Esta nave necrona se encuentra dentro de la clasificación de naves de escolta. Es la nave necrona que más puede esquivar el fuego enemigo, por lo que el Imperio intentó desarrollar una estrategia para lidiar con ellas.
Estas investigaciones pararon cuando cinco cruceros clase mortaja lanzaron un ataque suicida contra una instalación en Marte .
El hecho de que uno de ellos consiguiera llegar a aterrizar demuestra su resistencia, y el de que no fueran detectados hasta pasar la atmósfera de Marte, la tecnología necrona. Se cree que dicho ataque es la avanzadilla de la flota necrona que se dispone a recoger al Dragón de Marte de su prisión.
Estos cruceros actuan como los ojos y los oidos de la flota necrona a larga distancia, función que desempeñan perfectamente, pues hasta la fecha no se ha conseguido capturar ninguno.
Ya que fueron capaces de pasar por las defensas de Marte, uno de los mundos más protegidos del imperio, con total impunidad, ninguna base está a salvo de ellos.
Miniatura[]
Fuentes[]
- Battlefleet Gothic Armada, pp. 73–74, 77
- Codex: Necrones (3.ª Edición), pg. 11