Citas (Guardia Imperial)

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Ursarkar E. Creed dirigiendo la defensa de Cadia.

Este artículo recoge todas las citas y comentarios relativos a la Guardia Imperial y el Militarum Tempestus, así como las de sus propios integrantes. Los propios comentarios y citas se organizan en orden alfabético según el nombre de su autor. Las citas anónimas se nombran al comienzo de la lista.

Sobre la Guardia Imperial y el Militarum Tempestus

"Un cadiano que no sabe desmontar y montar su propio rifle láser a los diez años se ha equivocado de planeta."

—Anónimo

"CUCHILLOS DE CATACHÁN (consultar también XXV327.56 Catachán y CCV1432.2 Rifles de Catachán)
Para un Guerrero de Catachán, un cuchillo no es solo una herramienta y un arma, sino también una señal de su estatus. La aleación de acero utilizada en estos cuchillos solo se puede obtener en el planeta Catachán. Una hoja de Catachán bien fabricada no se oxidará, y permanecerá afilada incluso después de un uso continuado.

Los cuchillos de Catachán son muy apreciados y buscados a lo largo y ancho del Imperio. Muchos comerciantes venden copias falsas, pero el único modo de obtener con seguridad un cuchillo de Catachán auténtico es tomarlo de un Catachán. Y no es fácil, ya que los catachanes estiman enormemente sus cuchillos. Se dice que un catachán prefiere perder su brazo derecho a su cuchillo.

Cada guerrero de Catachán aprende el arte de fabricar sus cuchillos de manos de sus padres, y forjar un cuchillo propio se considera una de las pruebas de madurez. Aunque el diseño básico de los cuchillos es el mismo, existen sutiles variantes entre los grupos familiares e individuales, dependiendo del tamaño y las preferencias del usuario.

COLMILLO DE CATACHÁN
Es el tipo de cuchillo más común en los regimientos de catachanes. El Colmillo de Catachán mide unos 60 cm. de reluciente acero. Es igualmente útil tanto para abrirse paso en la jungla como entre la escoria Eldar. El Colmillo de Catachán es famoso en un millar de sistemas estelares.

También sirve para resolver disputas entre catachanes. Normalmente se sitúa un cuchillo en el centro de un pozo de lucha y los combatientes deben luchar para apoderarse del cuchillo. El duelo suele ser a primera sangre, aunque a menudo esto significa una herida mortal.

AGUIJÓN NOCTURNO
Esta arma es más pequeña que otros diseños típicos, y su hoja ennegrecida convierte al Aguijón Nocturno en un cuchillo especialmente adecuado para la infiltración y las misiones nocturnas, cuando el reflejo de la luz en una hoja puede significar la diferencia entre la vida y la muerte. La hoja es trialgular, por lo que es poco probable que cualquier herida causada por un Aguijón Nocturno se cierre o cure. Los catachanes suelen empapar la hoja de este cuchillo con algunos de los venenos nativos de su inhóspito planeta natal.

GARRA DEL DIABLO
Bautizado con el mismo nombre que el temible depredador de las junglas de Catachán, es el tipo de cuchillo tradicional más grande de todos los de Catachán. Mide entre 90 y 120 cm., por lo que la Garra del Diablo es más una espada que un cuchillo. En el campo de batalla se utiliza principalmente en combate cuerpo a cuerpo, e incluso ha alcanzado una temible reputación entre los Orkos, que lo llaman "El Kortador".

La hoja está hueca y medio llena de mercurio para lograr una mayor potencia al blandirla en arco. Las espadas de energía utilizadas por los escalafones superiores de los regimientos de Catachán a menudo son idénticas en diseño a la Garra del Diablo."

—Extracto de Armas y Equipo de la Guardia Imperial, por Atlek Sorasius

"Los millones de mundos que forman parte del Imperio velarán por su propia defensa. También velarán por la defensa del Imperio y participarán en todas las guerras que el Emperador decida emprender, guiado por su sabiduría y siguiendo los requisitos impuestos por el Administratum. Con este objetivo, todo planeta habitado deberá reclutar y mantener ejércitos para su propia defensa, y seleccionará a los mejores hombres que haya entre sus filas para unirse al mayor ejército del Imperio: la Guardia Imperial.

Todo Comandante Imperial jurará que estos hombres, entregados a la defensa de reinos que no son los suyos, irán armados y equipados para luchar como soldados del Imperio, y que su dominio contará con las más poderosas maquinarias de guerra para derrotar a los enemigos del Imperio. El Comandante Imperial entenderá que él y sólo él es responsable de esta tarea. Si su ejército se muestra insuficiente o incompleto en algún aspecto, perderá su posición y se enfrentará a los castigos y censuras que los Altos Señores de Terra o los agentes nombrados debidamente para la ocasión consideren apropiados."

—Introducción al Codex Exercitus, que incorpora el Juramento Amalathiano

"Los Vencedores viven con honor; los Vencidos perecen en la ignominia."

