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Caos voldorius principe demonio

Kernax Voldorius, Príncipe Daemon

Kernax Voldorius fue un Príncipe Daemon y el Señor del Asalto de la Legión Alfa.

Historia[]

Fue un cruel e impío señor de la guerra responsable de la muerte de incontables billones de personas cuando despertó a la Marea de Sangre en el 034.M38, y cometió aún más atrocidades en los planetas Kento, Loran y Blind Hope. Está considerado como uno de los mayores enemigos de los Cicatrices Blancas, habiendo logrado escapar de muchos de los famosos Maestros Cazadores del Capítulo.

Mientras era perseguido por el 51º Maestro Cazador, Kor'sarro Khan, Voldorius se dirigió al Mundo Fortaleza imperial de Quintus, en donde se hizo con el control de las corruptas autoridades del planeta. Allí, sus tropas se enzarzaron en una guerra de guerrillas contra los Marines Espaciales de la Guardia del Cuervo bajo el mando de Kayvaan Shrike, quien unió fuerzas posteriormente con los Cicatrices Blancas. Juntos, los Astartes y sus héroes se enfrentaron al Príncipe Daemon y a su mutado séquito en la catedral de la ciudad imperial, en donde establecieron su último bastión.

Aunque destacó en combate e infligió grandes pérdidas a las fuerzas leales, acabó siendo destrozado por Shrike y empalado en una estatua del Emperador, tras lo que Kor'sarro Khan le decapitó. Su cráneo se unió a las muchas cabezas que adornan los pasajes que llevan a la Fortaleza-Monasterio de los Cicatrices Blancas.

La caza de Voldorius[]

Caza de Voldorius

La caza de Voldorius, fue una campaña dirigida por Kor'sarro Khan, el capitán de la 3ª Hermandad de los Cicatrices Blancas, contra el Príncipe Daemon Kernax Voldorius.

En la fiesta del centenario en celebración de su ascensión en 855.M41, Kyublai, el Gran Khan de los Cicatrices Blancas anunció su intención de llevar ante la justicia a uno de los mayores enemigos que jamás se haya opuesto al Capítulo. Kernax Voldorius, conocido por los Cicatrices Blancas como Bladespite, era un Príncipe Daemon y líder de guerra de los Marines Espaciales del Caos de la Legión Alfa renegados, y un enemigo tan vil como cualquiera de los White Scars con los que habían luchado.

Trillones de hombres y mujeres habían muerto cuando Voldorius había desatado el despiadado horror de la Marea de Sangre unos dos mil años antes en 034.M38, y miles de millones más habían perecido en las sacrílegas masacres dedicadas a los Poderes Ruinosos del Caos en los mundos de Kento, Loran. y Blindhope.

Ahora, declaró el Gran Khan, cesaría el reinado triunfal de terror de Bladespite. Kor'sarro Khan, capitán de la 3ª Compañia y 51º Señor de la Caza, fue enviado con su compañía y encargado de regresar con la cabeza del Príncipe Daemon.

Fue una cacería que duró más de una década solar. Aunque Kor'sarro vio a su presa en los campos de batalla de los mundos de Zoran y Kavell, y estuvo a punto de golpearlo en las ahogadas colmenas de Modanna, el azar siempre conspiró para salvar a Voldorius de su merecido destino. Y así, el rastro finalmente llevó a Kor'sarro Khan y su Hermandad a Quintus, un desolado mundo fortaleza imperial al sur galáctico de Chogoris en el Segmentum Ultima.

Quintus había sido recientemente uno de los principales baluartes del Imperio del Hombre contra los brutales Imperios Orkos de las Estrellas Jagal, pero eso fue antes de la aparición de Kernax Voldorius, quien había llegado con sus fuerzas de la Legión Alfa para descubrir la presencia de otra partida de guerra traidora de los Amos de la Noche, ya dentro del sistema.

