mundo radiactivo y devastado, ellos mismos sufren una grave degradación genética que afecta a la semilla genética.
  • La cuarta afirma que el problema radica en la Insanguinación y las constantes transfusiones de sangre que se hacen los unos a los otros. La Insanguinación es el ritual por el cual se activaban las mejoras genéticas. Todas las Legiones tenían el suyo: la Mano de Fe de los Puños Imperiales, la Prueba de Morkai de los Lobos Espaciales, etc. Al principio los aspirantes recibían una transfusión muy pequeña de la sangre de Sanguinius. Esto dejó de hacerse con la muerte del Primarca. Pero parte de su sangre se conservó. Como no podía ser mantenida eternamente, se la inyectaron los Sacerdotes Sanguinarios (los Apotecarios de los Ángeles Sangrientos). De hecho, cuando son hechos Sacerdotes Sanguinarios han de beber un poco de la sangre de Sanguinius. Luego es su sangre la que se usa para la Insaguinación. Así pues, se cree que el hecho de llevar esta práctica a cabo durante 10.000 años les ha llevado a esa degradación. Aunque esta teoría se tambalea porque algunos Capítulos abandonaron esa práctica y sufren la Imperfección, como los Desgarradores de Carne.
  • La quinta afirma que no es causa de un solo factor y que para que una degradación genética sea tan grande, han de juntarse varios de los problemas para que se dé algo así. Aúna la primera, la tercera y la cuarta en una sola, pero muchos la critican porque es tirar a bulto.

Lo que queda claro es que el Caos, de alguna forma, mutó la semilla genética de los Ángeles Sangrientos, produciéndose dos efectos terribles: la Sed Roja y la Rabia Negra.

La Sed de Sangre[]

Caos Ka'Bandha principe demonio

Ka'bandha, Príncipe Demonio

Artículo principal: Sed de Sangre

También conocida como Furia Roja, Hambre Impía o simplemente Sed de Sangre. Los Ángeles Sangrientos suelen sufrir episodios de locura en los que ansían la sangre fresca de los vivos. Se han dado casos de campañas prologadas de los Ángeles Sangrientos en las que poblaciones enemigas o amigas han sido aniquiladas y desangradas, aunque no hay pruebas concluyentes que fueran ellos los responsables. Lo cierto es que hay algunos Sucesores que tienen una fama siniestra por la importancia que le dan a la ingesta masiva de sangre e incluso de carne cruda, como los Desgarradores de Carne, los Bebedores de Sangre o los Devoradores de Carne.

Kabhanda

Ka'Bandha.

Se cree que la Sed Roja fue insuflada en Sanguinius en Signus Prime cuando luchó contra una horda de Demonios de Khorne, enviada allí por Horus y dirigida por el Devorador de Almas Ka'Bandha. Este intentó que Sanguinius se uniera a las filas de Khorne, porque él también sentía la llamada de la sangre y Horus le quería en su nuevo orden. Furioso, Sanguinius se negó y luchó contra él. Ka'Bandha le partió las dos piernas y le dejo allí para que viera lo que hacía a sus tropas. Destrozo 5 Compañías enteras antes de irse y al hacerlo, le dejó a Sanguinus la Sed Roja como recuerdo. Ka'Bandha fue luego destruido por Sanguinius en Terra, en la Puerta de la Eternidad. Aun así, la Sed Roja quedó y pasó de Sanguinius a sus Sucesores (si bien en el caso de algunos Capítulos, como los Bebedores de Sangre y los Devoradores de Carne, se cree que es un fallo de la omofágea; si esto ha sido acentuado por la Sed Roja, es desconocido).

La Rabia Negra[]

DeathCompany

Un Capellán guiando a la Compañía de la Muerte.

Artículo Principal: Rabia Negra

Los Ángeles Sangrientos tienen literalmente grabados en sus genes los últimos momentos de vida de Sanguinius en su lucha con Horus. La agónica muerte de Sanguinius está registrada en cada uno de sus genes y a veces, en momentos de gran tensión; en la víspera de una batalla, por ejemplo, los Marines suelen sufrir alucinaciones y creen ver la batalla final de Terra. No sólo eso, sino que se creen que están allí y que son el propio Sanguinius.

Esto es lo que se conoce como la Maldición de Horus o la Rabia Negra.

No se sabe si esto fue hecho a propósito por Horus o un efecto secundario no previsto, pero Horus quería que la muerte de su más querido hermano, que se había negado a unirse a él por dos veces, fuera lo más agónica posible con un ataque psíquico brutal al par de la muerte física. Esto produjo en los Ángeles Sangrientos un trauma que se hereda genéticamente.

Mephiston

Mephistón, el único Ángel Sangriento que ha superado por sí solo los efectos de la Rabia Negra.

Los síntomas son primero un nerviosismo creciente, una furia inexplicable, temblores y una creciente incapacidad de centrar la atención y de situarse en el espacio-tiempo actual. Cuantas más batallas y más sangre ha visto un Ángel Sangriento, más posibilidades hay de que sufra la Rabia Negra.