—Exempla Tactica del Departamento Munitorum, 27:2

"¿YARRICK? Yarrick, maldito zea zu pellejo. ¿Qué pasa, Uzbek, inútil mierda de Garrapato? [...] Uzbek, ¿¡ze te ha okurrido alguna vez ke ezte flojucho 'umano reventó a algunoz de miz mejorez guerreroz en la Batalla por la Kolmena Hades!? Eza Kolmena habría kaído en miz garraz zi no hubieze zido por él. Entrenó a loz 'umanoz ke defendían el lugar. Loz organizó. Loz dirigió en kombate. Nunka ze dio por vencido. A vezez kreo ke tiene algo de Orko... [...] Uzbek, verdaderamente erez el Orko máz eztúpido ke konozko, y ezo ya ez decir mucho. Yarrick no ze dejará apalizar. Y no tiene zuerte: hace zu propia zuerte, justo komo yo. Me ganó esa vez en la Kolmena Hades, y me ganó bien y zin trukoz. ¿O kreez que lo úniko ke necezita un 'umano para derrotarme ez un poko de zuerte? [...] Bien, porke tendría ke librarme de ti zi ezo ez lo ke pienzaz, ¿verdá? Nunka olvidez, Uzbek, ke Morko y Gorko noz han bendecido con un oponente peligrozo para 'azernoz a los Orkos los mejorez guerreroz de la galaxia. Zi alguien te da una paliza, le odiaz; pero también le honraz. Bueno, eze Yarrick, le odio máz ke a ningún otro 'umano... pero también ez al ke máz honro. Y kon zu ayuda, zeréiz loz Orkos máz duros de toda la galakzia. Ahora kítate de mi vizta, y no vuelvaz hazta que zepaz exactamente dónde eztá Yarrick."

—Ghazghkull Mag Uruk Thraka

"Loz humanoz zon todoz ezkoria debilucha que merecen ser pizoteadoz. Excepto Yarrick Un-Ojo. Ese sí que sabe luchar."

—Ghazghkull Thraka

"Hay quienes elevan sus voces con angustia y dolor por el sufrimiento de la Humanidad. Esos hombres sin fe anuncian el fin de los tiempos, la condena final para todos. Y yo os digo, ¡esos necios se equivocan! ¡Yo les llamo mentirosos, herejes y agoreros! No escuchéis a esos paganos, hermanos míos. ¡Estos son días gloriosos! ¡Regocijaos!, pues todos pueden alzarse y luchar por una causa verdaderamente justa y cualquier hombre, sea lo humilde que sea, puede ganarse la gloria imperecedera a través del martirio ante los ojos del Emperador."

—Confesor Huldwyn antes de la Masacre del Arroyo Negro

"El arma favorita de un catachán es la jungla."

—Proverbio nativo de Catachán. Archivo Ref. 006/D2/Z

De la Guardia Imperial y el Militarum Tempestus

"Por el valor demostrado en combate y un servicio al Emperador más allá del deber, se le concede la Estrella de la Tierra. Llévela con orgullo para inspirar a otros para que cumplan meritoriamente su servicio del Hombre. ¿Quieres que te la guarde hijo? ¿Como el resto? Vale, hijo, puedes retirarte."

—Un Coronel anónimo, condecorando a Marbo por haber eliminado a toda una escuadra de alienígenas, matando a su comandante y capturando su puesto de mando, todo ello él solo

"¿Qué importa que nuestro mundo pierda a una generación entera en batalla, si al no hacerlo significa que no habrá más generaciones después de ella?"

—Comandante Abrhest Kohlt durante el reclutamiento masivo de Durant III

"He navegado dejando atrás mil sistemas solares durante más de cien años para conquistar este condenado planeta. ¡Y voy a conquistarlo!"

—General Alberan Varn, tras descubrir que la flota de invasión a sus órdenes había permanecido más de 107 años en la Disformidad, y que su objetivo en el Teatro de Guerra Retribución era ya solo una roca arrasada infestada de Tiránidos

"Me cobraré mi venganza en sangre, aunque tenga que hacerlo gota a gota."

—Atribuido a Alberan Varn en La Conquista de la Venganza de Torma

"Hay que ser rápido y silencioso como la brisa que cruza las dunas sin mover ni un solo grano de arena."

—Capitán Al'rahem

"Muchos reclutas creen erróneamente que la misión de las minas y las trampas es matar o herir al enemigo. Por supuesto, esa solo es su función secundaria: la principal es desorganizar y retrasar el avance enemigo en ciertas zonas. Después de unos cuantos encuentros con trampas, es probable que la mayoría de los enemigos se desmoralicen, se excedan en sus precauciones y extiendan sus líneas, quedando vulnerables ante una emboscada.

Existen tres tipos de minas: despedazadoras, saltadoras y de plasma.

Minas Despedazadoras: una carga de fragmentación montada en una placa vertical lanza la explosión en una dirección específica, creando un cono de destrucción repleto de fragmentos de metal al rojo vivo. Ideal para cubrir senderos, arroyos y caminos. Minas de tipo "despedazador" más comunes: mina automática Triplex Phall tipo XII "Repudio", arma de negación de área Armageddon "Cabezamartillo", mina antipersonal "Creaviudas" diseño Necromunda.

Minas Saltadoras: llamadas así porque estos artefactos saltan al aire antes de estallar. Son particularmente efectivas contra objetivos dispersos. Sin embargo, un jefe de escuadra precavido hará avanzar un hombre en punta para intentar reducir la efectividad de estas minas. Minas de tipo "saltador" más comunes: antipersonal "Ranita" tipo Necromunda, artefacto de detonación vertical tipo XIV Geariano, mina de fragmentación marciana tipo CXI.

