 | El Sargento Guillermito, mascota de los Marines Espaciales, tiene el honor de patrocinar este espacio por orden del Capellán Cassius de los Ultramarines. ¡Pulsa sobre él y te acompañará a una Cruzada épica! ¡Lee más! ¡Sin piedad, sin remordimientos, sin miedo! |
Hay miembros entre las filas de los Vigías de la Muerte que caminan hacia las puertas de la fortaleza de la guardia bajo el amparo de la sombra. Conocidos como Escudos Negros, estos misteriosos guerreros no divulgan su verdadero nombre, ni tampoco llevan la heráldica de su Capítulo. Cualquier icono, color o texto que les identifique fue borrado de su armadura hace mucho, y con gusto visten los sombríos colores de los Vigías de la Muerte.
Aunque es poco común, un Escudo Negro que entre en la fortaleza de la guardia puede pedir a su señor que lo acepte. Este tiene derecho a rechazarlo, pero la fuerza de un Marine Espacial experimentado es tan valiosa y la lucha contra los xenos es tan desesperada, que en la práctica esto rara vez ocurre.
La causa de que este encapuchado guerrero tomara tan drástico paso seguirá por siempre siendo un secreto, y en los Vigías de la Muerte hay un entendimiento tácito de que esta pregunta quedará sin respuesta. Algunos pueden ser los remanentes de un Capítulo casi destruido en el cumplimiento del deber, otros los últimos guerreros leales de uno que se ha vuelto renegado, o incluso aquellos pocos legendarios perdidos hace tiempo, que deberían haber sido ejecutados al instante pero cuya lealtad era conocida. Al margen de su origen, todos luchan con severa y obstinada furia para probar su lealtad al Imperio una vez más.
Fuentes[]
Codex: Vigías de la Muerte (8º Edición) pág. 9.