Chifladoz

Taradoz Chifladoz Orkos 1ª Edición Kevin Walker ilustración — Orko Chiflado abrazando repentinamente a un Marine Espacial.

Los Chifladoz, Chaladoz o Taradoz (Madboyz en inglés) son Orkos desquiciados y excéntricos. Todos los Orkos son combatientes feroces y agresivos para quienes no hay nada mejor que una buena pelea, pero los Chifladoz son los más locos por la batalla de todos. Los Chifladoz están tan mal de la cabeza que hasta los demás Orkos creen que han perdido un tornillo. Por ello, su presencia resulta más dañina que beneficiosa hasta para una raza tan anárquica como los pieles verdes, de forma que se les despliega en sus propias unidades mortíferas.

Descripción[]

Los Chifladoz son Orkos cuyo comportamiento revela su completa y obvia locura. Por supuesto, los Orkos normales también hacen cosas que un humano consideraría dementes, pero los Chifladoz son tan temerarios, maníacos o directamente extraños que hasta los demás Orkos los consideran locos.

La mayoría de tribus Orkas pueden afirmar tener Chifladoz en su seno, pero su incidencia varía entre unos pocos o una cantidad amplia. Los Chifladoz, aparte de su obvio estado mental y de sus expresiones faciales, comportamiento excéntrico y gestos extraños, son por lo demás similares al resto de Chikoz guerreros Orkos. Visten los mismos colores e iconos de Klan.

El resto de Orkos los considera diferentes y especiales, pero en cualquier caso son parte natural de la sociedad Orka. Aunque viven apartados, en pequeños barrios de chabolas lindantes con los principales asentamientos Orkos, no son rechazados ni maltratados; de hecho, son considerados afortunados y su presencia es tenida por un buen augurio. Aunque la mayoría de Chifladoz están simple y sencillamente locos de atar, otros son genios inspirados cuyas invenciones e ideas son de inmenso valor para los Orkos. Los demás Orkos tienen el más absoluto respeto por los Chifladoz, cuyas enloquecidas ideas son consideradas signos del favor de los dioses Orkos Gorko y Morko.

Los Chiflados son extremadamente impredecibles. Sus mentes bullen con extrañas ideas y repentinos entusiasmos momentáneos, y tienen tendencia a actuar siempre como una unidad. Si un Chiflado decide que ha perdido una de sus botas, ¡es muy probable que todo el pelotón se obsesione con la idea de encontrarla! Así son las cosas con los Chiflados.

Esto conlleva algunos inconvenientes, como que decidan improvisar concursos de gritos a medianoche, o que un Chiflado decida que su sombrero perdido está en alguna parte de tu casa. Los Orkos suelen tolerar estas payasadas, conscientes de que si molestan a un Chiflado, pronto podrían encontrarse a sus amigos buscando ajustar cuentas.

Los Chiflados tienden a agruparse naturalmente, bien formando peñaz con la misma manía, bien en bandas variadas. Prefieren ir así a la batalla, en unidades propias, para poder pelear con el enemigo a su manera sin que otros Orkos les discutan. Cuando no combaten, los Chifladoz suelen reunirse en sus propias fogatas y chabolas, farfullando y gesticulando felizmente en compañía de sus congéneres. En ocasiones, una reunión de Chifladoz atraerá a otros Orkos dispuestos a entretenerse con sus payasadas.

Manías[]

Los tecnogenes de los Orkos les permiten heredar el conocimiento y la experiencia de sus antecesores, y les permiten mantener un alto nivel de tecnología. Desafortunadamente, no siempre resulta así. Siempre existen unos pocos individuos cuyas influencias genéticas no consiguen combinarse apropiadamente. Algunos Orkos descubren en cierto momento que su mente se encuentra llena de distracciones y contradicciones; ideas absurdas sobre el universo zumban en su cerebro, y curiosos fragmentos de conocimientos inconexos se filtran continuamente en su conciencia. Otros son Orkos Zalvajes cuyos pequeños cerebros no pudieron asimilar el descubrimiento del más sencillo aparato mecánico, volviéndose psicóticos y perdiendo los escasos procesos mentales racionales que tenían. También puede ser, sencillamente, que hayan sufrido un impacto de metralla en la cabeza.

Físicamente son idénticos al resto de los Orkos, pero suelen ataviarse con vestimentas estrafalarias y llevan desde cubos oxidados a pterardillas disecadas, lo que demuestra que en el fondo son bastante "especiales". Aunque en conjunto los demás Orkos les llaman Chifladoz, cada uno de ellos está sujeto a diferentes manías que caracterizan su comportamiento. Algunas de las manías más habituales se describen a continuación:

Frenétikoz - Los Frenétikoz están sometidos a un entusiasmo sin control. Casi cualquier cosa puede excitarlos, y pasará mucho tiempo antes de que se calmen. Una discusión acalorada por la posesión de un sirviente Gretchin, la animación de un concurso de comer Garrapatos o un paseo a bordo del último invento del Mekániko puede empujarles a un frenesí histérico. A menudo un Frenétiko sentirá la emoción y diversión de otros Orkos y se sumará a la fiesta sin saber de qué se ríen. Seguirá dando saltos de pura alegría mucho después de que se hayan ido todos.

Paranoikoz - Estos Orkos tienen la sensación constante de que algo o alguien se la tiene jurada. Esto puede resultar en una animosidad excesiva hacia otras razas alienígenas, e incluso hacia otros Klanes y castas. Puede adoptar la forma de un odio instantáneo hacia un Orko, Gretchin o Snotling en particular, u otra cosa totalmente irracional. Sea cual sea el objeto de su rechazo, los Paranoikoz huirán o lo atacarán de inmediato nada más verlo, sea lo que sea que esté ocurriendo a su alrededor.