Mina de Plasma: la mayoría de las minas antipersonal emplean ondas de choque y metralla para herir o matar a sus víctimas, pero esto las hace relativamente ineficaces contra los enemigos protegidos con armaduras personales, como las servoarmaduras. Las criaturas Tiránidas más grandes y los bípodes blindados también tienen muchas posibilidades de sobrevivir incluso a la detonación en su inmediata proximidad de una mina saltadora o despedazadora. Cuando se espera combatir contra este tipo de oponentes, son más útiles las minas de plasma. Estas "disparan" un chorro de plasma sobrecalentado contra lo que las activa, infligiendo heridas horribles e invariablemente fatales. La mayor desventaja de la mina de plasma es su menor área de detonación comparada con la munición convencional. Minas de plasma más comunes: todas las armas estándar de plasma con depósitos de combustible fotónico-hidrógeno, esfera explosiva antiarmadura "Cíclope" tipo Necromunda, mina de energía de 90KW tipo Gólgota.

A veces, las circunstancias impiden el uso de munición específica para las trampas. Sin embargo, es relativamente simple improvisar una variedad de trampas básicas a partir de materiales naturales y munición comúnmente disponible. Abajo se muestran algunos de los ejemplos más comunes.

Rama doblada: localiza una rama flexible a la altura de la cabeza, la cintura o la rodilla. Afila las pequeñas ramas que tenga a lo largo. Dobla la rama y utiliza un cordel (cuanto más delgado mejor) para atarla con un nudo corredizo de forma que la rama se halle tensa. Tensa el cordel como un alambre debajo de donde estaba originalmente la rama. Cuando un enemigo pisa el cordel, la rama retoma su forma violentamente y lo empala.

Pozo Puntiagudo (o Mandíbula del Diablo): Cava un pequeño pozo de profundidad hasta la rodilla aproximadamente. Siembra el fondo con estacas puntiagudas y coloca más estacas en los bordes de manera que apunten hacia el fondo. Camufla el pozo con ramas, hierbas y cualesquiera materiales disponibles. Cuando un enemigo pise el pozo, el pie quedará empalado por las estacas del fondo; cuando intenten sacar el pie del pozo, las estacas que apuntan hacia abajo en los lados infligirán más heridas. Una variante muy común es colocar formas de vida peligrosas locales en el fondo del pozo, lo que hace que se intente sacar con más rapidez aún la extremidad, incrementando las posibilidades de herirse (aparte de cualquier mordisco, picadura, etc., que la forma de vida pueda infligir).

Balas enterradas (revientadedos): consisten en un cartucho normal de bólter o escopeta enterrado de forma que su base descanse sobre un clavo, roca o pincho y que la punta del proyectil se halle justo debajo de la superficie del suelo. Cuando un enemigo pisa la punta de la bala, su peso la hace golpear contra el lecho puntiagudo, disparando la bala justo directamente bajo su pie."

—Archivo: Adeptum 2.73 - El Campo de Batalla Hostil - Guía para Principiantes: El Arte de Colocar Trampas, Minas y otras Sorpresas Desagradables

"No me preocupa en qué mundos sean reclutadas mis tropas. Sólo me importa que me sirvan con una lealtad inquebrantable. Su deber es luchar y morir para que la Humanidad pueda ser preservada, y el mío es ahogar al enemigo en la sangre de su sacrificio."

—Comisario Mayor Barron Reed

"¿Así que se ocultan en los árboles? ¡A ver cómo se oculta de esto esa panda de amantes de grox!"

—Senescal de Artillería Bromner, del Wyvern Lluvia de Absolución

"Querido Sebastian,

Bueno, ya estamos aquí, en el mundo de Zaro. Han pasado tres meses desde que dejé la granja; aunque es difícil de decir, con todo eso del viaje interestelar y demás. El regimiento tardó dos semanas en reunirse y después tuvimos que esperar otra semana hasta que llegaron los transportes de la Armada. Entonces fue cuando hicimos nuestro juramento al Emperador Todopoderoso de proteger a la humanidad y de derrotar a nuestros enemigos. No sé cuántos somos en el regimiento, pero tardamos dos días enteros en embarcarnos, con doscientos hombres por lanzadera cada hora. Una vez a bordo, nos dividieron en grupos de entrenamiento y nos dieron nuestras armas y demás equipo. Tengo mi rifle láser reglamentario, fabricado en las factorías de Last Reach, pero algunos chicos de la Compañía A tienen unos cuantos rifles láser de otro sitio. Creo que alguien ha mencionado Triplex Phall. Bueno, los rifles funcionan igual, pero a la vez son diferentes. Puedes desmontarlos y limpiarlos de la misma forma, pero sus rifles tienen la culata de metal, mientras que los nuestros la tienen de madera; los suyos tienen una empuñadura en plan pistola mientras que los nuestros tienen un simple mango. Supongo que se debe a que no hay mucha madera en Last Reach, por lo que las fábricas deben utilizar lo que tienen a mano. De todas maneras, no importa el aspecto que tengan, funcionan igual: ¡apuntas al enemigo y aprietas el gatillo!

Nuestra nave era el Orgullo de Laurence, y para ser sincero, el viaje no me gustó demasiado. Compartí el sollado con el resto de mi pelotón, cincuenta en total (por supuesto, nuestro teniente estaba con el resto de los oficiales en otra parte de la nave). Estaba repleto, y después de un duro día de entrenamiento, apestaba bastante, ¡no como el aire fresco del que estás disfrutando! Nos hicieron trabajar duramente. Marchas antes del desayuno, después más entrenamiento y una hora de prácticas de tiro. Por la tarde era combate cuerpo a cuerpo y supervivencia en terreno hostil. Por supuesto, también hemos estado rezando de forma regular, con un servicio religioso al término de cada día, antes de apagarse las luces. La capilla a bordo del Laurence era mayor que la de Homeward. Nunca escuché a tanta gente a la vez cantando himnos. Es emocionante saber que formo parte de todo esto.