Literalmente, se creen Sanguinius en la batalla final y su esquizofrenia va acompañada por alucinaciones tan fuertes que se creen en Terra, que sus compañeros son los Primarcas Leales y el Emperador, a punto de asaltar la Barcaza de Batalla de Horus y que sus enemigos, sean cuales sean, son los Traidores al mando de Horus. No distinguen el pasado del presente, pero saben que no alcanzarán el futuro.

Antes de sucumbir a la locura se encuadran en la Compañía de la Muerte, pintando sus armaduras de negro, con aspas rojas (las heridas de Sanguinius), coronados de laurel y con calaveras y gemas en foma de gota de sangre como adornos. Son dirigidos a la lucha por un Capellán, y en lo más crudo del combate buscan una muerte honorable. Poseen una parte del poder de Sanguinius en sus venas y este se manifiesta en todo su poder, haciéndoles capaces de cualquier proeza de fuerza y resistencia y aguantando heridas horribles que normalmente matarían varias veces a un Astartes normal.

Cabe la posibilidad de que un Marine sucumba a la Rabia Negra sin haber combates en los que morir con honor. Entonces, es atado y encerrado en una celda de adamantio. Esto ha de hacerse a cualquier coste. Una vez hecho y tras asegurarse de que está firmemente atado, se anota y graba todo lo que en sus delirios pronuncia, buscando cualquier información útil. Esto se llama el Procedimiento Lestrallio, por el Ángel Sangriento que lo inventó. El mismo Lestrallio cayó en la Rabia Negra y sufrió su propio Procedimiento.

Hasta el día de hoy sólo se conoce un Marine Espacial que halla superado la Rabia Negra por sí mismo: el Hermano Exterminador Calistarius, que ahora se llama Mephistón.

Diferencias entre la Sed de Sangre y la Rabia Negra[]

Rabia negra, sed roja, compañía de la muerte de los AS

Lamentador de la Compañía de la Muerte.

Existe a veces confusión entre la Rabia Negra y la Sed Roja. Podríamos decir que una puede llevar a la otra, pero que son cosas distintas que no van de la mano. Todo Ángel Sangriento siente la llamada de la Sed cuando está luchando; la sangre caliente que se derrama les puede llevar a un estado de frenesí; mientras que la Rabia Negra suele aparecer cuando el Marine está en calma, en las vísperas de la batalla; aunque puede haber excepciones y aparecer en la batalla misma.

Ambas no son más que poder destructivo desencadenado, siendo inundados por la necesidad de matar y destrozar, al par que les embarga una necesidad de sacrificio y martirio por el Emperador. Simplemente, esta furia llega a extremos mucho más lejanos bajo la Rabia Negra que bajo la Sed Roja.

La Sed es cronológicamente anterior a la Rabia, y al parecer una de sus causantes (entre otras varias posibles) fue la Batalla de Signus Prime, mientras que la Rabia Negra se dio sólo a partir de la muerte de Sanguinius.

También es señalable que mientras que la Sed Roja desaparece (normalmente) cuando acaba la batalla y provoca pocas o ninguna alucinación, pero si una acuciante sed de sangre y un frenesí violento, la Rabia Negra es irreversible (salvo en el caso de Mephistón) y provoca graves alucinaciones y problemas de percepción de la realidad. Cuanto más tiempo pasa sufriendo la Rabia Negra, menos percibe el marine la realidad.

Un Marine Espacial puede sufrir una de las dos, o incluso las dos a la vez. Es conocido que un marine que pase mucho tiempo bajo los efectos de la Rabia negra acaba padeciendo también la Sed de Sangre. En éste caso se convertirá en una bestia inhumana, destino que todo marine desea evitar, y será ejecutado o encerrado en la Torre de Amareo.

¿Se puede provocar? Sí. En las novelas de los Ángeles Sangrientos se consigue desatar de dos formas. La primera, un Traidor les hace beber a un grupo sangre contaminada con el poder de Khorne, que les hace entrar en una Rabia Negra, pero no del todo exacta, pues todavía pueden ver retazos de la realidad, más allá del velo de la Agonía de Sanguinius.

En el segundo caso, un Gran Demonio de Tzeentch, usando sus poderes psíquicos lo consigue hacer, haciendo caer a los Ángeles Sangrientos en la Rabia Negra, aunque finalmente son salvados por la Lanza de Telesto y por Rafen.

Por último, si alguien sufre la Rabia y la Sed y no muere, ¿qué pasa con él? Se le puede conceder la Paz del Emperador, un final digno, que en muchos casos ejecutará Astorath. También se puede ejecutar en el Procedimiento Lestrallio para intentar aprender lo más posible de su caso. Por último, a algunos pobres desgraciados se les encierra en la Torre de Amareo, donde se convierten en bestias inhumanas aladas que gritan por la sangre de los vivos.

Algunas fuentes[]

  • Codex: Ángeles Sangrientos (Ediciones 5ª y 7ª).
  • Serie de novelas de los Ángeles Sangrientos, por James Swallow.
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