Fóbikoz - Estos Orkos exhiben un terror irracional hacia algo aparentemente inocuo. Estos temores pueden variar desde el horror ante un Garrapato reptante, hasta una cierta aprensión en presencia de un Eztrambótiko. Es habitual ver Fóbikoz asustados de pequeñas criaturas inofensivas (como insectos voladores o pequeños mamíferos). Si los Fóbikoz se encuentran con algo que despierte sus miedos, caen inmediatamente presa del pánico y la confusión.

Maníakoz - Los Maníakoz sufren obsesiones irracionales. Sea cual sea el objeto de la obsesión del desgraciado Orko, le absorberá por completo hasta que otra cosa atraiga su atención. Esto puede expresarse en forma de miedo u odio irracional. Quizás el Maníako rechazará repentinamente un color en concreto y reaccionará violentamente contra cualquiera que lo vista. En otra ocasión el pobre desquiciado podría ser visto retrocediendo horrorizado ante un Garrapato de aspecto inocente que cualquier Orko cuerdo habría agarrado sin dudar para zampárselo. El cambio de una obsesión a otra puede ocurrir de golpe y sin previo aviso. Un Maníako puede ser visto acercarse sigilosamente por detrás a un Gretchin, levantar un tronco de madera para atizar un golpe a la pobre criatura, y entonces dejar caer la porra sin motivo, acariciar la cabeza del Kanijo con cariño y largarse a perseguir una mosca o mirar una seta venenosa.

Ezkizoz - Estos Orkos no pueden distinguir entre la realidad y la ilusión. En consecuencia, los Ezkizoz viven en un extraño mundo de delirios y fantasía. Tan pronto pueden parecer flemáticos y despreocupados como el resto de Chikoz, como cambiar de golpe su humor y volverse extremadamente hiperactivos sin motivo aparente. Ocasionalmente, uno puede encontrarse con un Ezkizo escondido entre los hongos que crecen junto a las letrinas, retozando con los Snotlings porque cree ser uno de ellos. Desgraciadamente para estos pobres Snotlings, el Ezkizo puede decidir de repente que ahora es un Garrapato Gruñidor salvaje, perseguirlos fuera de allí y corretear hasta morder la rodilla del Orko más próximo.

Boboz - Estos Orkos son reconocibles por sus miradas de ojos abiertos y vacíos. Los Boboz parecen estar en un estado permanente de perplejidad. Solo pueden obedecer instrucciones sencillas, aunque es muy probable que las olviden en cuanto se las digan. En cuanto eso suceda, pueden vagar sin rumbo durante horas.

Melankólikoz - Estos Chifladoz sufren una profunda melancolía, en la que añoran las batallas del pasado y la compañía de camaradas perdidos en esos antiguos conflictos. Los Melankólikoz se inspiran en las viejas leyendas de batallas, y a menudo se sientan juntos en torno a la hoguera para recordar viejas glorias. Los Melankólikoz lloran sin motivo, o se entregan sin explicación a la rabia o el entusiasmo. Esto suele deberse a que sus imaginaciones se encuentran lejos del presente, reviviendo alguna hazaña heroica del pasado.

Delirantez - Estos Chifladoz parecen estar continua y enloquecidamente felices. Se ríen largo y tendido en voz alta, y sus desquiciadas carcajadas resuenan por el campamento poniendo nerviosos hasta a los más impasibles Orkos o enemigos. Absolutamente nada puede borrarles la sonrisa de sus caras. Se ríen ante el peligro, y sonríen encantados tras sufrir heridas horribles como perder las piernas en una explosión. Los Matazanoz encuentran esta actitud de lo más desconcertante. Los simples deleites de la batalla, sus ruidos, explosiones, aromas acres y confusión en general provocan risas de gozo a los Delirantez. Siempre están dispuestos a probar suerte en un concurso de comer Garrapatos, o a subirse a bordo del último cacharro de un Mekániko.

Genioz - Estos Chifladoz son una especie de prodigios con problemas. Son individuos introvertidos, maniáticos y erráticos con capacidades prodigiosas para la memoria y el cálculo. Su manía toma la forma de una habilidad mental superior, lo que les convierte en excéntricos sabelotodo. Prácticamente los únicos Orkos que pueden comprender el sentido de su palabrería son los Mekánikoz. Estos los buscan como acompañantes, ya que pueden servir prácticamente como ordenadores personales. Aunque los Mekánikoz suelen fabricarse ordenadores y calculadoras primitivos, consideran que el guirigay algebraico que hablan los Genioz es más preciso y útil. A los Genioz, por supuesto, les encanta encontrar a un Orko dispuesto a quedarse escuchándoles, y se aferrarán a cualquier Mekániko que muestre interés en ellos. Como resultado, los Mekánikoz suelen ir acompañados por Genioz, especialmente en cualquier gran proyecto que lleve las capacidades de los Mekánikoz al límite. El principal problema de los Genioz es que tienden a marcharse solos si se les deja sin supervisión, y acabarán por reunirse con el resto de los Chifladoz, dejando a los Mekánikoz plantados en medio de un proyecto difícil.

Por supuesto, hay otras manías menos frecuentes, y el mismo Orko puede tener dos o más manías. Estas formas más raras de Chiflado no suelen tener nombres específicos en la jerga Orka, sino que se les mete en el mismo saco que a los demás.

Pero lo que verdaderamente importa es que los Chifladoz son una gran fuerza a contar en el campo de batalla, ya que sus payasadas a menudo confunden al enemigo. Incluso los estrategas de la táctica no pueden predecir los movimientos anárquicos de una peña de Chifladoz en medio de la emoción de la batalla. Después de todo, ¿cómo puedes prever lo que hará un enemigo que es igualmente capaz de destrozar a uno de tus pelotones con sus manos desnudas, que de pelearse entre ellos para ver quién es capaz de meterse antes un Snotling por la nariz?