Creo que nos llevó unos dos meses llegar desde Last Reach hasta aquí, y otros dos días desembarcar. Estaba preocupado porque nuestro teniente nos dijo que quizá tendríamos que desembarcar directamente en la línea del frente, pero al final desembarcamos en la ciudad donde está la base principal, al [CENSURADO]. Mientras desembarcábamos de los "mecherillos" (así llaman los de la Armada a las lanzaderas), otro regimiento iba embarcando. Logré charlar con algunos de ellos, y me dijeron que habían estado combatiendo ¡durante casi diez años en el mundo de Zaro! Ya se sabe que estos Orkos no se dan por derrotados con facilidad. Nosotros éramos su relevo. Aparentemente, se les había permitido unirse a una de las cruzadas. Puede que incluso colonicen un mundo, si lo conquistan. ¿Puedes imaginártelo, empezar todo un asentamiento? Espero hacerlo lo bastante bien como para conseguir una recompensa similar. Quizás se llame el mundo de Damek o la tierra de Damek, ¡eso estaría bien!

Los hombres que se marchan son de Lorentia IV, y por lo que dicen, está mucho más cerca del mundo de Zaro que Last Reach. El teniente nos explicó que cuanto más dure una contienda, más lejos de ese mundo deben buscarse nuevos reclutas. Aparentemente, es un mundo colmena donde hay ciudades habitadas por millones de personas en un espacio realmente reducido. Después de mi experiencia a bordo del Laurence, me alegro de no combatir en un sitio así. Desde luego prefiero las llanuras y las montañas de aquí. Se rumorea [CENSURADO]. Los lorentianos me han dicho que ellos tampoco fueron los primeros en llegar, ¡por lo que esta guerra probablemente sea más vieja que tú! Se notaba que estaban encantados de marcharse. Solo quedaban los suficientes para llenar seis lanzaderas. Sin embargo, los hombres con los que hablé estaban orgullosos de haber combatido contra los Orkos y de proteger a la gente del mundo de Zaro de esa escoria alienígena. Cuando atravesamos la ciudad (no me acuerdo del nombre), había gente aclamándonos, ¡como si ya hubiésemos ganado la guerra! A todos nos gustó, y es bueno saber que vamos a luchar por el Emperador. Era un poco raro vernos marchar en una dirección con nuestros uniformes rojos, nuestros botones relucientes y nuestros tanques recién pintados, mientras que los lorentianos marchaban en dirección contraria con monos marrones embarrados, con trozos de vegetación y otras piezas de camuflaje pegados en ellos. Uno de ellos hizo un chiste sobre los pósters de "Antes y Después" que ves en las capillas, en los que se ve a un hombre lleno de pecado antes de confesar y después contento de cumplir su penitencia en el potro de castigo.

Bueno, ya suenan los tambores de la Compañía para que nos reunamos, así que será mejor que termine, a menos que quiera que me toque limpiar las letrinas o incluso terminar con unos cuantos latigazos en la espalda. Espero que te llegue esta carta, y recuerda ayudar al tío Maximillian cuando llegue la temporada de la poda de Grox. Ya sabes que su espalda no es tan fuerte como solía ser. Cuida de todo el mundo por mí, hermanito, y recuérdame en tus plegarias. Echo de menos la granja, pero estoy contento de estar aquí, cumpliendo con mi deber con el Emperador ayudando a la gente del mundo de Zaro. Sigue practicando la caza, ¡y quizás cuando seas mayor puedas unirte a mí! Estoy orgulloso de ti, ¡puedes estar orgulloso de mí!"

—Carta del soldado Damek Roigreh a su hermano Sebastian

"Tengo bajo mi mando un ejército completo de la Guardia Imperial. Cincuenta regimientos, incluyendo tropas de desembarco especializadas, tropas de infiltración, formaciones mecanizadas, compañías acorazadas y artillería móvil. Más de medio millón de soldados y treinta mil tanques y piezas de artillería siguen mis órdenes. Que el Emperador tenga piedad del insensato que me desafíe, porque yo no la tendré."

—Señor de la Guerra Demetrius, al inicio de la Cruzada de Salónika, 733.M38

"He visto la guerra en todas sus formas, desde guerreros salvajes matándose entre ellos con piedras hasta la destrucción de un planeta entero por parte de una bomba vírica. He visto a los Marines Espaciales salir airosos de una muerte segura y a los Titanes aplastando a pelotones enteros bajo sus pies. Pero no hay visión más conmovedora que una gran carga de caballería."

—Dravin Gratz, 14º de Tharinga

"Una mente pequeña puede llenarse de fe con más facilidad."

—Comisario Exen Trauer, 23º Regimiento de Mordia

"Ningún soldado tiene permiso para morir. No hasta que hayáis dado a esta escoria hereje una bienvenida cadiana. ¡Primera fila, fuego! ¡Segunda fila, fuego!"

