Campeón de la Hermandad

Al frente de cada Hermandad de Caballeros Grises hay un único Campeón, un guerrero que ha renunciado a todas las otras disciplinas marciales para perseguir la perfección con el uso de la espada.

Mientras que el Campeón de la hermandad es el maximo responsable del entrenamiento marcial de los nuevos reclutas, su labor principal en el campo de batalla es actuar como guardaespaldas de su Hermano Capitán. Las habilidades y conocimientos de un oficial tan importante como un Hermano Capitán no son faciles de reemplazar, y por ello no es de extrañar que se le brinde el mayor nivel de protección que haya al alcance del Capltulo. Así pues, cada Campeón esta dispuesto a morir para proteger la vida de su Capitán. No obstante, un sacrificio tan heroico como ese rara vez será necesario: sólo los oponentes mas letales (o afortunados) tendrán la más minima posibilidad de franquear la barrera de un Campeon de la Hermandad, y aunque lo logren aún lo tendrán peor para sobrevivir al vengativo ataque que sin duda el Campeón descargará a continuación.

Campeón de la Hermandad en combate

Aún en el caso de que el Campeón de la Hermandad llegue a resultar abatido, sus enemigos harán mal en considerar que ya esta fuera de combate. Tras recibir una herida mortal, el Campeón de la Hermandad liberará un pulso de energia psíquica que se concentrara en su armadura aegis: una postrera descarga de magia prohibida para poder llevar a cabo una hazana final. Este impulso agonizante hará que la armadura vuelva a unir de manera temporal huesos y músculos, dando al Campeón caído la oportunidad de descargar un último ataque con el que ayudar a sus Hermanos de Batalla; un ataque que resultará aún más mortifero por inesperado. Tras esto, la inmortal alma del Campeón trascenderá por fin, y su cuerpo podrá ser más tarde recuperado y enterrado como es debido en las criptas de Anarca, a fin de que pueda seguir vigilando al mal de igual forma que ya hizo en vida.

Fuentes

Codex: Caballeros Grises (V Edición).