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Los Hermanos de Manada (Wolf Brothers en inglés) fueron el único Capítulo de Marines Espaciales creado a partir de la semilla genética de la Legión de los Lobos Espaciales durante la Segunda Fundación. Sin embargo, al final tuvieron que ser disueltos forzosamente por la Inquisición debido a la creciente inestabilidad genética y tasa de mutaciones que aparecieron entre sus miembros. Esta inestabilidad pudo haber tenido relación con la Maldición del Wulfen que en ocasiones aparece en los propios Lobos Espaciales. Algunos Hermanos de Manada, sin embargo, eligieron volverse Renegados en lugar de dejarse matar, y acabaron por ponerse al servicio de los peores enemigos de sus progenitores, la Legión Traidora de los Mil Hijos, así como de otras partidas de guerra del Caos como los Corsarios Rojos. Algunos de estos Renegados continúan activos en el M41, aunque la mayor parte del Capítulo fue destruido hace milenios.
Historia[]
La Segunda Fundación[]
La Segunda Fundación de los Marines Espaciales tuvo lugar siete años después del fin de la Herejía de Horus, a principios del M31. Esta Fundación implicó la división de las 9 Legiones Astartes Leales en Capítulos mucho más pequeños y autónomos de 1000 Marines cada uno, siguiendo los decretos del nuevo Codex Astartes del Primarca de los Ultramarines, Roboute Guilliman. A partir de entonces, en lugar de 9 Legiones, habría muchos cientos de Capítulos, y los Primarcas ya no les podrían guiar en persona. En vez de eso, el Adeptus Astartes ahora lucharía a imagen y semejanza de sus padres genéticos, haciendo uso de sus capacidades en servicio de un oscuro futuro muy diferente del que el Emperador había imaginado cuando creó a los primeros Astartes. Esta era la situación en el amanecer de la Era del Imperio. Los Capítulos ya no estaban formados por 10.000 Astartes o más, sino que creaban Capítulos Sucesores, descendientes gobernados por la misma semilla genética, de tal forma que el legado de su Primarca se mantuviera a lo largo y ancho de la Galaxia. Cuantos más Capítulos Sucesores procedieran de la misma Legión, mayor sería ese legado. Los vástagos de Roboute Guilliman fueron los ancestros de cientos de Capítulos, como lo fueron también los de Rogal Dorn, y así fue como el Imperio quedó moldeado a su imagen. Sin Sucesores, ningún Capítulo ejercía tanta influencia, y por ello los Vlka Fenryka aspiraban a crear su propia descendencia para asegurar que su temple perdurara y floreciera.
Los Lobos Espaciales crearon a partir del legado genético de Leman Russ un Capítulo Sucesor conocido como los Hermanos de Manada, y su primer Señor del Capítulo fue Beor Arjac Grimmaesson. Se pretendía que los Hermanos de Manada fuesen tan numerosos y poderosos como sus progenitores. Se les concedió un mundo natal, Kaeriol, un planeta de hielo y fuego como lo es Fenris. También se les entregó la mitad de la flota de la VI Legión, la mitad de su arsenal y la mitad de sus Sacerdotes Rúnicos y Sacerdotes Lobo. Debían haber sido el primero de muchos Sucesores, toda una línea genealógica de Capítulos fenrisianos: los "Hijos de Russ", capaces de conquistar un imperio estelar del tamaño de Ultramar. Ese era el objetivo, ser lo bastante poderosos como para rodear por completo el Ojo del Terror y así evitar que los Traidores se atrevieran a abandonarlo jamás.