Tras un período necesario de brutal "reajuste", Voldorius unió ambas fuerzas bajo su mando. A través de la intimidación y las falsas promesas, la partida combinada del Príncipe Daemon se había infiltrado y corrompido en la Fuerza de Defensa Planetaria de Quintus (PDF), lo que los llevó a rebelarse contra el Emperador de la Humanidad. Los Cicatrices Blancas no encontraron una mera banda de Marines Espaciales del Caos en el planeta, sino una población mundial lista para enfrentarse a ellos en defensa de los emisarios de los Poderes Ruinosos. Pero a Kor'sarro no se le negaría tan fácilmente su premio.

Dejando su crucero de ataque en lo más alejado del sistema, los Cicatrices Blancas montaron en sus cañoneras Thunderhawk. Siguiendo sigilosas trayectorias trazadas rigurosamente, las naves de ataque se deslizaron a través de la red de defensa de Quintus y aterrizaron entre los cañones devastados al suroeste de la ciudad capital planetaria de Mankarra. Kor'sarro esperaba tener una batalla en sus manos para asegurar la zona de aterrizaje, pero no encontró enemigos, sino aliados inesperados en la forma del Capitán Kayvaan Shrike y su 3.ª Compañía de la Guardia del Cuervo.

Shrike había estado de campaña en el Sistema Targus cuando llegó a sus oídos la noticia de la caída de Quintus ante el Caos. Con la zona de batalla de Targus decantándose hacia la victoria de las fuerzas del Imperio, Shrike reasignó su propia compañía de astartes a Quintus y desde entonces había estado librando una guerra de guerrillas contra los invasores de los Amos de la Noche. La experiencia de pilotaje que había permitido a los Cicatrices Blancas llegar al planeta sin ser vistos por los rebeldes quintanos no había sido lo suficientemente hábil como para pasar desapercibida para las fuerzas del Capitán Shrike, y la Guardia del Cuervo se había reunido para recibir a los recién llegados.

Mientras las naves de desembarco desplegaban los vehículos de apoyo de los Cicatrices, los dos capitanes Astartes celebraron un consejo de guerra. Ninguno confiaba completamente en el otro. La rivalidad entre ambos Capítulos se remontaba a muchos miles de años, pero tanto Shrike como Kor'sarro sabían que no tenían más remedio que dejar a un lado sus diferencias heredadas, por importantes que fueran. La Legión Alfa y sus traicioneros vasallos quintanos eran simplemente demasiado numerosos para que una compañía los derrotara sin la ayuda de la otra, por lo que los planes de batalla de los Marines Espaciales tuvieron que diseñarse en consecuencia.

A la mañana siguiente, antes del amanecer, Shrike dirigió a su compañía en un asalto sorpresa contra los traidores guarnecidos en una batería de defensa orbital a algunas leguas al oeste de Mankarra. Este era el método de guerra que Shrike y sus hermanos de batalla habían perfeccionado contra las fuerzas del ¡Waaagh! Skullkrak, y momentos después del comienzo del asalto, las fuerzas traidoras quedaron en desorden.

Una buena parte del complejo ya estaba en manos de los Astartes cuando Kernax Voldorius, al detectar el peligro, envió a la mitad de sus Marines Traidores de la Legión Alfa y gran parte de la guarnición de Mankarra como refuerzos. Pero Shrike había trazado bien sus planes. Mientras el capitán de la Guardia del Cuervo conducía a las escuadras de asalto al corazón del complejo, las fuerzas restantes se atrincheraron en el perímetro.

Así fue como la marea de refuerzos de Voldorius se estrelló contra los bastiones de las fortificaciones exteriores del complejo de defensa como el mar sobre costas distantes. El aspirante a Campeón del Caos de la Legión Alfa que dirigía el asalto era un enemigo astuto y mantuvo a sus tropas más letales alejadas de la masacre.