Comportamiento en combate[]

Artículo principal: Usuario Blog:Aresius King/Reglas de los Chifladoz Orkos de 1ª a 8ª Edición.

En el campo de batalla, los Chifladoz forman su propia unidad, conocida como la Peña Chiflada. Aunque tienden a entregarse a estallidos repentinos de violencia desencaminada, son considerados un recurso valioso en combate, aparte de que no es fácil impedirles que se sumen. Las Peñaz Chifladaz van a la batalla con el resto de la partida de guerra, pero el resto de Chikoz procurarán mantenerse a una distancia prudencial de ellos.

Por algún motivo, muestran un don increíble para hacer exactamente lo correcto en el momento perfecto, a veces dándole la vuelta a la batalla en favor de los Orkos con un acto de heroísmo desquiciadamente temerario: destruir un tanque enemigo, asaltar una posición de armas pesadas inexpugnable, o destruir un bastión invulnerable. Los Chifladoz son tratados con una mezcla de diversión y asombro por los Orkos ordinarios.

Una Peña Chiflada se compone de montones de Chifladoz, cada uno de los cuales sufre su propia anormalidad mental: Frenétikoz, Paranoikoz, Maníakoz, Ezkizoz, etcétera. Por sí solo, cada Orko loco actúa de una manera característica de su condición, pero una Peña Chiflada actúa de una forma aún más extraña e impredecible. Con la emoción del combate, la demencia de un Chiflado de repente se extiende a los demás, hasta provocar un estallido colectivo de un tipo específico de locura. Cuando este pierda fuelle, será reemplazado por una serie de acciones igual de erráticas e imposibles de predecir, provocadas por los desvaríos de otro Chiflado. Esto seguirá sucediendo a lo largo de toda la batalla, causando quebraderos de cabeza a amigos y enemigos por igual.

De vez en cuando, sucede que los Chifladoz aciertan a hacer algo increíblemente apropiado en el momento justo, poniendo en serios aprietos al enemigo y salvando a alguna peña Orka del peligro en el último minuto. Por otro lado, son igual de capaces de vagar por el campo de batalla, gritando y gesticulando frenéticamente ante el enemigo, atrayendo su atención hacia ellos y hacia los Orkos que les rodean. Con los Chifladoz, nunca sabes lo que va a pasar a continuación.

Normalmente, los Chifladoz están tan ensimismados en sus propios desórdenes psicológicos que ignoran la lógica de la batalla. No obstante, algunos factores o sucesos pueden perturbar a los Chifladoz hasta el punto de causarles un cambio inmediato de humor: sufrir numerosas bajas en la unidad, ser objeto de un ataque psíquico o carga del enemigo, presenciar de cerca la huida o carga de una unidad aliada, sufrir una avería en sus armas o simplemente cumplir el desquiciado objetivo del momento pueden ser suficientes para hacerles cambiar de idea. Asimismo, si por algún motivo se alejan de la batalla, se darán cuenta de que se están alejando del sonido reconfortante de los Orkos gozando de la batalla, debatirán como enajenados durante unos minutos hasta que un nuevo humor se apodere de ellos, y volverán a la refriega.

Una de las pocas formas en que los Orkos "cuerdos" pueden intentar detener a los Chifladoz cuando se desatan en su propio bando es hacer intervenir a un Eztrambótiko, que podrá provocar un cambio de humor, aunque será totalmente incapaz de dictar el resultado. Si el desafortunado Eztrambótiko sobrevive a verse empujado por sus Kuidadorez en medio de su camino, les transmitirá desesperadamente señales psíquicas que provocarán un repentino cambio de humor. Siempre hay una posibilidad de que esto genere un comportamiento menos peligroso, o al menos de que la Peña Chiflada corra hacia el enemigo y haga algo útil (como estorbarle a él en lugar de a los Orkos). Por supuesto, es posible que el humor y comportamiento resultantes sean exactamente iguales a los anteriores, ¡nunca se sabe con los Chifladoz!

Comportamientos Frenétikoz[]

"¡Maldita zea mi eztampa, aporread a komo ze llame!" - Toda la peña dispara a un lugar aleatorio. Quizás lo que les ha llamado la atención es una mosca, un Garrapato, un francotirador enemigo o Grotbag, un Gretchin "ke no haze máz ke zakarze mokoz en lugar de trabajar, el muy dezgraziao".

"¡Waaagh, akabad kon elloz a kabezazoz!" - La peña decide atacar a cabezazos a cualquier unidad o cosa (incluyendo vehículos u objetos inanimados) que se encuentre ante ella.

"¡Oye, mi akribillador ha zalido volando!" - La peña ha quedado tan perturbada a nivel psíquico que está rodeada de actividad poltergeist. Las armas, objetos y piedras flotan a su alrededor. La mayoría de proyectiles que les disparan quedan atrapados en el aire sin hacerles daño, y los impactos cuerpo a cuerpo son misteriosamente desviados.

"El plan aztuto" - A Skabgrub se le ha ocurrido un "plan aztuto", que según él es tan efectivo como inescrutable. Esta estrategia para despistar al enemigo y alcanzar la victoria incluye muchos pasos aparentemente ilógicos y extraños.

"Kapturad el ekipo" - La peña decide robar armas enemigas. Mientras dure la manía, la peña puede tomar las armas de cualquier enemigo muerto con el que se hayan enfrentado cuerpo a cuerpo. Estas armas pueden ser usadas por la Peña Chiflada.