—Galen Bale, Comandante de la 4ª Compañía del 111º de Cadia, durante la última batalla de Cadia

"Pueden pasar todos sus minutos libres puliéndose las botas y desfilando en una formación perfecta, pero no te dejes engañar por su aspecto. Estos hombres son asesinos de ojos de acero y sangre fría. Preferiría tener una sección suya que una compañía entera de cualquier otro tipo de soldados."

—Gharan O'Hen, Jefe de Personal del Ejército, Guardia de Hierro de Mordia

"Una vez, en casa, pensé que me gustaría tener un par de botas de Diablo de Catachán. Maté media docena de esas feas criaturas, ¡pero no encontré ninguna que las llevara!"

—"Dientepétreo" Harker, hablando con un escéptico trabajador del Munitorum

"Le metimos fuego a ese búnker y vimos arder a los herejes hasta que el viento se llevó sus cenizas. Fue bello, Sargento, simplemente... bello."

—Artillero "Tizón" Hennessey, IX Blindado de Catachán

"Para asegurarnos la victoria, precisamos de la confianza más absoluta y de la más profunda ignorancia. Afortunadamente disponemos de un hombre que cuenta en abundancia con estas dos virtudes: el General Alberan Varn."

—Atribuido al Comandante Solar Holinar San

"¡Hombres de Tanith! ¿Queréis vivir para siempre?"

—Coronel Comisario Ibram Gaunt del Primero y Único de Tanith

"Soy un Comisario. Estoy autorizado a imponer justicia allí donde falte. Estoy autorizado a castigar la cobardía. Tengo autoridad total para juzgar, en el nombre del Emperador, en el campo de batalla."

—Coronel Comisario Ibram Gaunt, momentos antes de la ejecución de su tío el General Aldo Dercius

"¡Maldita sea, precisamente ahora! No bastará con usar la fuerza bruta. Envía mensaje al Sargento Marius de que sus Ángeles Sangrientos deben sacar con vida al gobernador."

—General Kasmund Dar-Galot, durante los últimos días de la Secesión Aximal

"Llorad por aquel cuya fe no fue suficiente. ¡Regocijaos por vosotros, ya que mi fe no conoce límites! ¡Adelante, por el Emperador!"

—Comisario Krieglust

"Esos bosques de helechos cubren ocho millones de kilómetros cuadrados y están repletos de gusanos de sangre, plantas venenosas, lobos selváticos y suficientes enfermedades terminales y plagas para pudrir a un hombre en un día. Si queremos librarnos de la escoria Orka que ocupa los bosques altos, solo existe una fuerza en la galaxia que puede asegurarnos la victoria. Necesitamos a los mejores combatientes de selva del Imperio; necesitamos a las tropas de jungla de Catachán."

—Lord General Krivonor, Cruzada Troyana

"Por cada espectáculo inquietante que he contemplado en esta galaxia, he encontrado otro aún más extraño entre nuestras propias filas. Mirad por ejemplo a los Tecnosacerdotes: todo ojos brillantes, nidos de cables y carne maltrecha. Pensar que un hombre pueda hacerse eso a sí mismo de forma voluntaria me pone los pelos de punta. Además, son personajes taciturnos, distantes, llenos de secretos. Tratar con ellos era más difícil que sacarse una garrapata biliosa de la bota y, pese a ello, mis chicos saben que no durarían ni un solo día en el campo de batalla sin los de rojo. Los Tecnosacerdotes hacen que los vehículos vuelvan a funcionar, arreglan los sistemas de armas y calman a los espíritus máquina furiosos. Son capaces de caminar a través del fuego para salvar a uno de sus preciosos tanques, aunque no se preocupen en absoluto por los hombres que van en su interior."

—De las memorias del General Kurtis Hicks, IV Grupo de Ejércitos de Catachán

"Un buen soldado obedece sin hacerse preguntas. Un buen oficial dirige sin vacilación."

—Sargento Lukas Bastonne, citando el Tactica Imperium (retransmitido en las fortalezas de entrenamiento de Cadia)

"¡Lo que no pueda aplastar con palabras lo aplastaré con los tanques de la Guardia Imperial!"

—Comandante Solar Macharius

"Una victoria no consiste únicamente en derrotar al enemigo, sino en destruirlo, erradicarlo completamente de la memoria viva, no dejar rastros de sus empeños, aplastar sus logros y eliminar todo rastro de su existencia. No hay enemigo capaz de recuperarse de semejante derrota. Este es el significado de la victoria."

—Macharius

"Les doy a mis hombres sueños, y los hombres siempre siguen los sueños."

—Macharius

"¿Paz? No puede haber paz en estos tiempos."

—Macharius

"Intenta siempre sacarle ventaja a tu situación. Si superas al enemigo en número, utiliza los refuerzos para atacar cuando las filas del enemigo empiecen a estar forzadas. Si estás en desventaja numérica, concentra tus fuerzas para que el enemigo tenga que luchar sólo contra tus mejores tropas. Si eres más efectivo a corto alcance, lucha en terreno denso para sacarle el máximo partido a tu ventaja. Si eres superior a largo alcance, ataca desde un frente extendido. Pero nunca olvides que un comandante que pone toda su fe sólo en la artillería pesada puede caer ante una táctica mejor, y un comandante que sólo se basa en el combate cercano sin el soporte adecuado perderá sus tropas. Nadie ha ganado jamás una batalla sin tener en cuenta las debilidades del enemigo, o reconocer las propias."

—Macharius, antes de la conquista de Kallastin

"Solos, nos alzamos como bastiones de fuerza. Pero cuando luchamos unos junto a otros, somos una fortaleza de fe que ningún enemigo puede superar."