En su lugar, envió ola tras otra de tropas de cultistas del Caos y soldados quintanos traidores hacia las armas de la Guardia del Cuervo, gastando sus inútiles vidas en busca de una debilidad para explotar. Tal debilidad se presentó cuando uno de los bastiones se partió en dos, destruido por el fuego del Alma de Hierro, un enorme tanque Baneblade tripulado por traidores quintanos. Aprovechando su oportunidad, el aspirante a Campeón lanzó sus reservas hacia el frente.

Más de 300 Marines Espaciales del Caos de la Legión Alfa y los Amos de la Noche se lanzaron en aquel único punto de las defensas. La Guardia del Cuervo se mantuvo firme, lanzando fuego bólter contra la horda que se acercaba, pero su número era escaso y el enemigo feroz. Kayvaan Shrike emergió de las profundidades del complejo para liderar un contraataque y el enemigo retrocedió dondequiera que el Capitán Sombrío pisara pero, poco a poco, la Guardia del Cuervo comenzó a ceder terreno. El aspirante a campeón de la Legión Alfa rugió en alabanza a los Poderes Ruinosos y empujó a sus hombres hacia los muertos y moribundos. Fue entonces cuando golpearon los Cicatrices Blancas.

Antes de que Shrike dirigiera el asalto al complejo de defensa orbital, los Cicatrices Blancas se habían escondido en las cuevas del sur. Ahora, con la mayor parte de la fuerza del Caos en liza, los Cicatrices Blancas lanzaron su ataque. Con un rugido gutural de motores, los Rhinos y las motocicletas de ataque salieron de las sombras y se dirigieron hacia la refriega. El Alma de Hierro fue el primero en sentir la ira de los Cicatrices Blancas. Aunque el comandante del Baneblade le gritó a su tripulación, el enorme tanque no pudo girar lo suficientemente rápido como para enfrentarse a la nueva amenaza.

La vanguardia de Kor'sarro, todos motociclistas habilidosos, atravesaron a los traidores que protegían los flancos del Alma de Hierro. Sin frenar ni una sola vez su vertiginosa carga, los motociclistas pululaban por los flancos del monstruo de adamantium, apuntando a sus enemigos con fuego de fusión y con lanzallamas a las ranuras de visión. Uno por uno, los cañones del Alma de Hierro fueron silenciados y los motociclistas se dirigieron hacia la asediada Guardia del Cuervo, dejando al tanque paralizado y a los traidores ejecutados en su retaguardia.

Consternados por el imprevisto asalto sobre su flanco y la rápida desaparición del Alma de Hierro, los traidores huyeron. La Legión Alfa luchó hasta el último, pero los Cicatrices Blancas estaban sobre ellos. Escuadras de motociclistas recorrieron las filas de los Marines Espaciales del Caos, con espadas y lanzas destellando. Más Cicatrices Blancas salieron de los rhinos con sus bólters escupiendo fuego mortalmente sobre el enemigo. Cuando Kayvaan Shrike llevó a la Guardia del Cuervo sobre las defensas y entró en la refriega, el resultado de la batalla ya no estaba en duda.

Muerte de Voldorius[]

Los capitanes Shrike y Kor'sarro no tenían tiempo para celebraciones. Voldorius y sus seguidores todavía tenían el control de la ciudad capital de Mankarra y, si se les diera tiempo, podrían fortalecerla aún más. Dejando una pequeña guarnición en el complejo de defensa orbital, los Cicatrices Blancas llevaron a sus Rhinos y a la Guardia del Cuervo a sus cañoneras Thunderhawk.

Las defensas de Mankarra seguían siendo motivo de preocupación. Tanto la compañía de Shrike como la de Kor'sarro habían viajado livianas y solo contaban con un único Vindicator entre sus fuerzas, el acertadamente llamado Thunderheart. Afortunadamente, la eficacia del gobierno tiránico de Voldorius sobre Quintus no se había extendido al mantenimiento básico. Una salva de misiles Hellstrike de las Thunderhawks de la Guardia del Cuervo y un breve golpe del cañón demolisher del Thunderheart derribó un segmento considerable de la pared exterior de Mankarra. Antes de que la guarnición de los traidores pudiera reaccionar, los Cicatrices Blancas ya estaban en la ciudad.

