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Koloth Vorr, Guardián de las Tumbas de la 7ª Compañía de la Guardia de la Muerte.
Los Guardianes de las Tumbas (Grave Wardens en inglés) eran unidades de Exterminadores especializadas en el uso de armas tóxicas, desplegadas por la Legión Traidora de la Guardia de la Muerte durante la Gran Cruzada y la Herejía de Horus.
Descripción[]
Originalmente usado como un nombre informal para los diversos batallones de Exterminadores de la 1ª Compañía de la Guardia de la Muerte, dirigida por el Primer Capitán Calas Typhon, que eran transportados a la batalla a bordo del Acorazado Terminus Est, el término "Guardianes de las Tumbas" acabó por aplicarse también específicamente a los Exterminadores equipados con armamento alquímico exclusivos de la XIV Legión.
Única entre las Legiones Astartes, la Guardia de la Muerte empleaba libre y frecuentemente armas alquímicas como el reptante horror del fósfex, el perjudicial y letal gas diezmógeno y el fluido devorador de carne vasgotox, y equipaba unidades especializadas con Armadura Táctica Dreadnought para distribuirlas del mismo modo. Allí donde iban los Guardianes de las Tumbas, llevaban una muerte espantosa y prolongada a cualquiera que se cruzase en su camino, y cuando la Guardia de la Muerte fue desatada sobre el Imperio tras la traición del Señor de la Guerra, armas que hasta entonces solo habían sido utilizadas contra las más nauseabundas y resistentes formas de vida alienígenas se volvieron contra la Humanidad y la tasa de matanzas de la Guardia de la Muerte creció mundo por mundo.
Armamento[]
Las unidades de Guardianes de las Tumbas, formadas por entre 4 y 9 Guardianes y un Maestro Químico, iban equipadas con una armadura de Exterminador modelo Cataphractii (especialmente diseñada con unidades de contención y proyección de elementos alquímicos integradas, que permitían a la escuadra envolverse en la "nube de muerte", una niebla asesina de toxinas, y arrojar chorros concentrados de vapores venenosos a sus enemigos), un puño de combate y un lanzagranadas de asalto (un arma robusta aunque de corto alcance, basada en un modelo empleado generalmente en los tanques del Ejército Imperial, que puede disparar proyectiles perforantes estándar o granadas de toxinas, las cuales liberan una nube de agentes químicos mortales y de vapor concentrado de ácido al estallar). Todos los miembros de la escuadra podían sustituir su puño de combate con un puño sierra, y uno de cada cinco Guardianes de las Tumbas podía reemplazar su lanzagranadas de asalto con un lanzallamas pesado con munición química. Cada escuadra podía desplegarse en un Land Raider Phobos (si no pasaba de 5 miembros) o en un Tanque de Asalto Spartan (si no pasaba de 10).
El Maestro Químico, por su parte, podía cambiar su lanzagranadas por una combiarma.
Miniaturas[]
Fuentes[]
- The Horus Heresy II.