"Ya no oz juntamoz" - Un grupo de Chifladoz que comparte la misma manía se agrupan, animándose mutuamente con sus gestos y delirios hasta formar un grupo claramente distinto del resto, separándose de la unidad. A partir de entonces forman su propia Peña Chiflada, aunque nunca cambiarán de manía en el resto de la batalla.

Comportamientos Paranoikoz[]

"¡Waaagh! ¡Algo chungo viene a por nozotroz!" - Los Chifladoz se convencen de que una "cosa" horrible y acechante (que nadie ha visto) se esconde justo enfrente de ellos. Temiendo que se les eche encima, los Chifladoz se retiran o corren hacia la cobertura más cercana.

"¡Waaagh! ¡De akí no penzamoz zalir!" - Los Chifladoz son presa del horror de la guerra, y se acurrucan aterrorizados. Si ya están a cubierto, no se atreverán a asomarse para disparar. Si están al descubierto, correrán tan rápido como puedan hacia la cobertura más cercana.

"Ezoz chikoz harán zalir korriendo a loz maloz" - La mejor manera de evitar ser heridos es, evidentemente, buscar a algunos "chikoz bien duroz" que los protejan. La peña se acopla a la unidad amiga más cercana y la sigue a corta distancia por detrás en un intento de ocultarse del enemigo y evitar recibir disparos o ataques.

"¡Kuerpo a tierra chikoz, algo ze noz viene encima!" - Convencidos de que un proyectil realmente enorme viene volando hacia ellos a la altura de sus cabezas, todos los Chifladoz se tiran al suelo esperando el terrible impacto. Seguirán así hasta cambiar de humor, momento en el que se levantarán un poco avergonzados.

"¡Kuidado chikoz, ezto ez un kampo de minaz!" - Uno de los Chifladoz tropieza con algo enterrado en el suelo y toda la peña cree que se ha metido en un campo de minas. A partir de ahora se moverán de puntillas y comprobarán el terreno con sus rebanadoras.

"Nozotroz también zomoz chikoz" - La peña se preocupa porque los demás Orkos no les tratan como "Orkos de verdad". Con gritos de "Mirad lo ke hazen", "Zeguid a loz otroz chikoz antez de ke noz den ezkinazo" y "Hagamoz komo elloz", la peña sigue a la unidad de Chikoz más cercana e imita su comportamiento igual que una banda de Gretchins, con la intención de demostrar que son como el resto de "loz chikoz".

"¿Ké me paza, doktor?" - La peña sufre un ataque repentino de hipocondría. Seguros de haber pillado una amplia variedad de horribles enfermedades, se apresuran a consultar al Matazanoz más cercano. Como este les ignorará, le seguirán estornudando, tosiendo, agarrándose las cabezas y exigiendo tratamiento para sus enfermedades imaginarias.

"¡Enzeñemoz a ezoz dezgraciaoz kómo ze pelea!" - La peña siente un odio irracional hacia los cobardes que acechan tras cobertura o que disparan desde lejos. La peña se moverá directamente hacia el enemigo más cercano que se comporte de un modo tan despreciable y le cargará en cuanto pueda.

"¡Algo grande viene p'aká, korred!" - La peña siente un repentino miedo irracional hacia los vehículos y no se acercará a ninguno de ellos. Si están a bordo de un vehículo, saltan fuera de inmediato.

"Ezta koza ez máz grande ke nozotroz" - La peña decide que no le gustan las cosas más grandes que un Orko; puede que les den miedo, o que las odien con toda su alma.

Comportamientos Fóbikoz[]

"No me guztan ezoz ruidoz" - A la peña le aterroriza el estruendo de la batalla. Si aún no hubiese ruido, es el temible silencio lo que les pone de los nervios. Se acurrucan y no pueden hacer nada.

"¡Dizparad a eze mozkito, el maldito me ha pikado!" - La peña trata por todos los medios de disparar al mosquito que picó a Nafdreg en sus partes bajas para que no vuelva a intentar picar a nadie más.

"Todoz noz eztán mirando" - Convencidos de que todo el ejército Orko les está mirando con ojos críticos, y preocupados por no hacer el ridículo, los Chifladoz deciden hacer algo increíblemente valiente y avanzar con bravura hacia la unidad enemiga más poderosa que puedan ver.

"¡Rojo, rojo! ¡Odiamoz el rojo!" - La peña ha visto algo rojo, y no les gusta un pelo. Por supuesto, una cosa es llevarlo puesto ellos, y otra que lo vista el enemigo. La peña se lanza a atacar a la unidad enemiga más cercana que lleve algo rojo en sus estandartes o uniformes. Si no hay ninguna unidad así a la vista, odiarán otro color (aunque a los Orkos siempre les gusta el verde, incluso a los que están locos).

"Oye, dónde eztán laz anillaz" - Gribnak revisa sus armas y descubre que la anilla de seguridad de su granada se ha caído (por supuesto, estaba mirando el extremo equivocado). Cuando se lo comenta a sus compañeros, todos descubren que sus granadaz están en la misma situación. La peña se convence de que sus granadaz están a punto de estallar, así que las tiran todas en una dirección aleatoria antes de saltar por los aires, hasta las de reserva.

"Waaagh, ay ay ay" - La peña se queda catatónica, acurrucándose sin poder moverse ni hacer nada que no sea farfullar para sí mismos. Quizás se acaban de dar cuenta de lo peligrosa que es una batalla, o se les ha olvidado en qué bando están y creen que todos van a por ellos. En cualquier caso, este es un comportamiento muy poco Orko.

"Waaagh, aparta eze aparatejo de mí" - Los Orkos no dominan demasiado bien la tecnología en el mejor de los casos, y esta ineptitud normalmente oculta estalla de repente en un ataque de tecnofobia. No usarán más armas que sus rebanadoraz y no se acercarán a ningún vehículo o arma de apoyo.