—Macharius

"He visto Orkos del tamaño de Sentinels capaces de arrancarle la cabeza a un hombre de un puñetazo. He visto Tiránidos asaltando Shatterpeak, con sus filos y colmillos escupiendo ácido que convertía a los tanques en escombros. Estuve en medio de Ciudad Kalda cuando llegó la tormenta de fuego, y me enfrenté a adoradores del Caos tan enloquecidos con su falsa religión que seguían luchando incluso cuando el fuego los consumía. En todo ello aprendí algo que siempre es cierto. No importa lo grande, enloquecido o antinatural que sea tu enemigo: no puede matarte si le cortas la cabeza con tu colmillo de Catachán."

—Cabo "Razorback" Mahoney, XLI de Catachán

"¿Acertarle desde aquí? ¿Hablas en serio, piernaslargas? ¿Te parezco un bizco de Catachán? Podría volarle la cabeza al doble de esta distancia. Y si no, mira..."

—"Ojoloco" McGriffin, francotirador Ratling

"No nos arrugamos ante el fuego, nuestra voluntad es como el acero y el calor la endurece. No permitáis que esos enemigos olviden quiénes somos. ¡Tendrán nuestra fuerza e ira!"

—Coronel Makalian durante la Tercera Guerra por Armageddon

"Disparar. Desembarcar. Disparar. Recoger. Repetir las veces que haga falta."

—Mantra de los pilotos de Valquiria del Aeronautica Imperialis

"No basta con lograr la victoria, mi enemigo ha de ser completamente derrotado. No es suficiente con que mate, todos mis enemigos tienen que perecer. No me vale con obtener el éxito, ¡todos los demás deben fracasar!"

—Mogul Kamir, al concluir la Supresión del Cuadrante Veintitrés

"Su presencia en el campo de batalla vale por cincuenta mil hombres."

—General Nitron, refiriéndose al Señor de la Guerra Solon en una conversación con sus oficiales

"El sargento mayor ma preguntao cuál e' mi curro y yo le dicho, humm..., haser lo que me disen. Ma dicho que soy un genio y ma dao otra medalla. ¡La Guardia Imperial mola!"

—Nork Deddog, Guardaespaldas Ogrete

"Dame diez hombres y mujeres con la capacidad de luchar con astucia y con buenas habilidades de combate, con fe para resistir y con inteligencia suficiente para seguir órdenes. Dame eso y te daré la victoria."

—Teniente Obadiah Sterophensky, responsable de misión de la Operación Filo Súbito

"Rápido como una mamba látigo, agudo como una espina de cactus, tozudo como un grox salvaje."

—Alabanza del Coronel Pannent al Guerrero de Catachán

"¡Objetivo avistado! Predator de los Corsarios Rojos, a la izquierda del búnker. ¿Veis esa soldadura en la torreta? Atentos... ¡Fuego! Buen disparo. Conductor, minas AT, gira a la izquierda, ahora. ¡Artillero! Infantería enemiga en el cráter, once en punto. Explosivos... ¡Fuego! Operadores de barquillas, estad alerta, vamos a tener compañía en breve..."

—Noble Comandante Pask. Reporte de comunicación interna, Mano de Acero, operación retort (segundo asalto a Fuerte Lycoss)

"La infantería gana tiroteos. Los tanques ganan batallas. La artillería gana guerras."

—Viejo proverbio de los oficiales de artillería del Astra Militarum

"Yo, Lord Quandros Sylman, juro mi más completa y absoluta lealtad y devoción al Emperador. Tomo el manto de Comandante Imperial del reino del Emperador, y en mí recae la custodia de los dominios del cuarto mundo del sistema Landor. También recae sobre mí la protección de estos dominios, y por tanto, reconozco mi deber de crear y organizar las flotas y ejércitos necesarios para cumplir mi deber.

Como Comandante de Landor IV, tendré disponibles para las Huestes del Emperador un mínimo de una décima parte de los ejércitos de mis dominios para el cumplimiento de las cruzadas decretadas por los Servidores del Emperador, y tanta tropa como deba en épocas de extrema necesidad o conflictividad. A cambio, puedo esperar el total apoyo de los Oficios del Emperador en la defensa de mi dominio si aparece una amenaza ante la que mis propios ejércitos no sean defensa suficiente.

Juro que los hombres que sean entregados para la defensa de los dominios de otros estarán armados y equipados para combatir, y que mis dominios estarán preparados con las máquinas y artefactos de guerra necesarios para mis ejércitos, por si el espectro de la guerra nos amenaza. Entiendo que en este asunto soy yo y solo yo quien tiene la responsabilidad final de llevarla a cabo y que, como Comandante Imperial, si mis ejércitos fallan o carecen de lo necesario para mantener su capacidad de defensa de mis dominios para el Emperador, ya no estaré capacitado para ser el Señor de los dominios del Emperador, y puedo ser ejecutado de forma sumaria por cualquier negligencia o delito en estos mis deberes más importantes, tal como decidan los Señores del Adeptus Arbites.

Juro esto por mi alma inmortal con el Emperador como testigo. Que durante mucho tiempo Su mano nos dirija, Sus ojos nos observen, y que tarde en llevarnos ante Él después de la muerte."