Sin embargo, algo salió terriblemente mal y los Hermanos de Manada fueron disueltos, dispersados por los cuatro puntos cardinales, por la misma razón por la que ya no podría haber más Sucesores de los Lobos Espaciales: la Maldición del Wulfen. El código genético de la Canis Helix era demasiado peligroso como para copiarlo. La herencia que hacía poderosos a los Lobos Espaciales también volvía inestables a sus genomas y los hacía propensos a la mutación. Los Hermanos de Manada, localizados lejos de Fenris, degeneraron rápidamente en bestias. Así habría de suceder con cualquier intento de preparar nuevas reservas de semilla genética a partir del legado de Leman Russ. Los Lobos Espaciales archivaron sus planes de crear otros Capítulos Sucesores tras el desastroso fracaso de su anterior intento, pero en el M32, un Sacerdote Lobo llamado Thrar Hraldir "Espadasierpe" creyó estar cerca de un gran avance, aproximándose más que ningún otro a la comprensión de la naturaleza genética de la Canis Helix salvo el propio Emperador, y estuvo a punto de averiguar cómo reproducir la semilla de los Lobos Espaciales sin ninguno de sus fallos inherentes. El sueño de los Lobos Espaciales de emular a los Ultramarines, los Puños Imperiales y los otros Capítulos de la Primera Fundación creando una legión de Sucesores pareció estar al alcance de la mano. Pero sin que los Lobos Espaciales lo supieran, sus ambiciones eran sabidas por su antiguo enemigo, el Primarca Daemon Magnus el Rojo de la Legión Traidora de los Mil Hijos.
La Primera Batalla del Colmillo[]
El programa de erradicación de los fallos genéticos del legado de Leman Russ se conoció como "El Templado". Durante una generación, Hraldir trabajó en una cura. Ningún forjador de carne había descubierto nunca más que él sobre la naturaleza de la Canis Helix. Había descubierto que la Maldición del Wulfen podía ser eliminada sin dejar de preservar la gloria proporcionada por la integración de ADN animal en la semilla genética de los Lobos Espaciales. Hraldir refinó las secuencias genéticas de la Helix, alterándolas para que diesen la fuerza sobrenatural del Adeptus Astartes sin desatar la locura del Wulfen interior. Los productos de estos experimentos creados en los laboratorios de El Colmillo eran tan poderosos, tan rápidos y tan habilidosos como un Lobo Espacial normal, pero no degeneraban en Wulfen, ni sus personalidades adquirían rasgos bestiales. Poseían las cualidades que hacían guerreros soberbios a los Lobos Espaciales, y carecían de los factores genéticos que impedían crear nuevos Hijos de Russ. Sin embargo, vivían muy poco tiempo. Ninguno sobrevivía más de unas horas. Sus muertes eran difíciles, pero no obstante Hraldir había demostrado al Gran Lobo Eireik Eireksson que su objetivo estaba ya al alcance de la mano. Si hubiera tenido solo un poco más de tiempo, Hraldir habría marcado un nuevo rumbo para los Lobos Espaciales.
Tras el fin de la Herejía de Horus, Magnus el Rojo estaba determinado a cobrar su venganza por la devastación de su mundo natal de Prospero a manos de su antiguo hermano Primarca Leman Russ y su Legión. Diseñó un astuto plan para atraer a los Lobos Espaciales a una trampa para llevar a cabo su desquite final. La Legión de los Mil Hijos no había sido destruida durante la Batalla de Prospero, sino solo duramente diezmada. A pesar del grave daño que Russ les había infligido, los Mil Hijos aún tenían el potencial de lanzar incursiones al espacio imperial, y saber esto encendía el ánimo del Gran Lobo Harek Ironhelm, hasta el punto de que nada más le parecía importante. Magnus provocó constantemente a Harek, haciéndole perseguir a su Legión por decenas de planetas, y al final este se obsesionó tanto con atraparle que empezó a rastrear los planetas del mismo borde del Ojo del Terror. Al final, encontró lo que él creyó que era la base secreta de los Mil Hijos en el mundo de Gangava Prime y lanzó un ataque completo contra el planeta, dejando atrás solo a una Gran Compañía para que defendiese su mundo natal, Fenris.