"Waaagh, akí no hay ná pa kubrirze" - El calor del sol ardiente y el vacío del cielo despejado sobre las cabezas de los Chifladoz se combinan para marearlos. La grandeza del espacio asalta sus conciencias, y les asombra su inmensidad. La peña sufre un ataque de agorafobia, y buscará la cobertura más cercana para esconderse de la luz y el vacío abrumador.

"Zeguid moviéndooz para ke no noz pillen" - A la peña le asusta quedarse quieta demasiado tiempo, por si atraen la atención de los francotiradores enemigos o la artillería. Deben seguir moviéndose a toda costa, para confundir al enemigo y seguir vivos.

"Lo ke necezitamoz ez un kampo de tiro dezpejado" - La peña detesta las cosas que estorban en el campo de batalla. Se quedan quietos y disparan contra el elemento molesto del paisaje que les resulte más cercano, en un intento de despejar el terreno. Esta reacción a veces resulta sorprendentemente útil en emboscadas en las junglas.

Comportamientos Maníakoz[]

"¡Oye, eze ez mi akribillador!" - La peña se queda quieta y empieza a pelearse por quién es el verdadero dueño de cada arma, incapaz de moverse, disparar, pelear o de hacer nada útil en general.

"¡Waaagh, enkontrad el garrapato!" - Toda la peña se obsesiona con recuperar el Garrapato mascota de Skabnark, que es el ojito derecho de la unidad. La peña se queda quieta y no hace nada este turno excepto echarse al suelo para rebuscar la pequeña criatura.

"Eza ez la klave de la batalla, debemoz kapturarla" - Un Chiflado muy enterado aconseja a la peña hacerse con el control de un elemento del paisaje aleatorio en territorio enemigo, ya que con ello se obtendrá la victoria. La peña se lanza a intentar arrebatárselo al enemigo y defenderlo.

"Me pregunto ké hay en ezaz ruinaz" - La peña se obsesiona con descubrir qué hay en los edificios del campo de batalla (si no los hay, cualquier otro elemento del terreno capaz de ocultar cosas valdrá). Se moverá hacia el edificio o ruina más cercano y se asegurará de que no esconde ningún enemigo (o botín) oculto. Intentarán echar a cualquier enemigo de allí disparando o combatiendo, pero su principal objetivo es entrar y ponerlo todo patas arriba "buzkando kozaz, ya me entendéiz".

"¿Kién kiere darze una vuelta?" - La peña decide montarse en el vehículo enemigo más cercano (si no los hay, uno amigo valdrá). Se acercarán, lo seguirán y treparán por sus flancos, golpeándolo con sus puños y atacando a cualquier tripulante que puedan alcanzar.

"Ezperad a ver el blanko de zuz ojoz, muchachoz" - La peña decide que es hora de practicar puntería. La unidad más cercana es designada como objetivo y la unidad se pone al descubierto, disparando al azar con toda la calma del mundo y gritando divertidos con cada impacto o fallo, sin preocuparse de las consecuencias. Si no están a distancia de tiro, seguirán disparando de todas formas, esperando que con la práctica se resuelva el problema de no darle a nada.

"¡Waaagh! ¡Orkos! ¡Orkos! ¡Orkos!" - Tanto si les acompaña un Eztrambótiko como si no, los Chifladoz empiezan un cántico ritual espontáneo, acumulando masas de energía psíquica. La energía acumulada se determina del mismo modo que la que genera un Eztrambótiko. Sin embargo, los Chifladoz no pueden lanzar poderes psíquicos, sino que continúan acumulando energía, arriesgándose a perder (del todo) la cabeza. Si un Eztrambótiko descubre que la Peña Chiflada está cantando, puede intentar apresurarse a alcanzarlos (o ser arrastrado allí por sus Kuidadorez) para aprovechar esta "batería" psíquica natural para sus poderes. Puesto que son los Chifladoz los que se arriesgan a sufrir el reventón cerebral, la energía adicional procedente de ellos no cuenta para el límite del Eztrambótiko pero sí para la potencia de sus poderes psíquicos. La energía psíquica de los Chifladoz es, por tanto, perfectamente segura para los Eztrambótikoz, que suelen buscar su compañía como fuente segura de poder.

"¡Reuníoz junto al Noble, muchachoz!" - La peña decide que el Noble de mayor rango a la vista es el epítome de la orkidad, un personaje admirable y digno de ser seguido con devoción. La peña se le acercará y le seguirá a una distancia discreta allí donde vaya, para fastidio del desafortunado Orko. Solo dispararán a quien dispare al objeto de su adoración, y no dudarán en atacar a los enemigos que le ataquen. El Noble puede asumir el mando de la Peña Chiflada, que obedecerá todas sus órdenes.

"Loz Ekzéntrikoz zon la fuente de toda la kultura" - Uno de los Chifladoz pronuncia un emotivo discurso sobre los Ekzéntrikoz, alabándolos como el verdadero cimiento de la civilización Orka, individuos que deberían ser amados y apreciados por todo Orko de bien. Su boca se llena de sabiduría, kultura y babas. Profundamente conmovidos, los Chifladoz deciden separarse en pequeños grupos más o menos iguales en tamaño, que se acoplan a los Ekzéntrikoz como "ezkoltaz" (tanto si les gusta como si no). De este modo, algunos de los Ekzéntrikoz desplegados adquieren pequeños séquitos de Chifladoz.