—Lord Quandros Sylman, Gobernador de Landor IV

"Llegan en la oscuridad, moviéndose tan rápido que es imposible seguirlos con la mirada. Monstruos de colmillos de sierra, garras afiladas y ojos amarillos. Luchamos lo mejor que pudimos, el Emperador es testigo. No fue suficiente. Ni siquiera estuvo cerca. Sólo Jenks y yo lo logramos, y aunque me lleve el resto de la vida, juro que me vengaré."

—Sargento Veterano Rachelyn Culcher, 452º de Nachtmor Chargers

"Los valhallianos odian el frío como todos nosotros, sólo que les enseñan que quejarse constantemente irrita mucho a los Comisarios..."

—Soldado "Reiv" Daggat de la 17ª Guardia del Pantano de Drook, después de servir con los valhallianos

"Nos hemos encontrado escorpiones del tamaño de tanques de batalla; la semana pasada murieron tres hombres aquejados de Ojopútrido; he sudado como para llenar un lago; mis botas se las tragó un pantano movedizo y la arboleda es tan densa que en algunos sitios no puedes pasar entre los troncos. Por el Emperador, ¡me encanta este sitio! ¡Es como estar en casa!"

—Comentario sobre Varestus Prime del Capitán Rock del III de Catachán, los "Diablos Verdes"

"Algunos le llamaban un monstruo, un demente de hecho; la línea entre la extática determinación y la enloquecida implacabilidad es vaga y confusa. Es cierto que ordenó el bombardeo de mundos enteros hasta que se sometieron. También es cierto que hubiese llevado a sus hombres hasta las fauces de la muerte por toda la eternidad si finalmente estos no se hubiesen sentido agotados. Es verdad que a veces ordenaba el exterminio de mundos enteros que se habían opuesto a sus fuerzas. Pero eso no era todo lo que él era. Era magnánimo en la victoria y muchas veces perdonaba a un mundo que le había impresionado con su valor y coraje. También era un hombre muy espiritual; impelido por el deseo de una mayor gloria para el Emperador, no solo por su propia fama. Estaba consumido por sus deseos, un hombre apasionado que estaba dispuesto a pagar cualquier precio por cumplir sus sueños de conquista. El Imperio necesitaba hombres así en ese momento, cuando de nuevo se hallaba en el umbral de la grandeza. Las Apostasías habían acabado, el Tratado de Ceres había reunido a la Tierra y Marte de nuevo y el Cónclave del Monte Amalath había sido origen de nuevas promesas. Era el hombre indicado para que esas promesas se cumplieran, para extender el abrazo del Emperador una vez más. Fue él quien llevó al renacido Imperio a través de los fuegos de la batalla profiriendo su grito de nacimiento de una nueva era dorada, el cénit del poder de la Humanidad. Sin él, quién sabe qué hubiera podido pasar, qué dudas no hubieran enraizado de nuevo en el corazón del Imperio. Nadie se atreve a decir que no piensa en él con la mayor y humilde gratitud por las maravillas que realizó. Muchos hombres han sido llamados locos por poner en práctica lo que muchos Santos han predicado. El Comandante Solar Macharius fue uno de estos hombres."

—Extracto de Atravesando la Oscuridad, del General Sejanus

"Han visto más muertes y destrucción que cualquier otro soldado ha visto en diez vidas."

—General Sejanus, justificando la negativa a seguir avanzando de las tropas de la Cruzada Machariana

"Seguidme si avanzo. Matadme si retrocedo. Vengadme si muero."

—Atribuido al Señor de la Guerra Solon en el Tactica Imperium

"¿A qué demonios de los siete infiernos del Caos estáis esperando? ¿Una orden personal del Emperador? Cuando digo que toméis esa puñetera colina, quiero decir que ataquéis esa maldita colina, ¡no que os quedéis mirándola! Me importa un pijo si hay cincuenta L'Huraxi ahí arriba. ¡Como si hubiese cincuenta mil L'Huraxi! Nuestras órdenes son tomar esa colina, y voy a tomar esa maldita colina aunque eso signifique que tenga que matar personalmente a esos gigantes de piel púrpura. Maldita sea, seguidme. Os enseñaré cómo se hace. Eso es, quédate ahí. ¡Camillero! Deja de gimotear, Brook, te queda la otra pierna. ¿Crees que yo lloré como un bebé cuando perdí mi brazo? ¡Y una mierda, me levanté y degollé al maldito tiburón terrestre con mis propios dientes! Eso es, Sargento Reed, que prueben el acero de Catachán. ¡Me cago'n... su sangre apesta! Apunta con el lanzallamas a esa trinchera; achicharra a esa escoria. ¡Esa trinchera, idiota, no esta! Oh sí, huele cómo se queman esos alienígenas. Huele mejor que el desayuno, verdad? Dame esa puñetera granada. ¿Es que tengo que hacerlo yo todo? ¿Ves? Eso no es una armadura como la de un tanque imperial. No, es una armadura del tipo "me parto con la brisa", de las de "espero que no me escupan". ¡Haced algo más que escupirles! ¡Tú! ¡Sí, tú! Recoge la mano del Sargento Creek. Quizás los médicos puedan cosérsela luego. No os paréis ahora, malditos vagos hijos de restos orgánicos, solo estamos a mitad de la maldita cuesta..."

—Coronel Straken en la Batalla de la Cresta de Moden, Campaña de Yaquit 27

"Un buen general no conduce a su ejercito a la destrucción solo porque sepa que éste le seguirá a donde él vaya."

—Tactica Imperium

"Un buen soldado obedece sin vacilar. Un buen oficial ordena sin dudar."