Sin querer quedar atrapados en la lucha de la feroz guerra urbana, los Cicatrices lucharon desde sus transportes, saliendo de ellos solo para lanzar ataques relámpago. Las escuadras de motocicletas se precipitaron por las calles y callejones de Mankarra, pululando donde los defensores no estaban preparados, reduciendo el número de sus oponentes mediante un desgaste continuado y sin darles la más mínima oportunidad de responder de la misma manera.

Mientras los Cicatrices comandaban la batalla a nivel de la calle, las Thunderhawks de Shrike desplegaron escuada tras escuadra de la Guardia del Cuervo en los niveles superiores de las muchas fábricas y basílicas de la ciudad.

Fieles a su especialidad, los Guardias del Cuervo descendieron rápida y silenciosamente sobre los desprevenidos defensores. Acosados ​​desde arriba y desde abajo, los heréticos defensores de las FDP traidora tenían pocas posibilidades. Muchos arrojaron las armas y suplicaron piedad, pero no hubo ninguna para aquellos que habían traicionado al Emperador de la Humanidad .

Al final, solo quedaron Voldorius y su guardaespaldas personal. Infundido por la furia de la batalla, el Príncipe Daemon luchó contra todo pronóstico. Muchos hermanos de batalla cayeron ante la ira de Voldorius ese día, pero la venganza de los Marines Espaciales no se negaría y siguieron adelante para acabar con su odiado enemigo.

Rodeado, superado en número y atrapado a la sombra de la gran Catedral de la Sabiduría del Emperador, Kernax Voldorius finalmente encontró su fin. El Príncipe Daemon no cayó rápida ni fácilmente ante los sirvientes del Emperador, y su guardia personal de corruptos y retorcidos Marines Espaciales del Caos lucharon sin miedo, pero el resultado no podía ser otro que la victoria de los leales astartes.

Al final, incluso la fuerza impía de Voldorius, nacida del Caos Absoluto, no pudo prevalecer contra la determinación sagrada de sus enemigos Astartes. Empalado e inmovilizado por las garras relámpago de Shrike sobre una estatua caída del Emperador al que había traicionado tanto tiempo atrás en un raro caso de justicia verdaderamente poética, Voldorius no pudo escapar de la venganza de Colmillo Lunar, la antigua espada de energía de Kor'sarro. Con un golpe terrible, el Khan de los Cicatrices Blancas cortó la cabeza del Príncipe Daemon, borrando la mancha repugnante de su existencia del universo material.

Un mes solar después, con Quintus ahora en manos firmes de una fuerza del Astra Militarum enviada desde Tallarn, Kor'sarro y Shrike intercambiaron sus últimas palabras y se separaron una vez más. Shrike regresó a la zona de batalla de Targus para enfrentarse a los Orkos una vez más en la interminable vigilancia necesaria para mantener seguras las fronteras del Imperio.

Reclamando la cabeza de Voldorius como su premio, Kor'sarro Khan regresó para ser recibido como un héroe en la gran fortaleza-monasterio de las Cicatrices Blancas en Chogoris conocido como el Palacio de Quan Zhou.

La cabeza de Kernax Voldorius pronto se unió a la larga fila de otros enemigos del Emperador que se alineaban en el acceso al Palacio. Cada capitán se llevó consigo el respeto del otro y la gloria de una dura batalla ganada, y quizás el comienzo de una hermandad recién reforzada entre Capítulos que durante tanto tiempo habían sido rivales.

Fuentes[]

  • Codex: Marines Espaciales (5ª Edición).
  • Apocalypse Reload: Slaughterfiend Bloodpack.
  • Warhammer 40,000: Reglamento (5ª Edición).
  • Hunt for Voldorius, por Andy Hoare.
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