El astuto Primarca Daemon hizo creer a los Lobos Espaciales que estaba reconstruyendo su devastada Legión, pero en realidad Gangava no era más que un señuelo, y el grueso de los Mil Hijos estaba listo para descender sobre el mundo natal de los Lobos Espaciales y derribar el mismo Colmillo en venganza por la Quema de Prospero. El motivo de este vengativo asalto no era simplemente desquitarse (aunque la mayoría de los miembros de su Legión así lo creían), sino también evitar que los Lobos Espaciales pudiesen crear Capítulos Sucesores. Para el Primarca Daemon, el futuro imaginado por Hraldir era uno que debía ser evitado, incluso a costa de sacrificar lo que quedaba de sus Mil Hijos. Cuando Ironhelm dirigió finalmente el asalto de los Lobos Espaciales contra la superficie de Gangava Prime, descubrió con gran sorpresa que las partidas de Marines Espaciales del Caos que se enfrentaban a ellos eran en realidad supervivientes de los disueltos Hermanos de Manada. Parecían Astartes, pero estaban horriblemente mutados y alterados por la retorcida corrupción de los Poderes Ruinosos del Caos. Aunque el Gran Lobo deseaba destruir a esas abominaciones personalmente, había recibido la noticia del traicionero asalto de los Mil Hijos a Fenris, así que destruyó a los Renegados desde la órbita, y regresó dejando atrás a un escuadrón de Naves de Escolta para asegurarse de que la devastación fuese completa. Magnus sabía que Ironhelm no se negaría a combatir con sus corruptos parientes, y de hecho si no hubiese llegado la noticia de la Primera Batalla del Colmillo, los Lobos Espaciales habrían pasado días cazando hasta el último de los Renegados, y El Colmillo habría caído en su ausencia.
Secuelas[]
Durante la Primera Batalla del Colmillo, Magnus el Rojo destruyó personalmente los laboratorios genéticos de los Lobos Espaciales en El Colmillo. Rompió los tubos de crianza y desgarró a los Hijos de Russ experimentales. Todos los depósitos de Canis Helix alterada fueron destruidos, rotos en miles de brillantes pedazos de cristal, y los Cogitadores fueron consumidos por las llamas. Equipos irremplazables, algunos de ellos procedentes de los días de la Unificación de Terra, fueron devastados por completo, y sus inestimables mecanismos internos ya no eran más que chatarra inservible. Durante la destrucción de las forjas de carne de El Colmillo Magnus se enfrentó al Sacerdote Lobo Hraldir. Aunque el Lobo Espacial luchó con valor, no estaba a la altura del Primarca Daemon, y murió. Con su muerte, El Templado no podría ser completado. No quedaba nadie vivo en el Capítulo que entendiese la obra de Hraldir, y el equipo necesario para la alteración genética había quedado destrozado por completo. A partir de entonces, los Lobos Espaciales permanecerían solos, los únicos herederos del legado de Leman Russ.
Supervivientes conocidos[]
- Svoljard - Fue uno de los Marines atrapados en Medrengard que se unió al Guardia del Cuervo Ardaric Vaanes. Más adelante, él y Vaanes se unieron al Herrero de Guerra de los Guerreros de Hierro Honsou, pero Svoljard acabó muerto a manos de otro Guerrero de Hierro.
- Escuadra de Prayd - Durante la Purga de Makenna VII, una escuadra de Hermanos de Manada renegados luchó a las órdenes de Oneius Prayd, de los Corsarios Rojos.
Leer más[]
Lista de Ejércitos de Marines Espaciales.
Lista de Legiones Traidoras y Capítulos Renegados.
Fuentes[]
Extraído y traducido de Wikihammer 40K UK.
- Codex: Lobos Espaciales (2ª Edición).
- Warhammer 40,000: Apocalipsis.
- Cielo Muerto, Sol Negro, por Graham McNeill.
- Batalla del Colmillo, por Chris Wraight.
- Planetkill - El Efecto Heraclitus, por Graham McNeill.