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Combate entre Devoradores de Mundos e Hijos del Emperador
La Batalla de Skalathrax fue la última campaña de la Legión Traidora de los Devoradores de Mundos como una Legión unificada. En ella, se enfrentaron a sus odiados rivales, los Hijos del Emperador, en el Mundo Demoníaco de Skalathrax en las profundidades del Ojo del Terror. Debido a los actos del antiguo Capitán de los Devoradores de Mundos Khârn, la XII Legión se consumió a sí misma casi por completo en un amargo conflicto interno que hizo que se dividiera en cientos de partidas de guerra menores. La Legión de los Devoradores de Mundos no volvería a reunirse completamente, salvo por un breve lapso durante la Primera Guerra de Armageddon en el M41.
Historia[]
Tras la Herejía de Horus, los Devoradores de Mundos se hundieron más aún en su sed de sangre y destrucción, abriéndose un sangriento camino a través del ya destrozado Imperio de la Humanidad antes de arrojarse a las retorcidas profundidades del Ojo del Terror. El relato de su búsqueda de un nuevo hogar es clave en la historia de esta Legión. Khârn, antiguo Palafrenero del Primarca Angron y ahora Berserker de Khorne, se ganaría la enemistad de su propia Legión por sus infames actos en el Mundo Demoníaco de Skalathrax. Las Legiones Traidoras de los Devoradores de Mundos y los Hijos del Emperador se enfrentaron en medio del gélido frío del helado Mundo Demoníaco. Tras un día entero de crueles combates, comenzó la frígida noche de Skalathrax. Horrorizados por las condiciones ambientales, que afectaban hasta a sus sobrehumanos metabolismos, todos los Marines Espaciales del Caos acordaron un alto el fuego temporal y se retiraron a sus refugios. La oscuridad traía consigo un frío tan severo que podía matar hasta a un Astartes en cuestión de minutos en el punto álgido de la larga noche. Khârn estalló en una terrible rabia ante la idea de que su matanza tuviera que posponerse una sola noche. Enloquecido al ver a sus camaradas Legionarios arrastrarse de vuelta a sus refugios como cobardes, tomó un potente Lanzallamas (luego conocido como la Marca Ardiente de Skalathrax) y los redujo a cenizas, matando con su Hacha Sierra Destripadora a cualquiera que intentó interponerse en su camino.
Durante el subsiguiente caos, Khârn fue asaltado por tres enemigos desconocidos. Sin detenerse, el Berserker saltó contra sus oponentes. Una bala perdida de bólter golpeó a Khârn en su pectoral, lo que cambió la trayectoria de su salto y le obligó a despachar a uno de los guerreros desconocidos con un golpe improvisado de revés con su Hacha Sierra. Entonces se revolvió y hendió la Pistola Bólter del tercer asaltante antes de dejarle inconsciente al estrellarle contra el suelo. Rápidamente blandió a Destripadora a su izquierda, y el Hacha Sierra mordió profundamente en la garganta del último Astartes Traidor, haciendo saltar chorros de sangre arterial en el gélido aire. Mientras estaba de pie sobre el guerrero caído y este intentaba recuperar su arma, Khârn reconoció el rostro del Marine: era su antiguo Centurión Gruner. Apoyando su espalda en un rincón entre los cuerpos de sus hermanos caídos, Gruner habló de locura y de traición, maldiciendo a Khârn por atreverse a atacar a los Hermanos de Batalla de su propia Legión.
Khârn el Traidor de los Devoradores de Mundos, Campeón de Khorne.
Khârn no le escuchó, y remató a Gruner allí mismo. Como principal campeón berserker de la XII Legión, Khârn había estado en los muros del Palacio Imperial. Había sido el último en ser sacado de Terra, con su cuerpo destrozado después de matar a un millón de los lacayos del Falso Emperador en la brecha de la Puerta del León. Nadie superaría jamás su cómputo de muertes. La Competición había terminado finalmente, y él había sido el vencedor. Khârn creía que la debilidad de los demás Marines Espaciales del Caos había sido la razón por la que habían sido derrotados en la Batalla de Terra; debilidad tanto de las demás Legiones Traidoras como de los propios Devoradores de Mundos. Lleno de asco por la flaqueza de sus camaradas, el Elegido de Khorne continuó matando a Hijos del Emperador y Devoradores de Mundos por igual, ganándose el título de "el Traidor", y en definitiva destrozando la unidad de su Legión y reduciéndola a partidas de guerra dispersas e independientes de Berserkers de Khorne. Estos destrozados restos de las Grandes Compañías de la XII Legión nunca volverían a unirse de nuevo y permanecerían divididos y enfrentados durante los siguientes diez milenios.
Aun así, el Dios de la Sangre quedó en definitiva complacido por la matanza, pues el Primarca Angron de los Devoradores de Mundos fue ascendido a Príncipe Demonio de Khorne, incluso aunque su Legión hubiese dejado de existir como una entidad militar coherente. Aunque Angron reuniría periódicamente a las dispares partidas de guerra de los Devoradores de Mundos para formar algo parecido a la gloria de la antigua XII Legión, los Devoradores de Mundos quedaron condenados a vagar por los campos de batalla de la Galaxia en busca de guerra, divididos en Escuadras sueltas o en partidas de guerra unidas a otros ejércitos, y luchando por nada más que la oportunidad de derramar sangre y cosechar cráneos. Muchos Devoradores de Mundos aún guardan hoy día un ardiente odio hacia Khârn por sus actos, aunque otros, más devotos del Camino Óctuplo de Khorne, admiran a su pesar su unívoca dedicación a la sangre y la matanza.
Video trasfondo[]
Fuentes[]
Extraído y traducido de Wikihammer 40K UK.
- Codex: Marines Espaciales del Caos (Ediciones 3ª y 4ª).
- Codex: Caos (2ª Edición).
- Index Astartes III.
- White Dwarf 201, 227 y 230 (Edición estadounidense).
- The Weakness of Others (Novela Corta), por Laurie Goulding.