"Keremoz eztar a laz órdenez de un gran Orko" - La peña decide ofrecer sus servicios como séquito de un Noble de renombre. Este heroico personaje (el Noble más cercano) se ha ganado su admiración. La Peña Chiflada se unirá a él y lo proclamará su "líder". A partir de ese momento lo acompañará por las buenas o por las malas, probablemente estorbándole, atrayendo atención y fastidiándole. Sin embargo, le protegerán lealmente y dispararán o atacarán a cualquiera que le dispare o ataque.

Comportamientos Ezkizoz[]

"Vamoz a enzeñarlez modalez" - La peña se queda quieta y dispara contra la unidad Orka más cercana, creyendo (¿erróneamente?) que les han insultado.

"Waaagh, me duele el zezo, llamad al doktor" - Por una misteriosa coincidencia, la peña reacciona lógicamente ante sus circunstancias. El jugador puede controlar completamente a la peña durante este turno.

"Konfraternización kon el enemigo" - La peña decide que la guerra ha sido un terrible error y que los Orkos y los Squats y los humanos y los blandengues Aeldari y los bichoz y los demás no son tan mala gente, después de todo. La peña se dirigirá hacia la unidad enemiga más cercana gritando saludos alegres, bromeando con buen humor e incluso ofreciendo un buen Garrapato para hacer buenas migas con ellos. No dispararán ni atacarán, ni les molestará que les disparen. La unidad enemiga se quedará demasiado sorprendida para hacer más que quedarse pasmada, y no disparará a los Chifladoz al ser presa de una absoluta incredulidad.

"Vamoz a decírzelo, muchachoz" - La peña decide felicitar a un personaje enemigo aleatorio por su puntería, valor o liderazgo. A los Orkos les gustan los enemigos dignos, así que los Chifladoz quieren ir y decírselo personalmente. Avanzan hacia el héroe enemigo ignorando el peligro, pero pueden responder a los disparos enemigos.

"No pueden herir lo ke no pueden ver" - La peña está convencida de que es invisible. Quizás uno de los Chifladoz le gritó algo a su colega en otra peña y este le ignoró, así que sacó la conclusión lógica: "Anda, Nazbog no me ha vizto, ezo kiere dezir ke debo zer invizible". Informada de este fortuito fenómeno, la Peña Chiflada se envalentona y avanza hacia el enemigo sin miedo. Se creen totalmente invulnerables y no buscan cobertura ni se esconden. El enemigo se queda totalmente de piedra por esta demostración de temeridad y no abre fuego contra ellos, con lo que los Chifladoz se convencen aún más de que son invisibles. La peña puede disparar, moverse y combatir de forma normal mientras se crea invisible.

"Dizparad al chulito de la trenza de oro" - La peña decide enfocar sus disparos en un solo enemigo.

"Te vaz a enterar de lo ke ez bueno" - La peña empieza a discutir sobre "lo ke falla en la zociedad Orka de hoy". Este intenso debate político y filosófico se descontrola rápidamente y los Chifladoz se dedican a pegarse unos a otros para hacer entender sus posturas. Las pasiones se inflaman hasta el punto de que la peña se divide en dos facciones enfrentadas. Sea a tiros o cuerpo a cuerpo, la peña seguirá peleando hasta la muerte o hasta que les sobrevenga un cambio de humor, en cuyo caso las facciones supervivientes se convierten en unidades independientes.

"No zabéiz nada de Garrapatoz" - Durante una parada para almorzar, los Chifladoz empiezan a discutir sobre qué especie de Garrapato es mejor como entrante, y qué vino de hongos le va mejor. Los ánimos se caldean rápidamente y los Orkos se ponen a rebuscar en los zurrones de los demás, criticando las habilidades culinarias de sus Gretchins. Mientras dure la discusión, la peña se queda quieta sin hacer nada más que gritarse, gesticular y agitar Garrapatos en el aire. Es muy probable que la acalorada disputa divida la peña en dos facciones iguales que, incapaces de aguantar la compañía de tan despreciables pedantes garrapastronómicos, se separarán como unidades independientes.

"Kapturad eze pedazo de terreno de ahí" - La peña se llena de repentina resolución y determinación. Deciden ocupar y defender un elemento aleatorio del campo de batalla. Se moverán hasta él disparando y atacando a cualquier enemigo que lo ocupe. Si la posición es capturada, la peña se quedará allí defendiéndolo.

"Kozaz eroikaz ke zalvarán a la tribu" - La peña emprende una sorprendente acción decisiva en un intento heroico de volver las tornas de la batalla: cargar y destruir el arma de apoyo enemiga más cercana, inutilizar el vehículo enemigo más cercano, avanzar hasta quedar a corta distancia del enemigo, localizar y atacar una unidad enemiga, o avanzar, capturar y defender el elemento de terreno más cercano.

Comportamientos Boboz[]

"El último en darle a eza koza grande ez un Kanijo" - La peña se queda quieta y lanza granadaz contra el objeto más próximo, sea lo que sea (un elemento del paisaje, un vehículo enemigo, un enemigo, un aliado Orko que está a sus cosas, un Gretchin rastrero, etc.; les da igual).

"¿Kuál ez el zignifikado de todo?" - Skarbog plantea la pregunta definitiva, y la peña se sienta de inmediato donde esté, dejándolo todo de lado para rascarse el melón y debatir sobre el significado de la vida, el universo y todo lo demás. Después de todo, ¿qué sentido tiene pelear mientras no se resuelva este asunto vital? Solo unos Orkos totalmente locos se preocuparían de esas cosas.

"Noz ponemoz de huelga por konzeguir máz piñoz" - La peña ha llegado a la conclusión de que les va a tocar menos de lo que sería justo en el reparto del botín tras la batalla a no ser que hagan algo al respecto ahora mismo. Se sientan y se ponen de huelga, cantando eslóganes rebeldes y gritando exigencias al Kaudillo con la esperanza de que capte el mensaje. No participarán en la batalla mientras dure esta manía.