—Tactica Imperium

"En un ejército, el equilibrio es la clave del éxito. Un comandante que ponga sus esperanzas únicamente en el armamento pesado perderá maniobrabilidad. Un comandante que confie demasiado en el combate cuerpo a cuerpo verá como su ejército cae ante el fuego enemigo. Cada elemento debe trabajar en armonía, de forma que la efectividad del ejercito sea mayor que la suma de sus partes."

—Tactica Imperium

"No golpees hasta que estés preparado para aplastar por completo al enemigo, pero entonces ataca sin piedad, destruye todo vestigio de resistencia y no dejes a nadie con vida."

—Tactica Imperium

"Identifica tu objetivo. Concentra en él tus disparos y olvídate de todo lo demás. Cuando lo hayas destruido, elige otro objetivo. ¡Esta es la manera de asegurar la victoria!"

—Tactica Imperium

"Intenta siempre combatir al enemigo según tus propios términos. Si tu fuerte es el combate cuerpo a cuerpo, enfréntate a él en terreno denso, donde tu ventaja será aún mayor. Si eres bueno en el combate a distancia, mantente alejado de él. Si eres superior en número, ataca en un amplio frente. Usa tus reservas para romper las líneas del enemigo cuando estas estén colapsadas. Si te ves superado en número, concentra tus efectivos de forma que el enemigo solo pueda combatir a tus mejores tropas. Nunca nadie ha perdido una batalla en la que haya sabido aprovechar los puntos débiles del enemigo."

—Tactica Imperium

"Una batalla en campo abierto es una trampa. En la guerra, un objetivo a la vista es una baja, por muy bien protegido que esté."

—Tactica Imperium

"Un comandante debe tener el coraje de ver su plan cumplido, para bien o para mal. Las guerras se ganan o se pierden en el despliegue."

—Tactica Imperium

"Si eres fuerte, finge debilidad. Si eres débil, aparenta ser fuerte. Sea cual sea tu posición, ocúltasela al enemigo y él se desgastará combatiendo a sus propios fantasmas."

—Tactica Imperium

"Si el enemigo viene en una gran horda, como acostumbran a hacer los Orkos, intenta dirigirlos a un estrecho desfiladero o espacio cerrado de forma que la ventaja numérica se torne en su contra. Apelotonados unos contra otros, no podrán ni avanzar ni retirarse."

—Tactica Imperium

"Pueden matar a nuestros héroes, destruir nuestro mundo y hacernos retroceder hasta las puertas de Terra. No importa, porque resistiremos. Mientras sólo uno de sus hijos e hijas respire, Cadia resistirá con nosotros."

—Capitán Tarn, 20º de Cadia

"Lucharemos esta batalla con fe y coraje inquebrantables. No nos dejaremos intimidar, no daremos un paso atrás. ¡Este es el mundo del Emperador y no vamos a rendirnos!"

—Señor Mariscal Toshenko dirigiéndose al 16º de Vostroya en la Defensa de Nimbosa

"¿Qué pido a mis oficiales? Solo que cumplan su deber con fuego en sus estómagos y plegarias en sus labios."

—Gobernador de la Fortaleza de Cadia Ursarkar E. Creed

"Aunque nuestros tanques y artillería son muy poderosos, son los incontables Guardias Imperiales los que hacen morder el polvo al enemigo. Dejemos que vengan."

—Ursarkar E. Creed

"Quien ha conocido el frío de Valhalla no teme ninguna otra penuria de la galaxia. Monstruosidades alienígenas, enfermedades sobrenaturales, el barro, la sangre, los cuchillos; cosas de niños comparadas con eso."

—Sargento Voshnek, 97º de Valhalla, "los Corazones de Hielo"

"Guardias Imperiales, sois la última línea de defensa frente a las hordas alienígenas que amenazan a nuestro Imperio. Cada uno de estos valientes guerreros es parte de una gran fuerza que servirá en la guerra eterna. Combatiréis en campos de batalla de mil mundos diferentes a lo largo y ancho de la galaxia. Y, ya sea en los ejércitos de nuestra gran cruzada o sirviendo en la más pequeña guarnición, debéis estar orgullosos de sacrificar vuestra vida para salvar a la Humanidad de sus enemigos."

—Comisario Yarrick, en un discurso a los nuevos reclutas

"¡Héroes de Armageddon! Habéis resistido el pérfido salvajismo de los Orkos y ya no hay nada a lo que debáis temer. Alzad bien alto los estandartes negros de la venganza: ¡ahora es nuestro momento!"

—Última transmisión del Comisario Yarrick antes de partir junto a los Templarios Negros a la cruzada contra Ghazghkull Mag Uruk Thraka

"Ver romperse las líneas de mis enemigos no es una victoria. Verlos huir en desorden es un triunfo falso. Cuando yazcan en el suelo aplastados bajo nuestras botas, cuando hayan sido masacrados y enviados al olvido sin posibilidad de volver, solo entonces consideraré que se ha ganado la batalla."

—Comandante de Compañía Zamalod Chikova

Fuentes

• Codex: Guardia Imperial (2ª Edición).

• Codex: Guardia Imperial (1º y 2º de 3ª Edición).

• Codex: Catachán (3ª Edición).

• Codex: Guardia Imperial (5ª Edición).

• Codex: Astra Militarum (6ª Edición).

• Codex: Astra Militarum (8ª Edición).