"M'abuuuuurrroooooo" - La Peña Chiflada es presa de un ataque irracional de indiferencia y aburrimiento. Se quedan quietos y se apalancan sobre sus armas, ignorando totalmente la batalla y al enemigo mientras se quejan unos a otros de lo aburridos que están.

"¡Firmez!" - Hora de pasar revista. Una ola del desquiciado carácter de los Zoldadoz de Azalto se apodera de la peña. Surge de uno de ellos que, a gritos y agitando un bastón de mando, se cree que es un Zargento Intruktor: "¡Firmez, FIR-MEZ! Kuando diga que zaltéiz, ZALTÁIZ. Meketrefez, ¡ké zoiz! ¡KÉ ZOIZ!". Este bombardeo de palabras hace que los Chifladoz salten y se pongan en posición de firmes como si les fueran a pasar revista, mirando al enemigo sin preocuparse por el peligro. Permanecerán firmes mientras les dure la manía y el ruidoso siga haciendo su inspección.

"Oye, ¿ké eztán haciendo ezoz?" - La peña se fija en la unidad enemiga más cercana y empieza a imitar cada uno de sus movimientos, hasta el punto de copiar su comportamiento como hacen los Gretchins con "loz chikoz". La Peña Chiflada puede permanecer a la distancia que quiera (o que parezca segura) de esa unidad, pero imita sus acciones; si el enemigo dispara o ataca a una unidad amiga, ellos dispararán o atacarán a otra unidad enemiga para igualar ese comportamiento.

"No noz guzta nada ke no ezté kon nozotroz" - Dripnak mira en dirección a otra peña de Orkos y cree ver a uno de ellos haciéndole burla. Se lo hace saber a sus compañeros, y pronto cada pequeño gesto o movimiento de la otra unidad es interpretado por los Chifladoz como un insulto personal. La peña siente una animosidad irracional contra la unidad amiga más cercana: empezarán a tirarles piedras y gritarles insultos. Si sus "rivales" pierden la compostura, atacarán a los Chifladoz; si no, les ignorarán, tomando sus actos como otra de sus payasadas. Si les atacan, los Chifladoz se sentirán justificados y responderán con la misma agresividad.

"Eztamoz infiltrándonoz" - La peña siente una fuerte cautela. Avanzan despacio, separados y pegados al suelo, aprovechando toda la cobertura disponible.

"Ze ha perdido" - La peña sufre una ola de deserciones. Algunos Chifladoz olvidan lo que estaban haciendo (algo para nada inusual) y empiezan a irse por su cuenta. Estos desertores seguirán disparando y combatiendo. Cada uno tendrá una manía y actuará únicamente en función de esa locura.

"Zi hazemoz lo ke hazen elloz noz irá bien" - Los Chifladoz pierden su (ya escasa) capacidad de pensar por sí mismos, y se limitan a copiar a la unidad Orka más cercana. Harán lo que sea que haga, cargando y disparando cuando lo hagan ellos, a poder ser hacia los mismos objetivos. Si huyen, ellos también lo harán.

Comportamientos Delirantez[]

"Jajaja, chupaoz eza, kochinoz": La peña se detiene y dispara todo lo que tenga a mano contra el enemigo más cercano. Si no hay enemigos a la vista, dispararán directamente hacia el territorio enemigo.

"Vamoz, ke la vida ez una fiezta" - La peña está loca de alegría de estar una vez más en combate y no puede esperar a meterse de palos. Escoge una unidad o posición enemiga aleatoria y avanza hacia ella, disparándole y buscando trabarse en combate con ella.

"¡Waaagh, Orkos, Orkos, Orkos!" - La peña se dirige directamente hacia el Eztrambótiko más cercano y forma tras él cantando con toda su alma. Si no hay Eztrambótikoz a la vista, se quedará quieta y cantará a grito pelado igualmente, disparando sus armas al aire sin darle a nada.

"¡Waaagh! ¡Ataque de gas!" - Grotwort se comió anoche un platazo de curry de Garrapato y hongos, regado con doce pintas de cerveza de setas, y esto tiene consecuencias predecibles. El pobre estalla con el efecto de una granada de gas de hongos (y sobrevive, con cara de vergüenza). Los demás se apartan de él hasta que se despeje la nube de miasma verde. Esto puede parecer un comportamiento verdaderamente sensato, pero es que la locura fue comerse un curry de Garrapatos y hongos antes de una batalla sin preocuparse por el bienestar de sus camaradas.

"Tomad zuzto, kobardez" - La Peña Chiflada echa a correr hacia la unidad enemiga más cercana y le grita ¡BU! Este humor desquiciado pasma completamente a la unidad objetivo, que no puede acertar a disparar contra los Chifladoz, ni a atacarles cuerpo a cuerpo.

"Ez genial zer un Orko" - Un extraño efecto bioquímico resultante de la mezcla de adrenalina, vino de hongos doblemente fermentado, vindaloo de Garrapatos y los jugos gástricos de los Orkos provoca a los Chifladoz un inesperado, y para nada desagradable, subidón de energía. La peña se anima tanto con su esta nueva potencia y con la emoción de la batalla que no se cansa.

"Eztamoz luchando en la gran paliza del zielo" - Los Chifladoz se convencen de que ya han muerto y están en el Valhalla de los Orkos, disfrutando de una genial batalla eterna. "Zi ya eztáz muerto, no te pueden matar doz vecez, tiene zentido, ¿no?". Armados con esta filosofía incontestable, avanzan temerariamente hacia el enemigo para causar toda la destrucción posible. ¡Qué diver! Por supuesto, cualquier chiko que caiga por el camino "zolo ze eztá ezkakeando pa zakear botín, ¿verdad?".

"¡Duelo de baile!" - La peña estrena una danza rompedora, con la que esperan romper algo, preferiblemente al enemigo.

"¡Waaagh!" - La peña arranca un concurso de gritos. El sonido de los alaridos Orkos es demasiado para cualquiera que pueda oírlo. Cualquier unidad amiga o enemiga que esté cerca de la peña debe apartarse hasta donde los gritos sean más soportables.

"Jar, jar, jar" - La peña es presa de un ataque de risa desquiciada. Son completamente incapaces de hacer nada excepto reír sin control de un modo muy amenazante. Cualquier enemigo que esté combatiendo cuerpo a cuerpo con ellos se asusta y huye sin golpearles.

Comportamientos Melankólikoz[]

"¡Loz Orkos tienen ke zer agrezivoz!" - La peña está decidida a avanzar todo lo posible hacia el territorio enemigo. No abrirá fuego, pero cargará contra cualquier enemigo que se interponga en su camino. Solo demostrando el verdadero espíritu Orko se podrá ganar la batalla.

"Nafgrub eztá muerto, Skabgit eztá muerto..." - A la peña le invade un profundo sentimiento de pérdida por sus compañeros perdidos y deciden vengar sus muertes matando a cualquier enemigo que se ponga a tiro.

"No, no, no noz moverán..." - La peña está resuelta a desafiar al enemigo y defender su posición contra viento y marea. Se plantan en formación de cuadro vacío mirando en todas direcciones. Dispararán contra cualquier cosa que no sea verde que se les ponga a tiro. No huirán ni se retirarán, y morirán en sus puestos.

"Venganza por Uzgrub" - Un personaje enemigo aleatorio es considerado culpable de haber matado a un antiguo camarada. Da igual que sea verdad o no: los Chifladoz lo creen y le perseguirán por todo el campo de batalla para ajustar cuentas a tiros o cuerpo a cuerpo. Se enfrentarán a cualquier enemigo que se interponga en su camino.

"Noz loz llevaremoz al otro barrio kon nozotroz" - La peña cree que no sobrevivirá a la batalla, así que decide llevarse a varios enemigos consigo a la tumba. La peña se vuelve suicida y totalmente carente de miedo, e ignorando todo peligro cargará al corazón del ejército enemigo en busca de matanza y una muerte honorable en combate.

"Devolvednoz a nueztro amigo, kabronez" - La peña se convence de que un camarada ha sido capturado por una unidad enemiga y debe ser rescatado. La peña irá a salvarle, atacando a cualquier enemigo que se interponga en su camino.

Comportamientos Zedientoz de Zangre[]

"¡Allá vamoz, allá vamoz, allá vamoz!" - La peña está ansiosa por partirle la jeta al enemigo. La unidad cargará a cualquier enemigo que tenga a su alcance, o en su defecto correrá tan rápido como pueda hacia el enemigo más cercano para atacarlo cuerpo a cuerpo, pudiendo disparar por el camino. Si no hay enemigos visibles, la peña avanza hacia el territorio enemigo.

"¡Waaagh! ¡Dakka, dakka, dakka!" - La peña se queda quieta y dispara contra el enemigo más cercano. Si no hay objetivos enemigos disponibles, la peña los buscará y avanzará hacia el territorio enemigo.

"¡Nada puede parar a loz Chifladoz!" - La legendaria fuerza sobrenatural de los Chifladoz se manifiesta. Su furor de combate es tal que pueden doblar las armas enemigas con las manos desnudas.

"¡A la kargaaaaa!" - Un Chiflado particularmente locuaz incita a los demás a un frenesí de fervor combativo con un conmovedor discurso. Hirviendo de rabia, la peña avanza directamente hacia el enemigo más cercano, cargándole tan pronto como sea posible.

"¡Ezo me pone furiozo!" - La peña enseña sus colmillos y echa espumarajos por la boca, ya que es presa de una absoluta ferocidad rabiosa. Quieren desgarrar, destrozar y morder como Garrapatos Comecaras salvajes.

"¡Venid a por nozotroz!" - La peña decide demostrar su temeraria valentía plantándose en el camino de los vehículos enemigos. Se desplazarán hasta un vehículo enemigo y se interpondrán en su camino, desafiando a la tripulación a atropellarlos y disparando sus armas. La idea es saltar en el último minuto; gracias a los increíbles reflejos y las agallas de los locos, los Chifladoz tienen bastantes posibilidades de lograrlo.

"Koged trofeoz pal Kaudillo" - La peña empieza a saquear los cadáveres enemigos para su "pila de bajaz", un montón de enemigos muertos y chatarra saqueada.

"¡Ponedlez karaz!" - La Peña Chiflada intenta aterrorizar al enemigo haciendo muecas, enseñando sus colmillos y sacando sus lenguas. Esto resulta una imagen ciertamente horrible para cualquier unidad enemiga que pueda verles las caras.

"¡Dakka, dakka, dakka! Múzika para loz oídoz" - La peña es presa de un frenesí de disparo. Caen en un trance por el sonido rítmico y las sacudidas provocadas por los disparos de sus akribilladorez.

"Oz echo una karrera hazta la zima" - Los Chifladoz compiten por ver quién llega el primero a un elemento del terreno aleatorio, como una colina. Su velocidad resulta sobrenatural. Si su objetivo está ocupado por el enemigo, cargarán contra él.

Armamento[]

Una Peña Chiflada se compone de entre 5 y 20 Chifladoz armados con granadaz, un akribillador o una piztola y una rebanadora. Si pertenece a una tribu de Orkos Zalvajes, les puede acompañar un Doktor Zerdo para doparles.